Rampla Juniors ganó el Torneo Apertura, el Torneo Clausura y la Tabla Anual, pero no fue campeón por eso.
River Plate lleva ganados tres partidos finales contra Rampla Juniors pero no es campeón por eso.
¿Cómo se jugó la temporada del femifútbol? ¿Qué objetivos perseguían sus impulsores?
El año pasado, al final de la temporada se jugaron cuatro finales entre River Plate y Rampla Juniors; una definió el Clausura igualado, otras tres definieron el Uruguayo. Y fueron un éxito, y lograron mucha difusión, valor importantísimo en una modalidad en crecimiento pero aún no aceptada como fuente de información y disfrute deportivo por el grueso de la prensa especializada.
Antes se jugaba Apertura y Clausura. Las finales eran eventuales. Si eran por definición de los torneos cortos se jugaba un partido. Si había un campeón del Apertura y otro del Clausura, tres finales entre ellos. Si el mismo equipo era campeón de ambos torneos cortos se consagraba campeón uruguayo y no había finales.
La pregunta que fue respondida positivamente era "si las finales son tan beneficiosas, ¿por qué no sacarles el carácter de eventuales?". Y así se hizo: se creó una fase final con los cuatro mejores equipos de la temporada y se le daba ventaja deportiva al campeón de la Tabla Anual. Por eso se jugó un partido semifinal y dos finales (de la fase final). Y empezaron los duelos entre Rampla y River, vencedores en las semis.
Queda explicado por qué Rampla no fue campeón ganando Apertura, Clausura y TA. Pero, por haber ganado la TA, llegó a la postemporada con gran ventaja: 1) si ganaba la fase final eran campeón uruguayo; 2) si no ganaba la fase final -como pasó, porque perdió los dos partidos ante las riverplatenses- tenía derecho a dos partidos más en la llamada Súper Final, la que se comenzó a jugar ayer; 3) si hubiera ganado el partido de ayer, ya hubiera sido campeón uruguayo, porque en caso de empate en puntos el campeón era el mejor de la TA.
Tras ganar ayer 4-1, River será campeón con otra victoria o un empate. Rampla debe ganar para lograr el título porque en ese caso igualará la Súper Final en tres unidades y la igualdad le beneficia por ser mejor de la TA, como ya fue dicho.
Otra razón de imponer una Fase Final al Campeonato Uruguayo 2008 fue dar más emotividad a la fase regular, con varios equipos que disputaban la cuarta posición de clasificación. Allí estuvieron buscando ese objetivo Huracán Buceo y Huracán FC -que jugaron la semifinal-, Albion, Artigas del Sauce y Cerro, entre otros.
lunes, 22 de diciembre de 2008
¡Para rallarse!
River Plate (f) le ganó 4 a 1 a Rampla (f) y tomó ventaja
La cancha quedaba lejos y el tiempo no acompañaba: parcialmente nublado con ráfagas de viento y probabilidades de lloviznas, imitando a Vázquez Melo. Sin embargo, esta barra se fue a la cancha del cuadro San Eugenio Universitario, en el Paso de la Arena, y se aventuró a ver la mismísima Súper Final de la Temporada, como la denomina el reglamento de la AUF, que establece las características de la definición del Campeonato de Fútbol Femenino 2008.
Con poco público y ante la extraña presencia de una barra de Rampla Juniors que pareció foto de otro partido, comenzó a rodar la pelota y las posibilidades de campeonar eran más próximas a las de la Villa del Cerro, ya que de ganar el match se calificarían como las campeonas. Pero el primer tiempo fue de superioridad darsenera indiscutida. A un minuto de empezar el partido, Lourdes Fleitas, de River, mandó un centro para que Carla Arrúa, de cabeza, marcara el primero para las del Prado. River flechó la cancha y eso permitió que la actitud ofensiva pusiera contra las cuerdas a la defensa ramplense. A los 20', y culminando una jugada que arrancó desde la mitad de la cancha, Fleitas marcó el segundo para River, después de dejar a su paso a tres jugadoras de Rampla que intentaron detenerla sin éxito. Iban 2 a 0 y River quería más. Para Rampla -equipo que llegó como favorito a la Súper Final por haber sido el campeón del Torneo Apertura y Clausura 2008- la empresa no era fácil. Le costó llegar con claridad y las veces que lo hizo fue por iniciativa de Adriana Castillo en sintonía con Juliana Castro. Pero la superioridad seguía notándose en la cancha. A los 41', Fleitas, que tuvo un desempeño de ésos para el recuerdo, ganó una vez más en velocidad y potencia, y mandó a guardar la pelota, venciendo las manos de la arquera picapiedra, Sofía Olivera. Pero Rampla no moría en ese 3 a 0. A los 45' y ya casi en momento de irse al descanso, Juliana Castro sacó un tiro cruzado de derecha que alcanzó la red. Iban 3 a 1 y Rampla no quería soltar la esperanza del título. A pocos minutos del pitazo de la jueza Patricia da Silva que indicaba la ida a vestuarios, Natalia González, del equipo picapiedra, mandó un zapatazo que fue a rebotar en el horizontal. Se salvó River.
Los segundos 45' no se vivieron con la misma emoción que los primeros. El partido se volvió trancado, sin llegadas claras que aportaran sobresaltos, pero sí apareció la llovizna (anotale un punto a Vázquez Melo). Para Rampla, la dupla Castillo-Castro fue fundamental en el intento de jugadas de ataque por varios frentes, aunque no llegaron a convertirse en gol. Para River quedaba un tanto más, que llegó a los 45', motivado por la falta en el área cometida contra la juvenil Jennifer Clara. La Sub 15 fue la responsable de patear de los 11 pasos, y, al convertir, cerró un partido de proeza para las darseneras: 4 a 1 es un resultado contundente, y más cuando los porotos estaban acumulados en el cartón verdirrojo.
El plantel de River tiene jugadoras experientes, que han integrado la selección, y son algo mayores que las de Rampla. Ayer, y en sentido contrario, al equipo riverplatense le faltó Patricia Pintos, jugadora clave para la recuperación de pelotas, que fue expulsada por doble amarilla en el último partido de la Fase Final, el domingo pasado. Tampoco vendría mal recordar que River tiene a la goleadora del campeonato en su plantel, Rossana Soria, que lleva convertidos 43 goles.
Con este resultado, se jugará el próximo fin de semana la segunda finalísima. Si River gana o empata, saldrá campeón del Uruguayo. A Rampla le sirve sólo ganar. Si bien es complicada la definición, y estas finales y finalísima y la mar en coche, no me van a decir que no le aporta una pizca de suspenso y emoción a la definición del campeonato.
DETALLES
Jueces: Patricia da Silva, Alejandra Trucidos, Claudia Umpiérrez.
Público: los de siempre y los que no entendieron que no da para eso
Rampla Juniors: Sofía Olivera; Nadia Bounous, Noelia Alcaide, Natalia González (81' Bettina Speranza), Florencia Vicente; Natalia Seoane (46' Aída Camaño), Valeria Chury, Alejandra Laborda, Yessica Moreno (77' Jimena Suárez); Adriana Castillo, Juliana Castro. Suplentes: Luciana Gómez, Carolina Pereyra, Denisse Dufau. DT: Juancito Castillo
River Plate: Shana Palacio; Loreley Villarubia, Yenny Martirena, Mayra Padrón, Paula Viera, Guillermina Rodríguez; Carla Arrúa (85' Jennifer Clara), Katherine Melgar (52' Joana Marín), Carla Quinteros (64' Marisol González); Lourdes Fleitas, Rossana Soria. Suplentes: Verónica Villar, Angélica Souza, Nicole González, Yamila Echeberri. DT: Álvaro González.
Goles: 1' Carla Arrúa, cabezazo en el segundo palo (RP), 20' gran jugada de Lourdes Fleitas, que de mitad de cancha arrió a tres rivales y convirtió, 41' habilidad más potencia y velocidad dan el tercer gol de River, el segundo de Fleitas (RP), 45'Juliana Castro traslada, entra por derecha y convierte con tiro cruzado (RJ), 90' Jennifer Clara de penal que le cometieron a ella misma (RP).
Patricia Pujol
La cancha quedaba lejos y el tiempo no acompañaba: parcialmente nublado con ráfagas de viento y probabilidades de lloviznas, imitando a Vázquez Melo. Sin embargo, esta barra se fue a la cancha del cuadro San Eugenio Universitario, en el Paso de la Arena, y se aventuró a ver la mismísima Súper Final de la Temporada, como la denomina el reglamento de la AUF, que establece las características de la definición del Campeonato de Fútbol Femenino 2008.
Con poco público y ante la extraña presencia de una barra de Rampla Juniors que pareció foto de otro partido, comenzó a rodar la pelota y las posibilidades de campeonar eran más próximas a las de la Villa del Cerro, ya que de ganar el match se calificarían como las campeonas. Pero el primer tiempo fue de superioridad darsenera indiscutida. A un minuto de empezar el partido, Lourdes Fleitas, de River, mandó un centro para que Carla Arrúa, de cabeza, marcara el primero para las del Prado. River flechó la cancha y eso permitió que la actitud ofensiva pusiera contra las cuerdas a la defensa ramplense. A los 20', y culminando una jugada que arrancó desde la mitad de la cancha, Fleitas marcó el segundo para River, después de dejar a su paso a tres jugadoras de Rampla que intentaron detenerla sin éxito. Iban 2 a 0 y River quería más. Para Rampla -equipo que llegó como favorito a la Súper Final por haber sido el campeón del Torneo Apertura y Clausura 2008- la empresa no era fácil. Le costó llegar con claridad y las veces que lo hizo fue por iniciativa de Adriana Castillo en sintonía con Juliana Castro. Pero la superioridad seguía notándose en la cancha. A los 41', Fleitas, que tuvo un desempeño de ésos para el recuerdo, ganó una vez más en velocidad y potencia, y mandó a guardar la pelota, venciendo las manos de la arquera picapiedra, Sofía Olivera. Pero Rampla no moría en ese 3 a 0. A los 45' y ya casi en momento de irse al descanso, Juliana Castro sacó un tiro cruzado de derecha que alcanzó la red. Iban 3 a 1 y Rampla no quería soltar la esperanza del título. A pocos minutos del pitazo de la jueza Patricia da Silva que indicaba la ida a vestuarios, Natalia González, del equipo picapiedra, mandó un zapatazo que fue a rebotar en el horizontal. Se salvó River.
Los segundos 45' no se vivieron con la misma emoción que los primeros. El partido se volvió trancado, sin llegadas claras que aportaran sobresaltos, pero sí apareció la llovizna (anotale un punto a Vázquez Melo). Para Rampla, la dupla Castillo-Castro fue fundamental en el intento de jugadas de ataque por varios frentes, aunque no llegaron a convertirse en gol. Para River quedaba un tanto más, que llegó a los 45', motivado por la falta en el área cometida contra la juvenil Jennifer Clara. La Sub 15 fue la responsable de patear de los 11 pasos, y, al convertir, cerró un partido de proeza para las darseneras: 4 a 1 es un resultado contundente, y más cuando los porotos estaban acumulados en el cartón verdirrojo.
El plantel de River tiene jugadoras experientes, que han integrado la selección, y son algo mayores que las de Rampla. Ayer, y en sentido contrario, al equipo riverplatense le faltó Patricia Pintos, jugadora clave para la recuperación de pelotas, que fue expulsada por doble amarilla en el último partido de la Fase Final, el domingo pasado. Tampoco vendría mal recordar que River tiene a la goleadora del campeonato en su plantel, Rossana Soria, que lleva convertidos 43 goles.
Con este resultado, se jugará el próximo fin de semana la segunda finalísima. Si River gana o empata, saldrá campeón del Uruguayo. A Rampla le sirve sólo ganar. Si bien es complicada la definición, y estas finales y finalísima y la mar en coche, no me van a decir que no le aporta una pizca de suspenso y emoción a la definición del campeonato.
DETALLES
Jueces: Patricia da Silva, Alejandra Trucidos, Claudia Umpiérrez.
Público: los de siempre y los que no entendieron que no da para eso
Rampla Juniors: Sofía Olivera; Nadia Bounous, Noelia Alcaide, Natalia González (81' Bettina Speranza), Florencia Vicente; Natalia Seoane (46' Aída Camaño), Valeria Chury, Alejandra Laborda, Yessica Moreno (77' Jimena Suárez); Adriana Castillo, Juliana Castro. Suplentes: Luciana Gómez, Carolina Pereyra, Denisse Dufau. DT: Juancito Castillo
River Plate: Shana Palacio; Loreley Villarubia, Yenny Martirena, Mayra Padrón, Paula Viera, Guillermina Rodríguez; Carla Arrúa (85' Jennifer Clara), Katherine Melgar (52' Joana Marín), Carla Quinteros (64' Marisol González); Lourdes Fleitas, Rossana Soria. Suplentes: Verónica Villar, Angélica Souza, Nicole González, Yamila Echeberri. DT: Álvaro González.
Goles: 1' Carla Arrúa, cabezazo en el segundo palo (RP), 20' gran jugada de Lourdes Fleitas, que de mitad de cancha arrió a tres rivales y convirtió, 41' habilidad más potencia y velocidad dan el tercer gol de River, el segundo de Fleitas (RP), 45'Juliana Castro traslada, entra por derecha y convierte con tiro cruzado (RJ), 90' Jennifer Clara de penal que le cometieron a ella misma (RP).
Patricia Pujol
Resignación
Pocas cosas causan extrañeza en el aspecto organizativo del fútbol uruguayo.
