Racing copó el Parque Palermo y derrotó contundentemente a Central
Por momentos juega a otra velocidad, al estilo argentino; en otros saca pechera y juega de contragolpe. Consigue los resultados, que es lo más importante.
Ése es Racing, que ya no es revelación sino una realidad. Junto a la murga La Cofradía, que es una de las mejores expresiones murgueras del 2009, es la sensación de un barrio que vive un dulce momento.
Quedó claro cuando empezó el partido quién iba a ser el protagonista. Los de Verzeri no jugaron como en otras ocasiones; igualmente se las arreglaron para abastecer a Balsas, quien no estuvo fino y marró dos chances claras de gol. Hasta que, promediando el tiempo inicial, se salió de su cueva el zaguero Brasesco y definió como un delantero, 1 a 0 la academia. Central no tuvo ni una cerca del arco de Contreras. Extrañó a Fabián Coelho, ausente por suspensión. El artiguense es el conductor del equipo y su lugar lo ocupó Vonder Putten, quien no pudo abastecer a sus compañeros.
El complemento siguió igual, mal jugado y lejos de los arqueros. Garisto sacó a Vonder Putten y le dio ingreso a Usucar: con ese cambio buscaba más recuperación de pelota, porque perdía con los ágiles volantes albiverdes.
El palermitano intentó la igualdad jugando frontalmente, buscando que Martín Crossa les ganara las espaldas a los zagueros. Faltando 20 sufrió la expulsión de Da Luz; el pelado venía jugando un buen encuentro. Racing aprovechó un lindo centro y Falucho Silva marcó el segundo tanto. Quedaban 13 minutos y era muy difícil para el palermitano. Insinuó con el descuento de penal de Crossa. Pero casi enseguida, en una contra mortal, como le gusta a Verzeri, Quiñónez liquidó el pleito. Notable campaña de Racing en su vuelta a primera. Ganó 8, empató 8 y perdió 2; está quinto en la anual, empatado con Peñarol detrás de Nacional, Danubio y Defensor.
Leo Bernini
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