Puerta cerrada

Tras entrenar ayer en doble horario, hoy el plantel dirigido por Tabárez volverá a trabajar en doble turno, aunque ya a puertas cerradas.
Mañana al mediodía el grupo -que ayer por la tarde se completó con la llegada del volante zurdo Álvaro Palito Pereira- quedará concentrado y por la tarde realizará una práctica de fútbol en el Estadio Centenario.

Sobre el equipo que comenzará jugando ante Paraguay, Tabárez no ha largado prenda.
En la conferencia de prensa brindada en el mediodía de ayer en el Complejo Uruguay Celeste, el técnico dijo al respecto. "Confieso que vengo con cosas planificadas, anticipadas, pero no al punto de ya dar el equipo y decirle a los jugadores: 'el sábado van a jugar éstos'. Primero porque no lo tengo y segundo porque tampoco sería bueno decirlo si lo tuviera".

Ante esta realidad, habrá que seguir esperando el paso de las horas para poder saber con certeza cuáles serán los once celestes. La duda sobre quién ocupará el arco continúa, aunque algunos indicios desde afuera parece que dan para pensar que el elegido será Sebastián Viera, lo que no descarta que otras cosas que no se advierten fácilmente inclinen la camisa 1 para Martín Silva. la diaria no lo sabe, y hoy no está con ganas de tirarse a adivinar cuál será el arquero el sábado.
En la zaga el panorama parece claro, con la presencia segura de Diego Lugano, Diego Godín y Martín Cáceres. En el lateral derecho puede jugar Bruno Silva o también Maximiliano Pereira, que además puede aparecer en la zona de volantes, donde sí estarán Sebastián Eguren, Diego Pérez y el Cebolla Cristian Rodríguez, y arriba lo más probable es que juegue la dupla Luis Suárez- Diego Forlán.

Pensando en que luego del partido ante Paraguay vendrá el duro choque contra Chile en Santiago, es bueno recordar que cinco jugadores celestes están con una amarilla y de recibir otra no podrán estar ante los trasandinos. Ellos son: Diego Lugano, Bruno Silva, Diego Arismendi, Maximiliano Pereira y Cristian Rodríguez. Asimismo para el juego en el estadio Nacional de Santiago ya quedará habilitado Andrés Scotti, que para el sábado está suspendido por dos amarillas.

Boca cerrada
También en el contacto con la prensa de ayer, Tabárez se refirió a un hecho acontecido en la práctica del lunes, donde a instancias del cuerpo técnico se le pidió al representante de jugadores Gerardo Boca Arias que se retirara del Complejo Uruguay Celeste.
Le preguntaron: "¿No quiere contratistas en la selección? Ayer le pidió a la seguridad que retirara a Arias y Rizzoto, que estaban acá", y el seleccionador nacional contestó: "Ayer [por el lunes] trabajamos en régimen de puertas abiertas, cosa que va a suceder hasta el entrenamiento de la tarde de hoy, jamás le preguntamos a nadie cómo se gana la vida y cuál es su actividad laboral. Es verdad que en el momento que nos percatamos que estaba la presencia del señor Arias dijimos a la seguridad que lo invitara a retirarse, pero no por ser contratista. Por otros asuntos que en estos momentos no voy a explicar porque estoy para cosas mucho más importantes y la dejamos ahí. Estoy para otra cosa, ya dije lo que tenía que decir".

El nuevo comerciante de futbolistas había dicho hace un tiempo a Diego Muñoz en el Portal 180 (http://www.180.com.uy/articulo/Habla-Arias-agarrese-fuerte): "[A Maxi Arias] lo representaban ellos y jugaba en el primero de Peñarol y por hacerle un mandado a Madrid no lo llevaron ni al Sudamericano ni al Mundial Juvenil. Entonces se rompió la relación porque es mi sangre y a mí cuando me tocan a mi sangre me enojo". Muñoz le repreguntó: "Pero lo que me estás diciendo es muy grave. ¿Nunca encaraste y le dijiste a Corbo lo que estaba pasando?", a lo que Arias respondió, hiriente: "¿Y vos te creés que Corbo no lo sabe? ¿Vos te creés que Tabárez no lo sabe? Tabárez no llevó a mi sobrino a la selección porque Rebollo [integrante del cuerpo técnico de la selección] le dijo que era un delincuente y que andaba con el tío. Y eso que hizo Rebollo fue un mandado a Paco y al Pollo Madrid. Acá se sabe todo".
Seguramente, ése tiene que haber sido el motivo por el cual, con justicia, Tabárez hizo funcionar el derecho de admisión en el Uruguay Celeste.