Que no se juegue la etapa final del torneo que ocupó el último semestre del año 2008 parece raro, incluso muy desatinado. Explicar por que sucedió esto es muy difícil.
En principio el problema no era insolucionable. En definitiva, cuando los dirigentes no se ponen de acuerdo en cualquier aspecto de fijación de partidos se termina acudiendo a una moneda que vuela o dos papeles doblados que tiene dos posibilidades escritas o a un bolillero que define, donde se juega, que día y a que hora. No tiene mucho misterio este asunto.
Todo es mejor que la irresolución o renunciar a hacer lo que todos están de acuerdo en hacer.
Si estuvieron de acuerdo en jugar determinado campeonato, finalizarlo es la lógica consecuencia.
Hacer lo contrario, lo que ahora se está viviendo, es sumar problemas a problemas, es restar, dividir, reducir.
El viernes estuvieron horas reunidos en la AUF analizando un asunto: la policía, el Ministerio del Interior había decidido que el partido Danubio-Peñarol era el único de los seis previstos para jugar el domingo calificado como de “alto riesgo” y, por lo tanto, ellos disponían que se jugara en el Estadio Centenario.
Esto se hacía no ejercitando un derecho a la intervención del gobierno en el fútbol como se quiere hacer ver desde interesados enfoques sino cumpliendo lo establecido apenas semanas atrás para encarar el grave asunto de la violencia en el fútbol.
Se estableció una división de responsabilidades y se firmó ese acuerdo con proyección pública entre la Asociación Uruguaya de Fútbol, el Ministerio de Turismo y Deporte, el Ministerio del Interior y la Intendencia Municipal de Montevideo.
De allí surge la prorrogativa policial de indicar en que canchas, que días y a que horas se jugaban determinados y excepcionales partidos.
En definitiva, sólo quedaba disminuida la soberanía de Tenfield quien hasta ese momento y desde hace años tiene esa prerrogativa en cumplimiento de otro contrato más sabroso (y de mutuo beneficio, obviamente).
Se puede comprender que la discusión del viernes tuviera, de hecho, muchas dificultades, muchos teléfonos descompuestos, algunos teléfonos reales apagados, pero lo que más me extrañó fue la resignación general, esa que dio como concluido el asunto allí mismo, esa que no convocó una nueva reunión urgente para el sábado de mañana, esa que llamó a la inacción, a la licencia de los futbolistas y a la resignación que expresa: no terminamos el Torneo Apertura porque no supimos encontrarle solución a las cuestiones más simples del gobierno del fútbol o de cualquier cosa.
Y ese espíritu de resignación no es achacable a esta o aquella persona. Más bien denuncia la existencia de un problema estructural. Y por eso es más grave.
Jorge Burgell
Que no se juegue la etapa final del torneo que ocupó el último semestre del año 2008 parece raro, incluso muy desatinado. Explicar por que sucedió esto es muy difícil.
En principio el problema no era insolucionable. En definitiva, cuando los dirigentes no se ponen de acuerdo en cualquier aspecto de fijación de partidos se termina acudiendo a una moneda que vuela o dos papeles doblados que tiene dos posibilidades escritas o a un bolillero que define, donde se juega, que día y a que hora. No tiene mucho misterio este asunto.
Todo es mejor que la irresolución o renunciar a hacer lo que todos están de acuerdo en hacer.
Si estuvieron de acuerdo en jugar determinado campeonato, finalizarlo es la lógica consecuencia.
Hacer lo contrario, lo que ahora se está viviendo, es sumar problemas a problemas, es restar, dividir, reducir.
El viernes estuvieron horas reunidos en la AUF analizando un asunto: la policía, el Ministerio del Interior había decidido que el partido Danubio-Peñarol era el único de los seis previstos para jugar el domingo calificado como de “alto riesgo” y, por lo tanto, ellos disponían que se jugara en el Estadio Centenario.
Esto se hacía no ejercitando un derecho a la intervención del gobierno en el fútbol como se quiere hacer ver desde interesados enfoques sino cumpliendo lo establecido apenas semanas atrás para encarar el grave asunto de la violencia en el fútbol.
Se estableció una división de responsabilidades y se firmó ese acuerdo con proyección pública entre la Asociación Uruguaya de Fútbol, el Ministerio de Turismo y Deporte, el Ministerio del Interior y la Intendencia Municipal de Montevideo.
De allí surge la prorrogativa policial de indicar en que canchas, que días y a que horas se jugaban determinados y excepcionales partidos.
En definitiva, sólo quedaba disminuida la soberanía de Tenfield quien hasta ese momento y desde hace años tiene esa prerrogativa en cumplimiento de otro contrato más sabroso (y de mutuo beneficio, obviamente).
Se puede comprender que la discusión del viernes tuviera, de hecho, muchas dificultades, muchos teléfonos descompuestos, algunos teléfonos reales apagados, pero lo que más me extrañó fue la resignación general, esa que dio como concluido el asunto allí mismo, esa que no convocó una nueva reunión urgente para el sábado de mañana, esa que llamó a la inacción, a la licencia de los futbolistas y a la resignación que expresa: no terminamos el Torneo Apertura porque no supimos encontrarle solución a las cuestiones más simples del gobierno del fútbol o de cualquier cosa.
Y ese espíritu de resignación no es achacable a esta o aquella persona. Más bien denuncia la existencia de un problema estructural. Y por eso es más grave.
Jorge Burgell
Pelota quieta
La actividad del fútbol de Primera División recién retornaría en el mes de febrero
Una serie de hechos se unieron para que en la noche del viernes el Consejo Ejecutivo de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) tomara la decisión de suspender la realización de la última fecha del Torneo Apertura.
La punta del iceberg del tema fue la negativa que dio el Ministerio del Interior respecto a la fijación del Estadio Jardines del Hipódromo como escenario del encuentro que debían jugar Danubio y Peñarol.
Según las autoridades policiales, el único lugar donde se podía disputar el encuentro era el Estadio Centenario, y si bien los dirigentes danubianos entendían que era injusta la prohibición impuesta sobre su escenario, no tenían objeciones en jugar en otra cancha.
Hasta ahí todo bien, pero el problema surgía por el lado de Central Español, que no aceptaba jugar su partido ante Nacional -en el que era local- fuera del Estadio Centenario, porque entendía que jugando en otro escenario de menor capacidad perdería la oportunidad de obtener una jugosa recaudación.
Danubio planteó la posibilidad de que los dos partidos de la discordia (en los que se podía definir al ganador del Torneo Apertura) se disputaran en el Centenario en diferentes horarios, pero fue Nacional el que no aceptó esta propuesta, entendiendo que los dos encuentros se debían jugar en forma simultánea. Los de la curva plantearon incluso la posibilidad de jugar a puertas cerradas, pero la propuesta tampoco fue aceptada y los caminos de una posible salida se fueron cerrando definitivamente.
Si bien desde la noche del viernes, momento en el que se conoció la determinación de la AUF, muchos sindicaron al Ministerio del Interior como responsable directo de la paralización del fútbol, por no habilitar la cancha danubiana, esto no es cierto o al menos es una interpretación simplista y errónea, que no repara en el fondo del asunto.
Fue la propia AUF quien le dio a la policía potestades especiales. Eso ocurrió desde el momento en que se firmó el acuerdo que permitió el regreso a la actividad, luego de la paralización decretada a raíz de los incidentes ocurridos el día 16 de noviembre, en ocasión del partido Danubio-Nacional jugado en el Estadio Jardines del Hipódromo.
El protocolo firmado por la AUF, el Ministerio del Interior y el Ministerio de Turismo y Deporte, establece que para los partidos considerados del alto riesgo (como era el caso de Danubio-Peñarol) "deben jugarse en escenarios debidamente habilitados por las intendencias municipales y por las jefaturas de Policía respectivas."
En este caso la policía no dio el sí y la historia terminó como terminó.
Quizá la urgencia de que el fútbol volviera motivó que la AUF en aquel momento firmara apresuradamente este convenio, que efectivamente le da un poder bastante importante -quizá exagerado- a la policía, pero lo hecho, hecho está y ahora lo primordial es encontrar soluciones.
S>¿Cómo sigue esta historia?
P>Por el momento no hay determinaciones, pero aparentemente el Torneo Apertura finalizaría el próximo año, con la disputa de la última fecha y de una eventual final, dando luego comienzo el Torneo Clausura.
Claro está que esto es una presunción lógica, pero el final de este tema perfectamente puede ser otro bien distinto. Por otra parte es totalmente necesario que las autoridades del fútbol uruguayo planteen a las otras partes involucradas la revisión del acuerdo firmado, porque en caso contrario se corre serio riesgo de que la situación actual se reitere al fijar la última fecha. Ha quedado claro que las divergencias entre la AUF y el Ministerio del Interior son grandes; por otra parte es imposible que haya fútbol sin policía que garantice seguridad a los espectadores.
La solución parece complicada, pero debe buscarse una salida que no vete arbitrariamente algunos escenarios, como pueden ser Jardines del Hipódromo o el Estadio Luis Tróccoli, si es que éstos efectivamente reúnen las condiciones para albergar encuentros calificados como de alto riesgo.
Según lo que hoy por hoy está establecido, ni franjeados ni cerrenses pueden ser locales en sus partidos ante los equipos grandes y eso desde el punto de vista deportivo parece inaceptable, además de que está comprobado que la exclusión de algunas canchas no contribuye en lo más mínimo a la lucha contra la violencia.
Una serie de hechos se unieron para que en la noche del viernes el Consejo Ejecutivo de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) tomara la decisión de suspender la realización de la última fecha del Torneo Apertura.
La punta del iceberg del tema fue la negativa que dio el Ministerio del Interior respecto a la fijación del Estadio Jardines del Hipódromo como escenario del encuentro que debían jugar Danubio y Peñarol.
Según las autoridades policiales, el único lugar donde se podía disputar el encuentro era el Estadio Centenario, y si bien los dirigentes danubianos entendían que era injusta la prohibición impuesta sobre su escenario, no tenían objeciones en jugar en otra cancha.
Hasta ahí todo bien, pero el problema surgía por el lado de Central Español, que no aceptaba jugar su partido ante Nacional -en el que era local- fuera del Estadio Centenario, porque entendía que jugando en otro escenario de menor capacidad perdería la oportunidad de obtener una jugosa recaudación.
Danubio planteó la posibilidad de que los dos partidos de la discordia (en los que se podía definir al ganador del Torneo Apertura) se disputaran en el Centenario en diferentes horarios, pero fue Nacional el que no aceptó esta propuesta, entendiendo que los dos encuentros se debían jugar en forma simultánea. Los de la curva plantearon incluso la posibilidad de jugar a puertas cerradas, pero la propuesta tampoco fue aceptada y los caminos de una posible salida se fueron cerrando definitivamente.
Si bien desde la noche del viernes, momento en el que se conoció la determinación de la AUF, muchos sindicaron al Ministerio del Interior como responsable directo de la paralización del fútbol, por no habilitar la cancha danubiana, esto no es cierto o al menos es una interpretación simplista y errónea, que no repara en el fondo del asunto.
Fue la propia AUF quien le dio a la policía potestades especiales. Eso ocurrió desde el momento en que se firmó el acuerdo que permitió el regreso a la actividad, luego de la paralización decretada a raíz de los incidentes ocurridos el día 16 de noviembre, en ocasión del partido Danubio-Nacional jugado en el Estadio Jardines del Hipódromo.
El protocolo firmado por la AUF, el Ministerio del Interior y el Ministerio de Turismo y Deporte, establece que para los partidos considerados del alto riesgo (como era el caso de Danubio-Peñarol) "deben jugarse en escenarios debidamente habilitados por las intendencias municipales y por las jefaturas de Policía respectivas."
En este caso la policía no dio el sí y la historia terminó como terminó.
Quizá la urgencia de que el fútbol volviera motivó que la AUF en aquel momento firmara apresuradamente este convenio, que efectivamente le da un poder bastante importante -quizá exagerado- a la policía, pero lo hecho, hecho está y ahora lo primordial es encontrar soluciones.
S>¿Cómo sigue esta historia?
P>Por el momento no hay determinaciones, pero aparentemente el Torneo Apertura finalizaría el próximo año, con la disputa de la última fecha y de una eventual final, dando luego comienzo el Torneo Clausura.
Claro está que esto es una presunción lógica, pero el final de este tema perfectamente puede ser otro bien distinto. Por otra parte es totalmente necesario que las autoridades del fútbol uruguayo planteen a las otras partes involucradas la revisión del acuerdo firmado, porque en caso contrario se corre serio riesgo de que la situación actual se reitere al fijar la última fecha. Ha quedado claro que las divergencias entre la AUF y el Ministerio del Interior son grandes; por otra parte es imposible que haya fútbol sin policía que garantice seguridad a los espectadores.
La solución parece complicada, pero debe buscarse una salida que no vete arbitrariamente algunos escenarios, como pueden ser Jardines del Hipódromo o el Estadio Luis Tróccoli, si es que éstos efectivamente reúnen las condiciones para albergar encuentros calificados como de alto riesgo.
Según lo que hoy por hoy está establecido, ni franjeados ni cerrenses pueden ser locales en sus partidos ante los equipos grandes y eso desde el punto de vista deportivo parece inaceptable, además de que está comprobado que la exclusión de algunas canchas no contribuye en lo más mínimo a la lucha contra la violencia.
La penúltima
Hoy se jugarán cuatro encuentros correspondientes a la octava fecha, la penúltima del Torneo Apertura. En el Palacio Peñarol habrá doble jornada. A primera hora, a las 19.00, chocarán Bohemios y Trouville en un clima seguramente caluroso pero con un entorno frío. Los albimarrones vienen de caer ante Defensor Sporting, mientras que los rojos de Pocitos perdieron en los últimos tres juegos. A continuación de este partido, Atenas, con el estreno de Signorelli, jugará ante Olimpia. Los atenienses vienen de caer en la etapa pasada. Por su parte, los de Colón ganaron los últimos dos encuentros disputados.
