De repente la del fin de semana pasado no fue la mejor carrera del germano uruguayo Adrian Sutil (hace dos años brilló en Mónaco con un auto menos competitivo), pero por fin llegaron su primeros puntos en la Fórmula Uno: arañó el podio, llegando cuarto a pocos metros de Raikönnen, al que amenazó durante el 90% de la competencia.
Sutil confirmó entonces que lo de hace dos semanas en Bélgica no había sido una casualidad (pole position y segundo puesto de su ex compañero Giancarlo Fisichella, ahora bastante discreto en Ferrari) y que los Force India andan muy bien. Especialmente, andan bien los motores Mercedes Benz, los mismos que usan los Brawn GP, que con el uno-dos que lograron en la pista italiana parecen haber retomado la iniciativa del campeonato.
Pero ojo: el par Button-Barrichello esta vez volvió a invertir el orden tradicional. El brasilero se mostró más concentrado que el inglés, igual que en toda la segunda parte del campeonato, y quedó a 14 puntos de su compañero de equipo, cuando hay 40 en juego.
Entonces, si los Red Bull de Vettel y Webber parecen estar knock out (en el caso de Webber literalmente), ahora la pelea parece acotada a los dos pilotos de Brawn. Ojalá que haya libertad para correr dentro del equipo británico. Barrichello, relegado varias veces a lo largo de su carrera, tiene derecho a una salida digna en su último año de Fórmula Uno. Y Button todavía tiene que demostrar que merece ser campeón por algo más que la ventaja que acumuló en las primeras carreras.
Gabo Rochinotti
martes, 15 de septiembre de 2009
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