martes, 15 de septiembre de 2009

Casi seguros

Con finales ajustadísimos, Malvín y Trouville llegaron a la final que se jugará hoy
Estuvo linda la primera jornada del cuadrangular amistoso que ayer se jugó en Colón. Los dos partidos tuvieron final cerrado y se vieron cosas interesantes. Hoy se juega la final en el gimnasio de Malvín, así como el partido por el tercer puesto entre los perdedores de anoche, Olimpia y Hebraica. Los encuentros de hoy en la avanida Legrand serán a las 19.45 y a las 22.00.

A primera hora el partido tuvo sus vaivenes pero parecía que era para los macabeos, que tenían una ventaja de 62-51, con buena participación del ya conocido Terrel Taylor. Álex Carcamo el otro extranjero macabeo, estuvo muy saltarín pero sin acierto en su despliegue. Un parcial de 17-3 de Malvín hizo pasar a los de la costa. Dos triples consecutivos de los amarillos los hicieron pasar 71-68, pero con terrible puntería pasó el elenco de López 74-73 con un triple de Joaquín Izuibejeres para ganar, porque un increíble triple de mediacancha de Carcamo sobre la chicharra no fue validado.

Buena mano
De los televisados, el partido entre olimpistas y rojos fue de lo más estimulante en tren de despertar expectativas acerca de la Liga que se viene. Es que con el equipo de Camiña en pleno proceso de trabajo, con sostén en la propuesta colectiva de firme defensa, y los de Colón presentando dos extranjeros versátiles para acompañar a Reque Newsome -que, como lo definió Tato López en 180.com, ya es más un uruguayo nacido en Estados Unidos que un estadounidense nacionalizado-, se armó un partido que tuvo alternativas interesantes y hasta buen goleo sobre todo en el primer tiempo. Fueron casi siempre tanto a tanto y lo primero llamativo fue la capacidad goleadora de media distancia de Landon Adler, que en los primeros 10 minutos acertó tres de los intentos desde los 6,25. Si el estadounidense fuera un tirador, un base o un ayuda no llamaría la atención, pero sucede que Adler es un grandote de 2,05 que se desempeña como ala pivot. Buena tarjeta de presentación. James Parlow demoró un ratito más en sacar su tarjetita, pero cuando la mostró en la segunda parte también terminó acalambrando con un elástico jump-shot de distancia que le hizo sumar tres triples en el último cuarto.

Trouville jugó más sistemas que casi siempre terminaron en pase bonus para Marques Lewis, que ya con dos campeonatos consecutivos en Uruguay se muestra como un rebotero goleador con garantía. El otro estadounidense de los rojos, el caderudo pivot Jason Klotz, ayer mostró menos que en los otros partidos, pero de todas maneras deja la sensación de que con aporte simple pero con peso puede ser importante debajo de los acrílicos.

El primer tiempo fue más lindo que el segundo, en el que se enlenteció el juego y estuvo bastante más brusco. 40-35 para el local se habían ido a los vestuarios y en el tercer cuarto los de Pocitos lo dieron vuelta bajando el goleo de los de Lovera a sólo 6 puntos.

Pero en el último cuarto del show de Parlow los de Colón se acercaron hasta ponerse a dos a falta de segundos, pero perdieron la pelota sin tirar. Tras cortar con falta a Aguilera y quedar a tres puntos tras el acierto de uno de los libres del fraybentino, Parlow tuvo el último tiro y fracasó, por lo que Trouville ganó 67 a 64 y hoy estará nuevamente en la final, en este caso ante el equipo local, Malvín.

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