Además de la doble jornada en la sede aurinegra, Tabaré recibirá a Defensor Sporting en su cancha. Ambos vienen de ganar. Los grises del Parque Batlle lo hicieron el viernes ante Paysandú como visitantes, mientras que los violetas vencieron el sábado a Bohemios. Por último, en el 8 de Junio sanducero, el equipo local, con un solo extranjero y ya sin el entrenador Cadillac, chocará con Malvín, que el fin de semana no jugó por haber adelantado el juego con Biguá hace algunos días por la participación del pato en la Liga de las Américas. Precisamente el equipo de Villa Biarritz completará la fecha mañana ante Hebraica en la cancha de Welcome. Por la liga local los dirigidos por el Che García ganaron los últimos dos paridos que jugaron, mientras que los macabeos vienen de caer.
Además de la doble jornada en la sede aurinegra, Tabaré recibirá a Defensor Sporting en su cancha. Ambos vienen de ganar. Los grises del Parque Batlle lo hicieron el viernes ante Paysandú como visitantes, mientras que los violetas vencieron el sábado a Bohemios. Por último, en el 8 de Junio sanducero, el equipo local, con un solo extranjero y ya sin el entrenador Cadillac, chocará con Malvín, que el fin de semana no jugó por haber adelantado el juego con Biguá hace algunos días por la participación del pato en la Liga de las Américas. Precisamente el equipo de Villa Biarritz completará la fecha mañana ante Hebraica en la cancha de Welcome. Por la liga local los dirigidos por el Che García ganaron los últimos dos paridos que jugaron, mientras que los macabeos vienen de caer.
Semana de entrenadores
En tres días la misma cantidad de entrenadores fueron cesados: Héctor da Prá en Hebraica, Víctor Hugo Berardi en Atenas y el argentino Eduardo Cadillac en Paysandú. El primero fue echado por el mal relacionamiento con el puertorriqueño Ángelo Reyes, algo que confirmó en una entrevista radial a Federico Buysan en la semana. La dirigencia respaldó a Reyes y dejó sin trabajo a Da Prá. Los otros dos entrenadores fueron víctimas de los malos resultados obtenidos en el último tramo del torneo.
En Hebraica asumió Miguel Volcan. El DT fraybentino ya dirigió al equipo macabeo en la temporada pasada, cuando lo puso en la final ante Biguá. Además se anuncia que el asistente del entrenador será Marcelo Capalbo. Por el lado de Atenas, Marcelo Signorelli arregló a las pocas horas de haberse ido Berardi. Cabe recordar que Signorelli es el director técnico campeón de la última Liga Uruguaya con Biguá y en esta temporada tuvo un opaco rendimiento dirigiendo a la blanca del litoral. En Paysandú no hay grandes novedades, pero por lo pronto el asistente de Cadillac, Pablo Lanasa, se hará cargo del equipo.
En Hebraica asumió Miguel Volcan. El DT fraybentino ya dirigió al equipo macabeo en la temporada pasada, cuando lo puso en la final ante Biguá. Además se anuncia que el asistente del entrenador será Marcelo Capalbo. Por el lado de Atenas, Marcelo Signorelli arregló a las pocas horas de haberse ido Berardi. Cabe recordar que Signorelli es el director técnico campeón de la última Liga Uruguaya con Biguá y en esta temporada tuvo un opaco rendimiento dirigiendo a la blanca del litoral. En Paysandú no hay grandes novedades, pero por lo pronto el asistente de Cadillac, Pablo Lanasa, se hará cargo del equipo.
Deporte número uno
La Liga Uruguaya de Básquetbol sigue su marcha
Entre tantas noticias relacionadas a todos los inconvenientes del fútbol uruguayo, el básquetbol sigue su marcha y este fin de semana fue el deporte que se robó la atención, por lo menos en cuanto a lo que pasó estrictamente dentro de la cancha. Biguá sigue primero, Trouville volvió a ganar y quiere play off, mientras que Hebraica, Atenas y Paysandú estrenan nuevos entrenadores en la fecha que arranca en la tarde de hoy.
El básquetbol, sus deportistas y quienes ejecutan algunas facetas deportivas están bien. Su organización, también o casi, si tenemos en cuenta los problemas con los partidos televisados, los increíbles encuentros de las siete de la tarde sin tele en el duro piso del Palacio Peñarol y algunos lietes. Pero ello seguramente no es el disparador para que en la última edición del semanario Búsqueda y en la página editorial de El País de ayer se respalde la gestión de Luis Alberto Castillo, a quien se le rinde pleitesía porque "es cosa sabida en el ambiente del básquetbol que el auge de este deporte y su creciente popularidad está muy ligado a la certera conducción de la Federación y en particular a la acción de su presidente". Tanto el diario como el semanario reconocen a Hugo Casada, definido como asesor presidencial, como el instigador de la campaña contra el segundo candidato bordaberrista a Montevideo en las municipales de 2005.
S>Interviniendo en la cancha
P>Entre viernes y sábado la Liga Uruguaya tuvo cuatro partidos y fue el deporte estrella del fin de semana. El primer día hubo doble jornada en el Palacio Peñarol. Trouville venció a Atenas 96 a 86 en el juego de primera hora en lo que fue el último partido de Víctor Berardi como entrenador de los atenienses. En cuanto al goleo, Levi Stukes fue el máximo anotador, con 22 puntos. El fraybentino Martín Aguilera también fue importante al ingresar desde el banco, ya que aportó 19 unidades. El conjunto rojo tuvo gran efectividad en triples: 12 convertidos de 20 lanzados, lo que totaliza 60%. Por el lado de Atenas, el Torpedo Mott colocó 32 tantos.
A segunda hora Olimpia derrotó a Hebraica 82 a 70. El equipo que dirige Daniel Lovera tuvo un goleo muy repartido. Reque Newsome anotó 20 puntos, Sebastián Vázquez y Mauro Tornaría convirtieron 15, mientras que Pablo Rak finalizó con 13. El conjunto macabeo, que fue dirigido en la noche del viernes por Leo Zylbersztein y Alberto Rico, tuvo como máximo exponente en ataque a Ángelo Reyes con 18 unidades.
En el otro encuentro del viernes, Tabaré obtuvo un buen punto de visitante ante Paysandú, al que venció 83 a 79 luego de alargue en 72. Ante un escaso público -cerca de 200 personas-, el indio del Parque Batlle estuvo al frente todo el partido en el marcador, pero cerca del final se le complicó y con un doble de Ryan Blankson a falta de pocos segundos logró forzar el alargue. Jhonny Rodríguez con un triple y Gonzalo Caneiro con libres le terminaron dando la victoria al conjunto gris. Precisamente estos dos jugadores fueron los goleadores, con 22 y 18 puntos respectivamente.
En el único partido del sábado, el que completaba la fecha, Defensor Sporting venció a Bohemios 80 a 68. Fue un partido parejo hasta el tercer cuarto -terminaron 58 iguales- pero en el último los violetas fueron muy superiores al conjunto albimarrón. Brian Woodward fue el goleador con 23 puntos y Diego Castrillón, que jugó un partidazo, aportó 18. No fue muy destacado el debut del brasileño Thiago Labatte en los fusionados: en 22 minutos de juego encestó seis puntos y capturó siete rebotes. También es de destacar el buen desempeño que tuvieron los sub 23 Gonzalo Rama y Hugo Timote en los minutos finales.
Entre tantas noticias relacionadas a todos los inconvenientes del fútbol uruguayo, el básquetbol sigue su marcha y este fin de semana fue el deporte que se robó la atención, por lo menos en cuanto a lo que pasó estrictamente dentro de la cancha. Biguá sigue primero, Trouville volvió a ganar y quiere play off, mientras que Hebraica, Atenas y Paysandú estrenan nuevos entrenadores en la fecha que arranca en la tarde de hoy.
El básquetbol, sus deportistas y quienes ejecutan algunas facetas deportivas están bien. Su organización, también o casi, si tenemos en cuenta los problemas con los partidos televisados, los increíbles encuentros de las siete de la tarde sin tele en el duro piso del Palacio Peñarol y algunos lietes. Pero ello seguramente no es el disparador para que en la última edición del semanario Búsqueda y en la página editorial de El País de ayer se respalde la gestión de Luis Alberto Castillo, a quien se le rinde pleitesía porque "es cosa sabida en el ambiente del básquetbol que el auge de este deporte y su creciente popularidad está muy ligado a la certera conducción de la Federación y en particular a la acción de su presidente". Tanto el diario como el semanario reconocen a Hugo Casada, definido como asesor presidencial, como el instigador de la campaña contra el segundo candidato bordaberrista a Montevideo en las municipales de 2005.
S>Interviniendo en la cancha
P>Entre viernes y sábado la Liga Uruguaya tuvo cuatro partidos y fue el deporte estrella del fin de semana. El primer día hubo doble jornada en el Palacio Peñarol. Trouville venció a Atenas 96 a 86 en el juego de primera hora en lo que fue el último partido de Víctor Berardi como entrenador de los atenienses. En cuanto al goleo, Levi Stukes fue el máximo anotador, con 22 puntos. El fraybentino Martín Aguilera también fue importante al ingresar desde el banco, ya que aportó 19 unidades. El conjunto rojo tuvo gran efectividad en triples: 12 convertidos de 20 lanzados, lo que totaliza 60%. Por el lado de Atenas, el Torpedo Mott colocó 32 tantos.
A segunda hora Olimpia derrotó a Hebraica 82 a 70. El equipo que dirige Daniel Lovera tuvo un goleo muy repartido. Reque Newsome anotó 20 puntos, Sebastián Vázquez y Mauro Tornaría convirtieron 15, mientras que Pablo Rak finalizó con 13. El conjunto macabeo, que fue dirigido en la noche del viernes por Leo Zylbersztein y Alberto Rico, tuvo como máximo exponente en ataque a Ángelo Reyes con 18 unidades.
En el otro encuentro del viernes, Tabaré obtuvo un buen punto de visitante ante Paysandú, al que venció 83 a 79 luego de alargue en 72. Ante un escaso público -cerca de 200 personas-, el indio del Parque Batlle estuvo al frente todo el partido en el marcador, pero cerca del final se le complicó y con un doble de Ryan Blankson a falta de pocos segundos logró forzar el alargue. Jhonny Rodríguez con un triple y Gonzalo Caneiro con libres le terminaron dando la victoria al conjunto gris. Precisamente estos dos jugadores fueron los goleadores, con 22 y 18 puntos respectivamente.
En el único partido del sábado, el que completaba la fecha, Defensor Sporting venció a Bohemios 80 a 68. Fue un partido parejo hasta el tercer cuarto -terminaron 58 iguales- pero en el último los violetas fueron muy superiores al conjunto albimarrón. Brian Woodward fue el goleador con 23 puntos y Diego Castrillón, que jugó un partidazo, aportó 18. No fue muy destacado el debut del brasileño Thiago Labatte en los fusionados: en 22 minutos de juego encestó seis puntos y capturó siete rebotes. También es de destacar el buen desempeño que tuvieron los sub 23 Gonzalo Rama y Hugo Timote en los minutos finales.
miércoles, 17 de diciembre de 2008
Arrimando el bochín
Malvín, Olimpia, Hebraica y Bohemios ganaron anoche por Liga Uruguaya
La 6ª fecha del Apertura se cerró con cuatro encuentros, entre los que se destacó la victoria de Malvín sobre Atenas 95 a 91, resultado que dejó a los azules de la playa en el segundo lugar de las posiciones. El encuentro que cerró la doble jornada celebrada en el Palacio Peñarol comenzó siendo dominado ampliamente por los malvinenses, pero una tremenda arremetida de los albicelestes palermitanos llevó a un final muy emotivo, aunque el punto en juego igualmente fue a parar en manos del equipo que dirige Pablo López.
La actividad en el gimnasio aurinegro se había abierto con la buena victoria de Bohemios sobre Paysandú 87 a 76, que permitió a los albimarrones de Pocitos salir de la última posición de la tabla y sumar un punto que puede ser importante para meterse entre los ocho que pasarán a la instancia de play off.
En otro de los atractivos encuentros que presentaba esta etapa, Olimpia derrotó en su cancha a Defensor Sporting 79 a 70. El importante triunfo del equipo albo de Colón lo mantiene en la parte alta de las posiciones, solamente medio punto detrás de su rival de ayer, que al menos hasta el próximo año no contará con el estadounidense Chris Jackson, que viajó a su tierra natal.
En el estadio de Tabaré el local cayó ante Hebraica Macabi por 80 a 67.
Recordamos que esta fecha ya había tenido la disputa del partido entre Biguá y Trouville, que finalizó con victoria para el equipo de Villa Biarritz, que sigue siendo el líder de esta segunda fase de la Liga.
La 6ª fecha del Apertura se cerró con cuatro encuentros, entre los que se destacó la victoria de Malvín sobre Atenas 95 a 91, resultado que dejó a los azules de la playa en el segundo lugar de las posiciones. El encuentro que cerró la doble jornada celebrada en el Palacio Peñarol comenzó siendo dominado ampliamente por los malvinenses, pero una tremenda arremetida de los albicelestes palermitanos llevó a un final muy emotivo, aunque el punto en juego igualmente fue a parar en manos del equipo que dirige Pablo López.
