Las semifinales del Este tuvieron unos partidos de ida realmente ardientes. En el Juan Antonio Lavalleja, ante una muy buena entrada de público, Minas derrotó a su clásico rival, Maldonado, 2 a 1 en un partido altamente friccionado en el que la visita buscó imponer la fuerza, que no es lo mismo pero es parecido a imponerse a la fuerza. Luis Díaz abrió el marcador para los locales cuando corría un cuarto de hora de juego. En la segunda parte el supergoleador Mario Amorín puso el segundo para los serranos, y faltando sólo cinco para el final los de Maldonado -no sólo son fernandinos, ya que también están los jugadores carolinos- se pusieron a tiro en el global con la anotación de Hernán Menosse. En la revancha en el Campus, que parece se jugaría el jueves, si Maldonado gana 1 a 0 clasifica.
El otro juego semifinal fue un festejado empate, no por el punto sino por las condiciones de la paridad, dado que jugando como local en Pando, Canelones del Este recién pudo llegar a la igualdad después de cinco minutos de descuentos, cuando Marcelo Saucedo perforó la valla arachana. Melo se había puesto en ventaja con un gol del reconocido Rino Lucas cuando faltaban cinco minutos para ir al descanso. Veinte minutos antes, el mismo punzante delantero que ha vestido varias casacas del profesionalismo había desviado un remate penal. En el segundo tiempo los auriverdes locales cargaron y cargaron como para tratar de exorcizar el penal errado por Federico Devitta a los 45 minutos. Finalmente, el empate llegó y el grito de gol de Alonso (Alonso lo relató, Saucedo lo hizo) se escuchó en todos lados. La revancha está pactada para el miércoles en Melo.
lunes, 16 de febrero de 2009
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