La actividad en el gimnasio aurinegro se había abierto con la buena victoria de Bohemios sobre Paysandú 87 a 76, que permitió a los albimarrones de Pocitos salir de la última posición de la tabla y sumar un punto que puede ser importante para meterse entre los ocho que pasarán a la instancia de play off.
En otro de los atractivos encuentros que presentaba esta etapa, Olimpia derrotó en su cancha a Defensor Sporting 79 a 70. El importante triunfo del equipo albo de Colón lo mantiene en la parte alta de las posiciones, solamente medio punto detrás de su rival de ayer, que al menos hasta el próximo año no contará con el estadounidense Chris Jackson, que viajó a su tierra natal.
En el estadio de Tabaré el local cayó ante Hebraica Macabi por 80 a 67.
Recordamos que esta fecha ya había tenido la disputa del partido entre Biguá y Trouville, que finalizó con victoria para el equipo de Villa Biarritz, que sigue siendo el líder de esta segunda fase de la Liga.
Uniconce
El equipo de la Universidad de Concepción, conocido como el campanil o Uniconce es actualmente el mejor elenco del baloncesto chileno y está participando de las semifinales ante un elenco colegial denominado Boston College. Su juego se hace fuerte en la participación del grandote Agba, que ayer controló a Román Gonzalez y sus connacionales Hardwick y Maxey.
N Nombre Altura Puesto
4 Eduardo Marechal 1,90 alero
5 Marcelo Hernández 1,81 base
6 Sebastián Figueroa 1,79 alero
7 Matías Villagrán 1,96 pivot
10 Evandro Arteaga 1,75 escolta
18 Raúl Méndez 1,98 ala pivot
20 Carlos Sepulveda 2,05 ala pivot
21 Samuel Bravo 1,93 alero
24 Diego Osses 1,65 escolta
55 Andre Hardwick 2.01 ala pivot
32 Erron Maxey 1,98 alero
42 Jefferson Agba 2,08 pivot
N Nombre Altura Puesto
4 Eduardo Marechal 1,90 alero
5 Marcelo Hernández 1,81 base
6 Sebastián Figueroa 1,79 alero
7 Matías Villagrán 1,96 pivot
10 Evandro Arteaga 1,75 escolta
18 Raúl Méndez 1,98 ala pivot
20 Carlos Sepulveda 2,05 ala pivot
21 Samuel Bravo 1,93 alero
24 Diego Osses 1,65 escolta
55 Andre Hardwick 2.01 ala pivot
32 Erron Maxey 1,98 alero
42 Jefferson Agba 2,08 pivot
Dandole Color
Biguá consiguió un triunfazo en su debut por Liga de las Américas ante Regatas Corrientes lo que ya con seguridad le permitirá llegar al tercer y definitivo partido de esta serie en Mar del Plata con la posibilidad soñada de avanzar al Final Four del más novel y extendido torneo de Fiba Américas.
El partido fue un suplicio como toda evento en el que participa un equipo uruguayo con sueños medio utopicos. A la sensación de desasociego del primer tiempo donde los de Villa Biarritz no ajustaban las marcas ni encontraban el gol, hubo que sumarle la majadería de la transmisión argentina de Fox, que tenía a su pareja de relatores y comentarista sentados en un escritorio de Buenos Aires mientras el partido se jugaba a 500 kilometros en Mar del Plata. Jose Jozami y el destacado ex basquetbolista Miguel Romano veian hasta menos que nosotros y encima ni siquiera tenián el marcador. Tuvimos ganas de pasarles un mensaje de texto con los apuntes que iba llevando la diaria.El Primer cuarto fue bastante tanto a tanto y terminó 19 a 16 para los correntinos, pero en el segundo con la capacidad del experiente Montechia, Regatas llegó a tomar ventajas que oscilaron alrededor de los 10 puntos. 40 a 31 se fueron arriba los fantasmas correntinos que encontraban faciles goles de Sebastián Acosta. En Biguá su único destaque era Martín Osimani, a pesar de que Romano dijo que a veces hacía jugadas payasescas. La segunda parte arrancó peor aún ya que los argentinos se fueron 11 arriba, pero después el elenco del Che García fue agarrandole la mano al juego y se fue al último minidescanso apenas tres abajo. La definición fue propia de este tipo de partidos. Los orientales con dos triples del argentino Wolkowyski y el sosten bajo las tablas del jaimaquino Young pasaron a falta de tres minutos, y pasaron para ganar. Ahí volvieron a aparecer los goles de García Morales y el juego se cerró con victoria de los de pato por 71 a 68.
Hoy también desde 20:15 Biguá enfrentará al equipo chileno de Universidad de Concepción que aunque perdió ayer ante Peñarol por 80 a 63 se mostró como un elenco que se apoya bien en la acción de sus tres estadounidenses y que puede llegar a complicar partidos.
El partido fue un suplicio como toda evento en el que participa un equipo uruguayo con sueños medio utopicos. A la sensación de desasociego del primer tiempo donde los de Villa Biarritz no ajustaban las marcas ni encontraban el gol, hubo que sumarle la majadería de la transmisión argentina de Fox, que tenía a su pareja de relatores y comentarista sentados en un escritorio de Buenos Aires mientras el partido se jugaba a 500 kilometros en Mar del Plata. Jose Jozami y el destacado ex basquetbolista Miguel Romano veian hasta menos que nosotros y encima ni siquiera tenián el marcador. Tuvimos ganas de pasarles un mensaje de texto con los apuntes que iba llevando la diaria.El Primer cuarto fue bastante tanto a tanto y terminó 19 a 16 para los correntinos, pero en el segundo con la capacidad del experiente Montechia, Regatas llegó a tomar ventajas que oscilaron alrededor de los 10 puntos. 40 a 31 se fueron arriba los fantasmas correntinos que encontraban faciles goles de Sebastián Acosta. En Biguá su único destaque era Martín Osimani, a pesar de que Romano dijo que a veces hacía jugadas payasescas. La segunda parte arrancó peor aún ya que los argentinos se fueron 11 arriba, pero después el elenco del Che García fue agarrandole la mano al juego y se fue al último minidescanso apenas tres abajo. La definición fue propia de este tipo de partidos. Los orientales con dos triples del argentino Wolkowyski y el sosten bajo las tablas del jaimaquino Young pasaron a falta de tres minutos, y pasaron para ganar. Ahí volvieron a aparecer los goles de García Morales y el juego se cerró con victoria de los de pato por 71 a 68.
Hoy también desde 20:15 Biguá enfrentará al equipo chileno de Universidad de Concepción que aunque perdió ayer ante Peñarol por 80 a 63 se mostró como un elenco que se apoya bien en la acción de sus tres estadounidenses y que puede llegar a complicar partidos.
martes, 16 de diciembre de 2008
De acá
Casi en simultaneo con Biguá en la tele, se jugarán esta noche cuatro partidos que completarán la quinta etapa de la Liga Uruguaya, que se había comenzado a jugar con el partido que adelantaron en San Carlos los de Villa Biarritz y Trouville. Hay una doble etapa en el Palacio Peñarol, que arranca con un encuentro entre los postergados Bohemios y Paysandú, que sólo han sumado derrotas en el Apertura. Son los dos equipos que arrastraron menos puntos de la fase regular y, en consecuencia, por el momento, los candidatos a quedar excluidos de los play off. Los sanduceros han prescindido de los servicios del bahameño Aarón Eneas, por lo que seguramente jugarán con un extranjero menos.
El segundo encuentro en el estadio aurinegro será el interesante Malvín-Atenas, que tiene muy buena pinta. Otro juego atractivo es el que disputarán, en el Parque Batlle, Tabaré y Hebraica y Macabi, mientras que en Colón, Olimpia, que ya se había acostumbrado a jugar a las 19.00 en el Palacio, habrá de recibir a Sporting que por lo menos hasta el año que viene no contará con el desequilibrante Cris Jackson. A excepción del encuentro de primera hora de la doble etapa, que comenzará a las 19.00, todos los demás partidos arrancarán a las 21.15.
El segundo encuentro en el estadio aurinegro será el interesante Malvín-Atenas, que tiene muy buena pinta. Otro juego atractivo es el que disputarán, en el Parque Batlle, Tabaré y Hebraica y Macabi, mientras que en Colón, Olimpia, que ya se había acostumbrado a jugar a las 19.00 en el Palacio, habrá de recibir a Sporting que por lo menos hasta el año que viene no contará con el desequilibrante Cris Jackson. A excepción del encuentro de primera hora de la doble etapa, que comenzará a las 19.00, todos los demás partidos arrancarán a las 21.15.
Contra quién hay que remar
Regatas Corrientes, conocido como "el fantasma", vive un rico presente en el baloncesto. Además de ser el vigente campeón de la Liga Sudamericana -hay tres torneos, la Liga de las Américas, la Sudamericana y el campeonato Sudamericano-, en sus cuatro participaciones en la Liga Nacional se ha destacado por tener el fenomenal promedio de más de 4.500 seguidores por partido.
Su plantel para esta competencia está integrado así:
Nº Nombre Altura Puesto
4 Federico Kammerichs 2,01 ala pivot
6 Alejandro Montecchia 1,80 base
7 Milton Temute 2,02 ala pivot
10 Luis Cequeira 1,80 base
11 Ramzee Stanton 1,98 alero
12 Damián Pineda 1,94 escolta
15 Damián Tintorelli 2,06 pívot
31 Roberto López 1,99 pívot
44 Mariano Fierro 2,01 ala pivot
55 Cedrid Patton 2,00 alero
66 Sebastián Acosta 1,85 escolta
Su plantel para esta competencia está integrado así:
Nº Nombre Altura Puesto
4 Federico Kammerichs 2,01 ala pivot
6 Alejandro Montecchia 1,80 base
7 Milton Temute 2,02 ala pivot
10 Luis Cequeira 1,80 base
11 Ramzee Stanton 1,98 alero
12 Damián Pineda 1,94 escolta
15 Damián Tintorelli 2,06 pívot
31 Roberto López 1,99 pívot
44 Mariano Fierro 2,01 ala pivot
55 Cedrid Patton 2,00 alero
66 Sebastián Acosta 1,85 escolta
Por seguir volando
Biguá debuta en la Liga de las Américas
Esta noche, en el magnífico polideportivo Islas Malvinas de Mar del Plata, comenzará la segunda participación uruguaya en la novel Liga de las Américas que se empezó a disputar el año pasado. En esta edición el representante de nuestro baloncesto es Biguá, que justamente es el vigente campeón de Liga y reciente ganador del Sudamericano.
En la mayor ciudad balnearia argentina se disputará en tres días consecutivos a partir de hoy el Grupo B del torneo, el que se presume más parejo, con la participación de los poderosos argentinos Peñarol de Mar del Plata y Regatas Corrientes, los chilenos de la Universidad de Concepción y el equipo de Villa Biarritz. La potencialidad de los equipos rioplatenses y el cambio de sistema con relación a la temporada inaugural, dado que este año sólo el ganador del grupo sigue adelante, hace que la serie haya sido definida con el infaltable mote de "grupo de la muerte".
Los dirigidos por el Che García, que a diferencia del Sudamericano contarán esta vez con el plantel completo, que incluye a los internacionales Martín Osimani, Leandro García Morales y Mauricio Pica Aguiar junto a los determinantes extranjeros Kevin Young y Ruben Wolkowyski, enfrentarán esta noche a las 20.00 a los correntinos, mañana jugarán ante los trasandinos y el jueves serán por primera vez fondistas al enfrentar a Peñarol, que, como se sabe, en su versión marplatense no es aurinegro. El ganador de este cuadrangular, junto a nuestro conocido Minas Tênis Clube -que acaba de ganar el Grupo A por diferencia de goles, tras igualar la primera colocación con Capitanes de Arecibo de Puerto Rico y Merengueros de República Dominicana- y los ganadores de los grupos C y D, disputarán en febrero, en sede a licitar, el Final Four que definirá al segundo campeón de la Liga de las Américas.
Los equipos argentinos parecen ser los grandes rivales de Biguá, tanto por la cantidad de figuras con las que cuentan como por el propio desarrollo de la competencia interna. Regatas viene de una importante victoria en Corrientes ante Boca, aunque el saldo médico no fue tan bueno debido a que no puede jugar Federico Kammerichs, que salió con un esguince, y aparentemente está en duda para hoy Luis Cequeira. Peñarol, el campeón defensor del torneo, tiene a Román González, David Jackson, Byron Johnson y Tato Rodríguez, en tanto que los chilenos, en apariencia los más frágiles, están en semifinales de la Dimayor y cuentan con los extranjeros André Hardwick, Jeff Agba y Erron Maxei, además de los internacionales Evandro Arteaga y Eduardo Marechal.
La mayoría de los partidos se podrán ver en Fox Sports, y está confirmado que el de hoy a las 20.00 y el del jueves a las 22.00 llegarán en directo, en tanto el de mañana, que coincide con el partido entre Tigre y San Lorenzo por la definición del campeonato argentino, llegará en diferido.
Esta noche, en el magnífico polideportivo Islas Malvinas de Mar del Plata, comenzará la segunda participación uruguaya en la novel Liga de las Américas que se empezó a disputar el año pasado. En esta edición el representante de nuestro baloncesto es Biguá, que justamente es el vigente campeón de Liga y reciente ganador del Sudamericano.
En la mayor ciudad balnearia argentina se disputará en tres días consecutivos a partir de hoy el Grupo B del torneo, el que se presume más parejo, con la participación de los poderosos argentinos Peñarol de Mar del Plata y Regatas Corrientes, los chilenos de la Universidad de Concepción y el equipo de Villa Biarritz. La potencialidad de los equipos rioplatenses y el cambio de sistema con relación a la temporada inaugural, dado que este año sólo el ganador del grupo sigue adelante, hace que la serie haya sido definida con el infaltable mote de "grupo de la muerte".
Los dirigidos por el Che García, que a diferencia del Sudamericano contarán esta vez con el plantel completo, que incluye a los internacionales Martín Osimani, Leandro García Morales y Mauricio Pica Aguiar junto a los determinantes extranjeros Kevin Young y Ruben Wolkowyski, enfrentarán esta noche a las 20.00 a los correntinos, mañana jugarán ante los trasandinos y el jueves serán por primera vez fondistas al enfrentar a Peñarol, que, como se sabe, en su versión marplatense no es aurinegro. El ganador de este cuadrangular, junto a nuestro conocido Minas Tênis Clube -que acaba de ganar el Grupo A por diferencia de goles, tras igualar la primera colocación con Capitanes de Arecibo de Puerto Rico y Merengueros de República Dominicana- y los ganadores de los grupos C y D, disputarán en febrero, en sede a licitar, el Final Four que definirá al segundo campeón de la Liga de las Américas.
Los equipos argentinos parecen ser los grandes rivales de Biguá, tanto por la cantidad de figuras con las que cuentan como por el propio desarrollo de la competencia interna. Regatas viene de una importante victoria en Corrientes ante Boca, aunque el saldo médico no fue tan bueno debido a que no puede jugar Federico Kammerichs, que salió con un esguince, y aparentemente está en duda para hoy Luis Cequeira. Peñarol, el campeón defensor del torneo, tiene a Román González, David Jackson, Byron Johnson y Tato Rodríguez, en tanto que los chilenos, en apariencia los más frágiles, están en semifinales de la Dimayor y cuentan con los extranjeros André Hardwick, Jeff Agba y Erron Maxei, además de los internacionales Evandro Arteaga y Eduardo Marechal.
La mayoría de los partidos se podrán ver en Fox Sports, y está confirmado que el de hoy a las 20.00 y el del jueves a las 22.00 llegarán en directo, en tanto el de mañana, que coincide con el partido entre Tigre y San Lorenzo por la definición del campeonato argentino, llegará en diferido.
lunes, 15 de diciembre de 2008
¿A quién le toca el miércoles?
Seguramente no les gusta a los que no están involucrados, pero el cierre del campeonato, tal vez carente del fútbol que queremos ver, ha sido muy rico en emoción. En las últimas cinco jornadas la punta siempre ha cambiado de dueño, pero sus propietarios siempre alternándose han sido Nacional y Danubio. Tras la victoria clásica, los tricolores tienen un punto de ventaja sobre los de la Curva, que agónicamente consiguieron empatar ante Liverpool. Parecen ser los más firmes candidatos al título, pero también están Racing, que le ganó en la hora a Juventud 2 a 1, y hasta Defensor, que venció por el mismo marcador a Rampla. Liverpool y Cerro, tal vez el que desaprovechó la mayor oportunidad al caer ante Central 2 a 0, tienen complicada chance de igualar la línea de los tricolores. El sábado en Melo, Tacuarembó se llevó una gran victoria por mínima ante Cerro Largo y Villa Española también sumó de a tres derrotando a Wanderers. Lo que queda del tiqui tiqui, que no es poco, sirvió para que River venciera a Bella Vista.
La penúltima etapa se juega entre miércoles y jueves. Pasado mañana, en simultáneo a las 20.30, jugarán Nacional-River en el Centenario y Danubio-Central en el Franzini. De tarde jugarán Villa Española-Racing en el Charrúa y en el Goyenola de Tacuarembó, el local enfrentará a las 20.00 a Defensor. El jueves, con todos los juegos a las 17.00, Cerro será local en el Centenario ante Peñarol, Bella Vista recibirá a Liverpool en el Nasazzi, Wanderers jugará con Cerro Largo en el Viera, y en Canelones, Juventud enfrentará a Rampla.
La penúltima etapa se juega entre miércoles y jueves. Pasado mañana, en simultáneo a las 20.30, jugarán Nacional-River en el Centenario y Danubio-Central en el Franzini. De tarde jugarán Villa Española-Racing en el Charrúa y en el Goyenola de Tacuarembó, el local enfrentará a las 20.00 a Defensor. El jueves, con todos los juegos a las 17.00, Cerro será local en el Centenario ante Peñarol, Bella Vista recibirá a Liverpool en el Nasazzi, Wanderers jugará con Cerro Largo en el Viera, y en Canelones, Juventud enfrentará a Rampla.
Con espuma
Efervescente victoria cervecera
Racing quebró a Juventud a los 94'. Debió lograrlo antes, pero le costó llegar al gol que Juventud encontró casi de casualidad, al empatar a 5' del cierre. Ganó 2 a 1 y volvió a los pasos largos en la ya ajena tabla del descenso, en la que ayer también superó al rival, al que derrotó.
Juan Pablo Rodríguez llevó la batuta desde el primer momento. Fue damasiado para Juventud, deformado por una cantidad industrial de bajas. Si las limitaciones pedrenses no fueron explotadas por Racing en mayor medida, quizá haya sido porque los de Verzeri sintieron los faltazos de los atacantes Balsas y Quiñónez.
La subida de los volantes liderados por Blanes y apoyados por el ingresado Mirabaje empujaron un poco más a la visita. La que consiguió un premio inmerecido con el empate lindante con el final, pese a los aportes de Yeladian. La que recibió la misma moneda cuando Rodríguez pagó la vuelta para todo Sayago con la apilada gestora del gol de López.
MR
Racing quebró a Juventud a los 94'. Debió lograrlo antes, pero le costó llegar al gol que Juventud encontró casi de casualidad, al empatar a 5' del cierre. Ganó 2 a 1 y volvió a los pasos largos en la ya ajena tabla del descenso, en la que ayer también superó al rival, al que derrotó.
Juan Pablo Rodríguez llevó la batuta desde el primer momento. Fue damasiado para Juventud, deformado por una cantidad industrial de bajas. Si las limitaciones pedrenses no fueron explotadas por Racing en mayor medida, quizá haya sido porque los de Verzeri sintieron los faltazos de los atacantes Balsas y Quiñónez.
La subida de los volantes liderados por Blanes y apoyados por el ingresado Mirabaje empujaron un poco más a la visita. La que consiguió un premio inmerecido con el empate lindante con el final, pese a los aportes de Yeladian. La que recibió la misma moneda cuando Rodríguez pagó la vuelta para todo Sayago con la apilada gestora del gol de López.
MR
domingo, 14 de diciembre de 2008
Gran victoria, pobre partido
La clásica historia de los nervios, del mal juego y de las grandes jugadas que definen
Si Nacional ganaba -y lo hizo- se quedaba con la punta, con la disputa del Torneo Apertura casi en exclusiva ante Danubio y con Peñarol fuera de los posibles campeones dos partidos antes del final.
Detrás hay una historia futbolística de nervios iniciales que se prolongan en exceso, de primacía de la pierna fuerte y el pelotazo más fuerte aun.
Al costado queda un marco general de lo sucedido en el Centenario, que incluye no escuchar las largas previas radiales porque en otro escenario deportivo también se jugaba otro partido con elección de jugadores principales y suplentes, con números porcentuales, con alientos estentóreos, con barras que obligaban y con revancha en seis meses. Todo igual. O casi.
También será recordable el partido por la aparición de un tablero electrónico coqueto y reproductor de las mismas imágenes que uno ve directamente. O por el estruendo tipo Irak avasallado por las armas de Bush, con bombas de todo tipo y de toda prohibición en la Amsterdam aurinegra a la entrada del equipo. O por la extraña influencia del Morro García, quien fue definidor del partido (a él le cometieron el penal) sin tocar la pelota en los cinco minutos que estuvo en la cancha. O por la Olímpica (a 250 pesos la entrada) apenas a medio llenar como pocas veces se ve en este tipo de partidos.
La media cancha de Asconeguy, Mozzo y Medina, nunca antes probada por Mario Saralegui, obviamente no fue consistente ni productora de fútbol de alta calidad, bandera que levanta en cierta soledad Tony Pacheco. Richard Núñez -hay que decirlo- participó en todas las contadas ocasiones de gol elaboradas. Avanzando el partido, el DT optó por una variante extraña de la desesperación: llenar su formación de delanteros y armadores de juego (Carlos Bueno, Núñez, Pacheco, Petete Correa, Nasa, Abel Hernández). Obviamente no logró predominio por eso, ni siquiera aprovechando la ventaja del hombre de más que tuvo desde la expulsión del Morro. El equilibrio y el balance son virtudes del fútbol de estos días y de siempre.
Pelusso también fue creativo en la formación de su media cancha, pero manteniendo su estilo moderado. Incluyó allí al argentino Matías Rodríguez, pero él sabía que, por la capacidad de contacto con la pelota que tiene, había muchas posibilidades de aumentar, en ese lugar céntrico de la cancha, el nivel de las actuaciones en el lateral derecho, que, de por sí, no eran malas.
En un partido que bien pudo salir empatado, asomó la cabeza Leo Burián con atajadas decisivas en pelotas en las que los protagonistas aurinegros fueron casi siempre Pacheco y Richard Núñez. Victorino y Melo, maduros y efectivos, sirvieron de respaldo al aplomo de OJ y Arismendi. Fueron el sostén del equipo.
Nacional obtuvo una gran victoria dentro de un partido opaco sólo disimulado con esas vibraciones que llegan desde fuera del césped, desde la historia y desde ese dar todo de cualquier protagonista de un partido clásico.
Jorge Burgell
Si Nacional ganaba -y lo hizo- se quedaba con la punta, con la disputa del Torneo Apertura casi en exclusiva ante Danubio y con Peñarol fuera de los posibles campeones dos partidos antes del final.
Detrás hay una historia futbolística de nervios iniciales que se prolongan en exceso, de primacía de la pierna fuerte y el pelotazo más fuerte aun.
Al costado queda un marco general de lo sucedido en el Centenario, que incluye no escuchar las largas previas radiales porque en otro escenario deportivo también se jugaba otro partido con elección de jugadores principales y suplentes, con números porcentuales, con alientos estentóreos, con barras que obligaban y con revancha en seis meses. Todo igual. O casi.
También será recordable el partido por la aparición de un tablero electrónico coqueto y reproductor de las mismas imágenes que uno ve directamente. O por el estruendo tipo Irak avasallado por las armas de Bush, con bombas de todo tipo y de toda prohibición en la Amsterdam aurinegra a la entrada del equipo. O por la extraña influencia del Morro García, quien fue definidor del partido (a él le cometieron el penal) sin tocar la pelota en los cinco minutos que estuvo en la cancha. O por la Olímpica (a 250 pesos la entrada) apenas a medio llenar como pocas veces se ve en este tipo de partidos.
La media cancha de Asconeguy, Mozzo y Medina, nunca antes probada por Mario Saralegui, obviamente no fue consistente ni productora de fútbol de alta calidad, bandera que levanta en cierta soledad Tony Pacheco. Richard Núñez -hay que decirlo- participó en todas las contadas ocasiones de gol elaboradas. Avanzando el partido, el DT optó por una variante extraña de la desesperación: llenar su formación de delanteros y armadores de juego (Carlos Bueno, Núñez, Pacheco, Petete Correa, Nasa, Abel Hernández). Obviamente no logró predominio por eso, ni siquiera aprovechando la ventaja del hombre de más que tuvo desde la expulsión del Morro. El equilibrio y el balance son virtudes del fútbol de estos días y de siempre.
Pelusso también fue creativo en la formación de su media cancha, pero manteniendo su estilo moderado. Incluyó allí al argentino Matías Rodríguez, pero él sabía que, por la capacidad de contacto con la pelota que tiene, había muchas posibilidades de aumentar, en ese lugar céntrico de la cancha, el nivel de las actuaciones en el lateral derecho, que, de por sí, no eran malas.
En un partido que bien pudo salir empatado, asomó la cabeza Leo Burián con atajadas decisivas en pelotas en las que los protagonistas aurinegros fueron casi siempre Pacheco y Richard Núñez. Victorino y Melo, maduros y efectivos, sirvieron de respaldo al aplomo de OJ y Arismendi. Fueron el sostén del equipo.
Nacional obtuvo una gran victoria dentro de un partido opaco sólo disimulado con esas vibraciones que llegan desde fuera del césped, desde la historia y desde ese dar todo de cualquier protagonista de un partido clásico.
Jorge Burgell
La hora de la verdad
Nacional ganó el clásico 1-0 con gol de Sergio Blanco de tiro penal y apunta al título
El sueño es eterno. Revive con pasión y estalla por todos los poros. No admite pasos al costado ni miradas indiferentes.
Bajo un techo azul, el legendario estadio Centenario volvió a crujir de emoción -como siempre, igual que toda la vida- con el aliento fervoroso de las hinchadas.
La magia alimenta la mística interminable de las blusas eternamente rivales.
El escenario bien colorido, los globos volando al viento, las clásicas banderas y esa emoción contenida que recorre las venas de todo un país.
Es la hora señalada, cuando ya no queda otra cosa que esperar que empiece a rodar la guinda y las griterías reboten en un eco sólido y penetrante. Es la hora de la verdad. La adrenalina casi en ebullición permanente desde el minuto cero hasta el último pitazo. Cuando sube en remolinos la alegría del triunfador y cae, pesadamente, igual que la plomada del pescador, la larga tristeza de la derrota.
Así es el fútbol. Se gana y se pierde. Ayer el empate no le servía a nadie.
El clásico palpita colectivamente en todos los corazones.
Se descuelga fantásticamente por los escalones de cemento.
Sigue toda la semana en las oficinas y en los bares y en cualquier plazoleta, almacén o esquina. La bienvenida consigna oficial, "A la violencia le ganamos juntos", en la pancarta -un extenso cartel- y pintado en camisetas celestes pasó rápidamente a segundo plano, una vez que el árbitro señaló el comienzo y la pelota salió girando igual que un trompo de todos colores.
La primera parte fue de pierna firme y batalla táctica. Raspa, escofina y varillazos mezclados.
El 0 a 0 dejó dibujado un partido trabado y de mucho trabajo de marca en ambas escuadras. Fueron muy pocas las chances de gol.
El aurinegro Richard Núñez tuvo su primera oportunidad de gol poco después de los 5' de juego. También el volante Ligüera marró su chance.
En el arco tricolor, el Cachorro Burián se empezó a constituir en la figura de la cancha. El golero arachán cerró la puerta y por allí
está buena parte de la explicación de la victoria alba. Para el segundo acto, el artiguense Saralegui mandó los cambios sumando poder ofensivo con Petete para combinar con Pacheco y los hombres de arriba. Más tarde quedó solo Mozzo en la batalla de mitad de cancha, al ingresar Nasa por Medina y Peñarol empujó con más voluntad que fútbol pensado.
Por su parte, el técnico Pelusso puso en el campo a Matute Morales y al Morro García para intentar definir la balanza a su favor.
El Morro, -debutante clásico y con apenas 8' en el pasto- atropelló en el área y el zaguero Alcoba, forcejeando, lo terminó manoteando de la camiseta para pararlo y el juez Larrionda marcó la falta penal.
¡Penal! El gol bien podía llegar por un error, un descuido o por un penal. Así fue. Mientras, un bufido ansioso explotó en el aire.
El Chapita Blanco llegó despacio al punto blanco, al redondel fatal, de cara a la Ámsterdam ardiente.
El golero Cavallero chamuyó con veteranía al Chapita pero le falló la psicología.
Sergio Blanco apuntó la mira abajo y mandó el esférico bien al fondo de las redes cuando corrían 27' del segundo tramo.
Le pegó de pierna derecha, contra el caño izquierdo del arquero.
La guinda brillante para un lado, el golero argentino, para el otro.
Enseguida Larrionda expulsó al Morro por gritarle el gol a la Ámsterdam.
Ya tenía un cartón amarillo ganado apenas entró.
Nacional quedó con diez hombres y Peñarol empezó a remar, a meter mucha gente arriba, a buscar el empate redentor.
Fueron un montón de minutos con iniciativa aurinegra que no plasmó.
Nacional con diez camisetas blancas aguantó el cerco y el otrora cuestionado golero Burián, el Cachorro, se robó los aplausos y fue el héroe de la tarde.
En Nacional se destacó la faena incansable de Ojota Morales, la firmeza defensiva de Victorino, el despliegue de Arismendi y el rendimiento parejo del argentino Matías Rodríguez en la zona media.
Por el lado carbonero, un par de buenas intervenciones de Cavallero, la veteranía experiente de Darío Rodríguez, la tenacidad de Píriz, la presencia batalladora de Mozzo y las intenciones de Pacheco con destellos de su fútbol atildado.
Ganó Nacional por diferencia mínima, un apretado 1 a 0, pero igual alcanzó para destapar la bolsomanía y la eterna ilusión del giro mágico de la vuelta olímpica.
Marcelo Tasistro
El sueño es eterno. Revive con pasión y estalla por todos los poros. No admite pasos al costado ni miradas indiferentes.
Bajo un techo azul, el legendario estadio Centenario volvió a crujir de emoción -como siempre, igual que toda la vida- con el aliento fervoroso de las hinchadas.
La magia alimenta la mística interminable de las blusas eternamente rivales.
El escenario bien colorido, los globos volando al viento, las clásicas banderas y esa emoción contenida que recorre las venas de todo un país.
Es la hora señalada, cuando ya no queda otra cosa que esperar que empiece a rodar la guinda y las griterías reboten en un eco sólido y penetrante. Es la hora de la verdad. La adrenalina casi en ebullición permanente desde el minuto cero hasta el último pitazo. Cuando sube en remolinos la alegría del triunfador y cae, pesadamente, igual que la plomada del pescador, la larga tristeza de la derrota.
Así es el fútbol. Se gana y se pierde. Ayer el empate no le servía a nadie.
El clásico palpita colectivamente en todos los corazones.
Se descuelga fantásticamente por los escalones de cemento.
Sigue toda la semana en las oficinas y en los bares y en cualquier plazoleta, almacén o esquina. La bienvenida consigna oficial, "A la violencia le ganamos juntos", en la pancarta -un extenso cartel- y pintado en camisetas celestes pasó rápidamente a segundo plano, una vez que el árbitro señaló el comienzo y la pelota salió girando igual que un trompo de todos colores.
La primera parte fue de pierna firme y batalla táctica. Raspa, escofina y varillazos mezclados.
El 0 a 0 dejó dibujado un partido trabado y de mucho trabajo de marca en ambas escuadras. Fueron muy pocas las chances de gol.
El aurinegro Richard Núñez tuvo su primera oportunidad de gol poco después de los 5' de juego. También el volante Ligüera marró su chance.
En el arco tricolor, el Cachorro Burián se empezó a constituir en la figura de la cancha. El golero arachán cerró la puerta y por allí
está buena parte de la explicación de la victoria alba. Para el segundo acto, el artiguense Saralegui mandó los cambios sumando poder ofensivo con Petete para combinar con Pacheco y los hombres de arriba. Más tarde quedó solo Mozzo en la batalla de mitad de cancha, al ingresar Nasa por Medina y Peñarol empujó con más voluntad que fútbol pensado.
Por su parte, el técnico Pelusso puso en el campo a Matute Morales y al Morro García para intentar definir la balanza a su favor.
El Morro, -debutante clásico y con apenas 8' en el pasto- atropelló en el área y el zaguero Alcoba, forcejeando, lo terminó manoteando de la camiseta para pararlo y el juez Larrionda marcó la falta penal.
¡Penal! El gol bien podía llegar por un error, un descuido o por un penal. Así fue. Mientras, un bufido ansioso explotó en el aire.
El Chapita Blanco llegó despacio al punto blanco, al redondel fatal, de cara a la Ámsterdam ardiente.
El golero Cavallero chamuyó con veteranía al Chapita pero le falló la psicología.
Sergio Blanco apuntó la mira abajo y mandó el esférico bien al fondo de las redes cuando corrían 27' del segundo tramo.
Le pegó de pierna derecha, contra el caño izquierdo del arquero.
La guinda brillante para un lado, el golero argentino, para el otro.
Enseguida Larrionda expulsó al Morro por gritarle el gol a la Ámsterdam.
Ya tenía un cartón amarillo ganado apenas entró.
Nacional quedó con diez hombres y Peñarol empezó a remar, a meter mucha gente arriba, a buscar el empate redentor.
Fueron un montón de minutos con iniciativa aurinegra que no plasmó.
Nacional con diez camisetas blancas aguantó el cerco y el otrora cuestionado golero Burián, el Cachorro, se robó los aplausos y fue el héroe de la tarde.
En Nacional se destacó la faena incansable de Ojota Morales, la firmeza defensiva de Victorino, el despliegue de Arismendi y el rendimiento parejo del argentino Matías Rodríguez en la zona media.
Por el lado carbonero, un par de buenas intervenciones de Cavallero, la veteranía experiente de Darío Rodríguez, la tenacidad de Píriz, la presencia batalladora de Mozzo y las intenciones de Pacheco con destellos de su fútbol atildado.
Ganó Nacional por diferencia mínima, un apretado 1 a 0, pero igual alcanzó para destapar la bolsomanía y la eterna ilusión del giro mágico de la vuelta olímpica.
Marcelo Tasistro
Vi la luz
La noche en que se tapó de pirotecnia el cielo de Pocitos, cerquita, en el Franzini, un iluminado Mauro Vila jugó su mejor partido en meses para llevar a su equipo a la victoria. Convirtió el empate, generó el segundo y dejó a Defensor a la expectativa, aún con chances de pelear el torneo.
El primer tramo fue parejo y disputado, con Defensor sabedor de su mayor responsabilidad de ganar a raíz de las posibilidades que aún mantiene en el campeonato. Ese apuro coadyuvó para que Rampla fuera más prolijo e incisivo en su fútbol, con Merlo y Britos por izquierda generando el mayor caudal de juego. Todo coronado sobre los 18' con el gol de Pablo Pereira, oportuno, que cacheteó un buscapié de zurda y venció a Silva.
También por izquierda se volcaron Marchant y Vila, aunque fueron bien contenidos en ese PT. Pero Da Silva la embocó para el segundo y mandó a ambos a jugar por derecha, sumando a De Souza para jugar por izquierda. Ahí sí Defensor encontró un canal directo para llegar sin apremios hasta el área picapiedra durante todo el período.
Y al toque, a los 6' del ST, Vila encontró el empate con un centro que se clavó en el ángulo (y no me vengan con que la quiso poner ahí). Rampla se acostumbró a defender y demoró demasiado en volver al juego; Defensor hacía rato era dueño. Aun así, la más clara fue de Rampla a falta de 20', cuando Puerari demoró tanto en decidir qué hacer con un rebote, que el arquero logró ahogar su tiro. Minutos después, otro desborde de Mauro Vila derivó en centro al área, entrevero de piernas y Maxi Pérez que pescó y empujó al arco. Si la pelota cruzó íntegramente la goal line, queda a criterio de quienes lo vieron por TV.
Rodrigo Ubilla
El primer tramo fue parejo y disputado, con Defensor sabedor de su mayor responsabilidad de ganar a raíz de las posibilidades que aún mantiene en el campeonato. Ese apuro coadyuvó para que Rampla fuera más prolijo e incisivo en su fútbol, con Merlo y Britos por izquierda generando el mayor caudal de juego. Todo coronado sobre los 18' con el gol de Pablo Pereira, oportuno, que cacheteó un buscapié de zurda y venció a Silva.
También por izquierda se volcaron Marchant y Vila, aunque fueron bien contenidos en ese PT. Pero Da Silva la embocó para el segundo y mandó a ambos a jugar por derecha, sumando a De Souza para jugar por izquierda. Ahí sí Defensor encontró un canal directo para llegar sin apremios hasta el área picapiedra durante todo el período.
Y al toque, a los 6' del ST, Vila encontró el empate con un centro que se clavó en el ángulo (y no me vengan con que la quiso poner ahí). Rampla se acostumbró a defender y demoró demasiado en volver al juego; Defensor hacía rato era dueño. Aun así, la más clara fue de Rampla a falta de 20', cuando Puerari demoró tanto en decidir qué hacer con un rebote, que el arquero logró ahogar su tiro. Minutos después, otro desborde de Mauro Vila derivó en centro al área, entrevero de piernas y Maxi Pérez que pescó y empujó al arco. Si la pelota cruzó íntegramente la goal line, queda a criterio de quienes lo vieron por TV.
Rodrigo Ubilla
Calladito y manso
Central Español dejó a Cerro casi fuera de la lucha por el título.
Así estaba Luis Garisto en la mañana dominguera. Sus jugadores entendieron a la perfección su mensaje, esperar tranquilos sin apuro y contragolpear.
El partido que quedó entre la noche de las luces y el clásico tenía mucho público local, a pesar de que la imagen televisiva mostraba la única tribuna vacía.
En todo momento el que tomó la iniciativa fue Cerro, jugando por bajo intentando pases en profundidad sin éxito.
La visita, con la batuta de Fabián Coelho también quiso jugar de la misma manera, con idéntico resultado. Hasta ese instante los arqueros eran espectadores de lujo. El artiguense cuando se tiró por derecha tuvo apariciones interesantes.
El albiceleste generó dos chances claras en la primera mitad, un remate de Molina de zurda que dio en el palo y un cabezazo de Dadomo en el área chica que sacó el arquero Sosa.
El complemento no dio respiros. En un pelotazo que dejó mal parada a la defensa cerrense, el goleador Crossa se la bajó de cabeza a Coelho que tenía el arco de frente para pegarle y fue derribado. Fedorczuk cobró penal, dudoso por el lugar donde fue la infracción. El 10 palermitano, de gran campeonato, la mandó a guardar y de ahí en más los de Garisto jugaron con la desesperación de los de Repetto.
El local cambió su figura táctica, pasando Cabrera a jugar de enganche, bien cerca de los delanteros y ahí fue mucho más influyente para el equipo.
Con Cerro buscando por todas las vías el empate y tras un contragolpe, Coelho dejó sólo al ariete Crossa -en posición dudosa- que definió notable.
Garisto inteligentemente mandó un cambio para aguantar y Repetto agotó las variantes en ofensiva. Cerro se topó con una defensa muy firme y una mitad del campo muy poblada, donde se sumó el gran trabajo del golero que está a préstamo de Peñarol, Sebastián Sosa, que salvó unas cuantas y le brindó tranquilidad a todo el equipo. El partido terminó muy caldeado con el sol de frente y la hinchada local recriminándole al árbitro el cobro del penal polémico y un gol de Molina a favor bien anulado por offside.
Es para destacar el levante que tuvo Central Español, que cuando parecía que Garisto no seguía, le empató a Peñarol y desde ese entonces el elenco tomó confianza y ayer le arruinó el día a Cerro.
Leo Bernini
Así estaba Luis Garisto en la mañana dominguera. Sus jugadores entendieron a la perfección su mensaje, esperar tranquilos sin apuro y contragolpear.
El partido que quedó entre la noche de las luces y el clásico tenía mucho público local, a pesar de que la imagen televisiva mostraba la única tribuna vacía.
En todo momento el que tomó la iniciativa fue Cerro, jugando por bajo intentando pases en profundidad sin éxito.
La visita, con la batuta de Fabián Coelho también quiso jugar de la misma manera, con idéntico resultado. Hasta ese instante los arqueros eran espectadores de lujo. El artiguense cuando se tiró por derecha tuvo apariciones interesantes.
El albiceleste generó dos chances claras en la primera mitad, un remate de Molina de zurda que dio en el palo y un cabezazo de Dadomo en el área chica que sacó el arquero Sosa.
El complemento no dio respiros. En un pelotazo que dejó mal parada a la defensa cerrense, el goleador Crossa se la bajó de cabeza a Coelho que tenía el arco de frente para pegarle y fue derribado. Fedorczuk cobró penal, dudoso por el lugar donde fue la infracción. El 10 palermitano, de gran campeonato, la mandó a guardar y de ahí en más los de Garisto jugaron con la desesperación de los de Repetto.
El local cambió su figura táctica, pasando Cabrera a jugar de enganche, bien cerca de los delanteros y ahí fue mucho más influyente para el equipo.
Con Cerro buscando por todas las vías el empate y tras un contragolpe, Coelho dejó sólo al ariete Crossa -en posición dudosa- que definió notable.
Garisto inteligentemente mandó un cambio para aguantar y Repetto agotó las variantes en ofensiva. Cerro se topó con una defensa muy firme y una mitad del campo muy poblada, donde se sumó el gran trabajo del golero que está a préstamo de Peñarol, Sebastián Sosa, que salvó unas cuantas y le brindó tranquilidad a todo el equipo. El partido terminó muy caldeado con el sol de frente y la hinchada local recriminándole al árbitro el cobro del penal polémico y un gol de Molina a favor bien anulado por offside.
Es para destacar el levante que tuvo Central Español, que cuando parecía que Garisto no seguía, le empató a Peñarol y desde ese entonces el elenco tomó confianza y ayer le arruinó el día a Cerro.
Leo Bernini
¿Querer es poder?
Danubio confirmó sus aspiraciones con una igualdad hazañosa
Por la actitud con la que remó cuando lo tenían contra las cuerdas y por lo que jugó un rival al que le remontó dos goles pese a tener diez jugadores, Danubio demostró que quiere y que tiene con qué. Liverpool lo superó durante gran parte del emotivo sábado de Belvedere, pero un arrebato de furia franjeada sacó un punto de la Cuchilla. Los de Lasarte dejaron la cancha fortalecidos pero con incertidumbre, porque con el 2-2 su liderazgo quedó atado a un eventual traspié tricolor en el clásico de ayer. Cuando en los descuentos García desafió la física metiendo la pelota en el arco negriazul después de mil rebotes y en medio de un mar de piernas, ningún danubiano tuvo en cuenta la ecuación sinoganoNacionalmepasa. Los padecimientos de la hora y media anterior justificaban festejar como si el gol fuera el del campeonato, por más que no alcanzara para esquivar la dependencia clásica. Todavía estaba fresca la imagen de Conde tapándole un remate de gol a Tejera. Ni qué hablar de la vaselina que el propio Marcelo dejó en el techo del arco cuando pudo haber resuelto jugada y partido, con un gol que los de la Curva hubieran sufrido como si fuera ante el mismísimo Defensor. Lo mismo con la expulsión de Pérez, excesivamente castigado con una roja directa que dejó a Danubio con diez jugadores. Ese festejo fuerte llegó con bronca incluida. La tribuna reaccionó con la cuota de rebeldía que el equipo puso sobre la cancha para empardar un trámite generalmente desfavorable, resultante de la supremacía que Liverpool estableció desde el comienzo. Danubio jugó como una hora atado por el medio y la defensa negriazules. Con Macchi a la cabeza, varios destructores locatarios rindieron por encima de los cinco puntos y -en algunos casos- tuvieron resto como para pedir el casco y construir. Los de Lasarte quedaron atrapados en la telaraña del toque paciente que plasma el Liverpool de Favaro. Ése que alterna la búsqueda lateral con las puñaladas concentradas en la habilidad de Alfaro, que otra vez desequilibró en cada encare. Pezzolano repitió su juego habilitador y pareció entenderse bien con Varela, la carta que jugó el técnico tras mandar al mazo a Sánchez, que el sábado fue suplente. El partido se recibió de partidazo al recibir las variantes. Pese a tener en la cuenta los goles de Aranda y Alfaro, Favaro hizo cambios que renovaron el ataque y obligaron a Conde. Lasarte le puso orden al medio cuando Delgado se paró como volante central y con sus lanzamientos economizó piernas en cada ataque. Pero -como ante Bella Vista- recién alcanzó la agresividad ideal cuando Scorza empezó a romperla por la derecha. El grito final demoró porque el arquero Castro se reafirmó como una de las revelaciones del torneo, con una sucesión de atajadas coleccionables. Los diarios del domingo hablaron de que Danubio quiere. Pero sólo los del lunes dirán si puede. Como a la diaria los fines de semana le gusta dormir, pregunta y respuesta van juntas en el mismo número. Así que para contestarle al título de hoy, viche la contratapa y actualice su tabla de posiciones.
Martín Rodríguez
Por la actitud con la que remó cuando lo tenían contra las cuerdas y por lo que jugó un rival al que le remontó dos goles pese a tener diez jugadores, Danubio demostró que quiere y que tiene con qué. Liverpool lo superó durante gran parte del emotivo sábado de Belvedere, pero un arrebato de furia franjeada sacó un punto de la Cuchilla. Los de Lasarte dejaron la cancha fortalecidos pero con incertidumbre, porque con el 2-2 su liderazgo quedó atado a un eventual traspié tricolor en el clásico de ayer. Cuando en los descuentos García desafió la física metiendo la pelota en el arco negriazul después de mil rebotes y en medio de un mar de piernas, ningún danubiano tuvo en cuenta la ecuación sinoganoNacionalmepasa. Los padecimientos de la hora y media anterior justificaban festejar como si el gol fuera el del campeonato, por más que no alcanzara para esquivar la dependencia clásica. Todavía estaba fresca la imagen de Conde tapándole un remate de gol a Tejera. Ni qué hablar de la vaselina que el propio Marcelo dejó en el techo del arco cuando pudo haber resuelto jugada y partido, con un gol que los de la Curva hubieran sufrido como si fuera ante el mismísimo Defensor. Lo mismo con la expulsión de Pérez, excesivamente castigado con una roja directa que dejó a Danubio con diez jugadores. Ese festejo fuerte llegó con bronca incluida. La tribuna reaccionó con la cuota de rebeldía que el equipo puso sobre la cancha para empardar un trámite generalmente desfavorable, resultante de la supremacía que Liverpool estableció desde el comienzo. Danubio jugó como una hora atado por el medio y la defensa negriazules. Con Macchi a la cabeza, varios destructores locatarios rindieron por encima de los cinco puntos y -en algunos casos- tuvieron resto como para pedir el casco y construir. Los de Lasarte quedaron atrapados en la telaraña del toque paciente que plasma el Liverpool de Favaro. Ése que alterna la búsqueda lateral con las puñaladas concentradas en la habilidad de Alfaro, que otra vez desequilibró en cada encare. Pezzolano repitió su juego habilitador y pareció entenderse bien con Varela, la carta que jugó el técnico tras mandar al mazo a Sánchez, que el sábado fue suplente. El partido se recibió de partidazo al recibir las variantes. Pese a tener en la cuenta los goles de Aranda y Alfaro, Favaro hizo cambios que renovaron el ataque y obligaron a Conde. Lasarte le puso orden al medio cuando Delgado se paró como volante central y con sus lanzamientos economizó piernas en cada ataque. Pero -como ante Bella Vista- recién alcanzó la agresividad ideal cuando Scorza empezó a romperla por la derecha. El grito final demoró porque el arquero Castro se reafirmó como una de las revelaciones del torneo, con una sucesión de atajadas coleccionables. Los diarios del domingo hablaron de que Danubio quiere. Pero sólo los del lunes dirán si puede. Como a la diaria los fines de semana le gusta dormir, pregunta y respuesta van juntas en el mismo número. Así que para contestarle al título de hoy, viche la contratapa y actualice su tabla de posiciones.
Martín Rodríguez
Interviene poco
Un error de comunicación motivó una suspensión indefinida que sólo duró unas horas
Muchas cosas pasaron entre viernes, sábado y domingo en el básquetbol uruguayo. Hubo una fecha completa, la quinta del Torneo Apertura de la Liga Uruguaya de Básquetbol (LUB), que significó, entre otras cosas, el último partido de Biguá antes de viajar a Mar del Plata a disputar la Liga de las Américas. Además se anunció la intervención de la Federación Uruguaya de Basket Ball (FUBB) y la suspensión de la Liga por unos días, pero luego hubo una marcha atrás, ya que por un error de comunicación se tomó como una acción de intervención ministerial lo que era simplemente un legajo de la investigación. En definitiva, la actividad dentro de las canchas continúa mañana.
P>En la tarde del viernes comenzó la quinta fecha del Apertura de la LUB. En su última presentación antes de viajar a Mar del Plata a disputar el Grupo B de la Liga de las Américas, Biguá venció a Olimpia 78 a 54 en el partido de primera hora en el Palacio Peñarol. En el juego de fondo Malvín aplastó a Hebraica 107 a 72, Trouville le ganó como locatario claramente a Tabaré 95 a 80 y Atenas en la cancha de Sayago derrotó a Bohemios 79 a 74. El sábado, en el complemento de la etapa, Defensor Sporting se trajo el punto del litoral ante Paysandú 86 a 77.
En la tardecita del viernes se anunciaba en los medios de comunicación que el Ministerio de Educación y Cultura (MEC) iba a intervenir la FUBB debido a irregularidades que se registraron en las elecciones de 2006 cuando fue reelecto Luis Castillo. El ex presidente de Marne -dejó de serlo en el 2007- Walter Pesqueira, uno de los que protestaron la por forma como se eligió al presidente hace dos años, aclaró al programa radial Deportivo Uruguay (1050 AM) en la tarde del sábado que la FUBB no sería intervenida y que lo único ordenó el MEC fue realizar nuevas elecciones con las garantías dadas en los estatutos de la FUBB.
Lo que desató todo esto fue que en su momento la FUBB modificó el estatuto y, sin esperar que éste fuera aprobado, procedió a elegir autoridades rigiéndose por un estatuto que no estaba vigente, lo que cambiaba totalmente la forma de elegir y la cantidad de votos que necesitaba el presidente para ser elegido. En definitiva, y lo que queda clarísimo, es que las elecciones realizadas en 2006 no fueron legítimas. Este año el MEC ordenó a la FUBB realizar nuevas elecciones, pero el máximo organismo del básquetbol uruguayo respondió que ya había efectuado otras elecciones. Fue entonces cuando un expediente del MEC que no contenía resolución firmada por la ministra llegó al Ministerio de Turismo y Deporte y desde allí, a partir de un error de comunicación e interpretación, comenzó el teléfono descompuesto. Con este panorama, Castillo decidió la suspensión de las actividades a partir del lunes, información que resonó en los medios de comunicación. Pero el mismo sábado el portal de noticias www.180.com.uy publicó la noticia de que la FUBB no sería intervenida y que todo se trató de un error involuntario de comunicación, según un comunicado del MEC. Luego de publicada esta información la Mesa de la Liga Uruguaya fijó los cuatro partidos de la sexta fecha de la Liga para mañana.
Muchas cosas pasaron entre viernes, sábado y domingo en el básquetbol uruguayo. Hubo una fecha completa, la quinta del Torneo Apertura de la Liga Uruguaya de Básquetbol (LUB), que significó, entre otras cosas, el último partido de Biguá antes de viajar a Mar del Plata a disputar la Liga de las Américas. Además se anunció la intervención de la Federación Uruguaya de Basket Ball (FUBB) y la suspensión de la Liga por unos días, pero luego hubo una marcha atrás, ya que por un error de comunicación se tomó como una acción de intervención ministerial lo que era simplemente un legajo de la investigación. En definitiva, la actividad dentro de las canchas continúa mañana.
P>En la tarde del viernes comenzó la quinta fecha del Apertura de la LUB. En su última presentación antes de viajar a Mar del Plata a disputar el Grupo B de la Liga de las Américas, Biguá venció a Olimpia 78 a 54 en el partido de primera hora en el Palacio Peñarol. En el juego de fondo Malvín aplastó a Hebraica 107 a 72, Trouville le ganó como locatario claramente a Tabaré 95 a 80 y Atenas en la cancha de Sayago derrotó a Bohemios 79 a 74. El sábado, en el complemento de la etapa, Defensor Sporting se trajo el punto del litoral ante Paysandú 86 a 77.
En la tardecita del viernes se anunciaba en los medios de comunicación que el Ministerio de Educación y Cultura (MEC) iba a intervenir la FUBB debido a irregularidades que se registraron en las elecciones de 2006 cuando fue reelecto Luis Castillo. El ex presidente de Marne -dejó de serlo en el 2007- Walter Pesqueira, uno de los que protestaron la por forma como se eligió al presidente hace dos años, aclaró al programa radial Deportivo Uruguay (1050 AM) en la tarde del sábado que la FUBB no sería intervenida y que lo único ordenó el MEC fue realizar nuevas elecciones con las garantías dadas en los estatutos de la FUBB.
Lo que desató todo esto fue que en su momento la FUBB modificó el estatuto y, sin esperar que éste fuera aprobado, procedió a elegir autoridades rigiéndose por un estatuto que no estaba vigente, lo que cambiaba totalmente la forma de elegir y la cantidad de votos que necesitaba el presidente para ser elegido. En definitiva, y lo que queda clarísimo, es que las elecciones realizadas en 2006 no fueron legítimas. Este año el MEC ordenó a la FUBB realizar nuevas elecciones, pero el máximo organismo del básquetbol uruguayo respondió que ya había efectuado otras elecciones. Fue entonces cuando un expediente del MEC que no contenía resolución firmada por la ministra llegó al Ministerio de Turismo y Deporte y desde allí, a partir de un error de comunicación e interpretación, comenzó el teléfono descompuesto. Con este panorama, Castillo decidió la suspensión de las actividades a partir del lunes, información que resonó en los medios de comunicación. Pero el mismo sábado el portal de noticias www.180.com.uy publicó la noticia de que la FUBB no sería intervenida y que todo se trató de un error involuntario de comunicación, según un comunicado del MEC. Luego de publicada esta información la Mesa de la Liga Uruguaya fijó los cuatro partidos de la sexta fecha de la Liga para mañana.
viernes, 12 de diciembre de 2008
Ése sí que toca pito
Algo poco clásico: que lo más importante sea el juez
Algún día iba a pasar. La noticia del clásico, la previa, la de la especulación, la de las esperanzas y los sueños, esta vez es quién jugará de 9 en Nacional o quién será el 5 de Peñarol, ni la propuesta táctica de uno o el aporte de la experiencia del otro, sino que llamativamente el esperado aporte informativo tiene que ver con reseñar que Jorge Larrionda será el árbitro en el partido del domingo.
Es posible que ustedes ya conozcan la historia, que es tan aburrida como heterodoxa y que tiene sus puntos más altos, en medio de un bombardeo cuyo cometido es generar la idea de que no habrá fútbol -la violencia, las deudas de la B, un factible reclamo de los jueces, el embargo a Casal y algunas cuantas cosas más-, en la fallida nominación de Líber Prudente como árbitro principal del encuentro entre aurinegros y tricolores. El doctor en medicina humana -cuando algunos periodistas lo descalifican y dicen que no hablan de lo humano sino de lo profesional, ¿lo cuestionarán como médico?- no le había encontrado el pulso al horario del partido entre Nacional y Villa Española, y, cumpliendo con el prospecto del Colegio, suspendió el juego y se compró un gran problema.
Después de tres meses, el partido se jugó pero Prudente no lo pitó, y el miércoles, cuando pocos podían creer que fuera elegido para dirigir el partido de mayor expectativa entre los aficionados seguidores del fútbol en Uruguay, los miembros técnicos del Colegio de Árbitros decidieron que era el ideal para pitar. Cuando Corbo se enteró mandó parar, y ayer, junto a los miembros no renunciantes del Colegio, nominaron al mundialista Jorge Larrionda. Medio raro en torno a un clásico y al ambiente futbolero, pero el nombramiento de Larrionda tuvo la misma unanimidad que el Canario García al mostrar el tatuaje de Artigas mientras gritaba el gol en la Copa América. Prudente integrará la terna del partido que Villa Española jugará ante Wanderers.
¿Lo demás qué importa?
Resuelto el tema del juez, ¿que importan las alineaciones? Ninguno de los entrenadores adelantó el equipo para el domingo, aunque parece un poco más previsible el de Nacional. Seguramente el DT tricolor pase al argentino Matías Rodríguez al mediocampo para dar ingreso al minuano Pablo Caballero al lateral derecho. Así, el equipo de Pelusso, que dijo una vez más, como debería ser lógico, que no tiene apuro por confirmar la oncena, formaría con Leonardo Burián; Pablo Caballero, Mauricio Victorino, Pablo Melo y Gastón Filgueira; Matías Rodríguez, Óscar Javier Morales y Diego Arismendi; Martín Ligüera; Alexander Medina y Sergio Blanco.
En Peñarol seguramente vamos a errar más nombres porque Saralegui experimentó muchos cambios y no dio pistas ni en el Facebook, donde su consejera Yosselem Rocamora le aconseja: "Fierita: ¡¡¡Cuántos adivinos hay en este país!!! Ya saben el equipo antes que vos... ¡¡¡¡¡Cerráaa laaaa bocaaa!!!!! Cantá truco... si tenés flor... ¡¡¡retruco!!! ¡¡¡Arriba!!! ¡¡¡Besote a vos al 'Gran Profe', al inigualable 'Cabeza' y a la banda!!! Ah... y a los chusman que miran y me copian... Channnnnn".
Una de las posibilidades es que el equipo esté integrado con Pablo Cavallero; Matías Aguirregaray, Gerardo Alcoba, Darío Rodríguez y Jonathan Píriz; Maximiliano Arias, Maximiliano Bajter, Antonio Pacheco; Carlos Bueno y Richard Núñez.
Algún día iba a pasar. La noticia del clásico, la previa, la de la especulación, la de las esperanzas y los sueños, esta vez es quién jugará de 9 en Nacional o quién será el 5 de Peñarol, ni la propuesta táctica de uno o el aporte de la experiencia del otro, sino que llamativamente el esperado aporte informativo tiene que ver con reseñar que Jorge Larrionda será el árbitro en el partido del domingo.
Es posible que ustedes ya conozcan la historia, que es tan aburrida como heterodoxa y que tiene sus puntos más altos, en medio de un bombardeo cuyo cometido es generar la idea de que no habrá fútbol -la violencia, las deudas de la B, un factible reclamo de los jueces, el embargo a Casal y algunas cuantas cosas más-, en la fallida nominación de Líber Prudente como árbitro principal del encuentro entre aurinegros y tricolores. El doctor en medicina humana -cuando algunos periodistas lo descalifican y dicen que no hablan de lo humano sino de lo profesional, ¿lo cuestionarán como médico?- no le había encontrado el pulso al horario del partido entre Nacional y Villa Española, y, cumpliendo con el prospecto del Colegio, suspendió el juego y se compró un gran problema.
Después de tres meses, el partido se jugó pero Prudente no lo pitó, y el miércoles, cuando pocos podían creer que fuera elegido para dirigir el partido de mayor expectativa entre los aficionados seguidores del fútbol en Uruguay, los miembros técnicos del Colegio de Árbitros decidieron que era el ideal para pitar. Cuando Corbo se enteró mandó parar, y ayer, junto a los miembros no renunciantes del Colegio, nominaron al mundialista Jorge Larrionda. Medio raro en torno a un clásico y al ambiente futbolero, pero el nombramiento de Larrionda tuvo la misma unanimidad que el Canario García al mostrar el tatuaje de Artigas mientras gritaba el gol en la Copa América. Prudente integrará la terna del partido que Villa Española jugará ante Wanderers.
¿Lo demás qué importa?
Resuelto el tema del juez, ¿que importan las alineaciones? Ninguno de los entrenadores adelantó el equipo para el domingo, aunque parece un poco más previsible el de Nacional. Seguramente el DT tricolor pase al argentino Matías Rodríguez al mediocampo para dar ingreso al minuano Pablo Caballero al lateral derecho. Así, el equipo de Pelusso, que dijo una vez más, como debería ser lógico, que no tiene apuro por confirmar la oncena, formaría con Leonardo Burián; Pablo Caballero, Mauricio Victorino, Pablo Melo y Gastón Filgueira; Matías Rodríguez, Óscar Javier Morales y Diego Arismendi; Martín Ligüera; Alexander Medina y Sergio Blanco.
En Peñarol seguramente vamos a errar más nombres porque Saralegui experimentó muchos cambios y no dio pistas ni en el Facebook, donde su consejera Yosselem Rocamora le aconseja: "Fierita: ¡¡¡Cuántos adivinos hay en este país!!! Ya saben el equipo antes que vos... ¡¡¡¡¡Cerráaa laaaa bocaaa!!!!! Cantá truco... si tenés flor... ¡¡¡retruco!!! ¡¡¡Arriba!!! ¡¡¡Besote a vos al 'Gran Profe', al inigualable 'Cabeza' y a la banda!!! Ah... y a los chusman que miran y me copian... Channnnnn".
Una de las posibilidades es que el equipo esté integrado con Pablo Cavallero; Matías Aguirregaray, Gerardo Alcoba, Darío Rodríguez y Jonathan Píriz; Maximiliano Arias, Maximiliano Bajter, Antonio Pacheco; Carlos Bueno y Richard Núñez.
Deme dos
Ayer en todos los locales de la red Abitab comenzó la venta anticipada y en red, y en las boleterías de las tribunas Olímpica y Colombes del Estadio Centenario, en las clásicas boleterías con cola, colados y mangazos ya se vendieron como 25.000 entradas. La directiva aurinegra fijó valores bastante elevados, pero se jugó a que la gente gatille igual. Encima, los niños de más de cinco años pagan entrada común.
Los precios son: tribunas Amsterdam (Peñarol) -parece que sólo quedan 300- y Colombes (Nacional) $ 120; tribuna Olímpica $ 250; tribuna y platea América $ 300; los socios de Peñarol ingresarán gratis, aunque estos últimos deberán canjear sus entradas de 10.00 a 19.00 en las boleterías de la tribuna Olímpica del Centenario. Recordamos que se venderán como máximo dos entradas por persona.
El instructivo oficial de la AUF indica que los socios de Peñarol deben canjear su entrada hoy y mañana en boleterías de tribuna América de 9.00 a 19.00 horas.
Venta previa: 1) Estadio Centenario, en boleterías de Olímpica para Peñarol; en boleterías de Colombes para Nacional, hoy y mañana de 9.00 a 19.00 horas. 2) Locales de Abitab, hoy, mañana y el sábado en sus respectivos horarios.
Venta el día del partido: el remanente de entradas se venderá en el Centenario de 9.00 a 12.00 en tribuna Olímpica para Peñarol, y en tribuna Colombes para Nacional.
Los precios son: tribunas Amsterdam (Peñarol) -parece que sólo quedan 300- y Colombes (Nacional) $ 120; tribuna Olímpica $ 250; tribuna y platea América $ 300; los socios de Peñarol ingresarán gratis, aunque estos últimos deberán canjear sus entradas de 10.00 a 19.00 en las boleterías de la tribuna Olímpica del Centenario. Recordamos que se venderán como máximo dos entradas por persona.
El instructivo oficial de la AUF indica que los socios de Peñarol deben canjear su entrada hoy y mañana en boleterías de tribuna América de 9.00 a 19.00 horas.
Venta previa: 1) Estadio Centenario, en boleterías de Olímpica para Peñarol; en boleterías de Colombes para Nacional, hoy y mañana de 9.00 a 19.00 horas. 2) Locales de Abitab, hoy, mañana y el sábado en sus respectivos horarios.
Venta el día del partido: el remanente de entradas se venderá en el Centenario de 9.00 a 12.00 en tribuna Olímpica para Peñarol, y en tribuna Colombes para Nacional.
jueves, 11 de diciembre de 2008
Las gaviotas no me empalagan
Noveno triunfo consecutivo de Biguá sobre Malvín
Desde aquellas finales recordadas de la LUB 2006, los duelos Malvín-Biguá se han transformado en una rivalidad especial. La última vez que la gaviota le ganó al pato fue cuando se coronó campeón. Los jugadores se conocen a la perfección y se tienen ganas. Osimani y García Morales contra el Enano Martínez y Emilio Taboada. La hinchada playera en cada encuentro les recuerda a los jugadores rivales esos partidos que le dieron a Malvín el único título que obtuvo en su historia. Sobre todo a Martín Osimani, que con la coronación del pato en la pasada Liga se sacó un gran peso de encima.
El estadio de la calle Legrand lució acorde al evento, lleno y con ambiente de final.
El primer cuarto fue muy parejo y hubo pocos goles. El entrenador del pato, Néstor Che García, rotó a su amplio plantel, pensando en la Liga de las Américas que Biguá disputará la semana próxima en Mar del Plata. Las defensas predominaban sobre las ofensivas, el ingreso del Sapo Rovira le dio condimento al juego cuando se encontró con el Enano Martínez. El local se fue al primer descanso 17 a 15.
El segundo período siguió muy errático. Biguá en los primeros tres minutos consiguió un parcial de 12 a 4, jugando al revés que de costumbre: Kevin Young pesó en la pintura y los externos jugaron para él; fue muy importante el trabajo de Rovira en defensa y hasta agarrando rebotes ofensivos, algo común últimamente en el menudo jugador. En el rival, Pablo López mandó a la cancha a Martín Suárez en lugar de Taboada, que cometió su tercera falta. El alero reclutado en el draft hizo de las suyas, ayudó en defensa y se soltó en ataque rápido, culminando en una ocasión con una hundida soberbia. Convirtió 7 tantos en ese lapso. Otro gran ingreso desde el banco fue el de Tito Borselino, fundamental en ambas tablas. El playero marcó un parcial de 9 a 0 para pasar a estar arriba 32 a 29. El primer tiempo terminó 36 a 33 a favor del local.
En el tercer cuarto apareció el Pica Aguiar, con dos triples consecutivos que permitieron que el pato pasara a ganar 39 a 38. En ese momento el partido estaba muy conversado. Martínez era anulado por Osimani, circunstancia que perturbó a los locales. El pato cerró un parcial de 15 a 5. En el cierre del tercero Malvín se arrimó con el trabajo de Taboada, que regresó a la cancha y desde ese momento se puso el cuadro al hombro. Biguá terminó ganando 51 a 50 y con ese resultado comenzó el último período.
En el epílogo del encuentro, el actual campeón sudamericano, con carpeta más que básquetbol, cerró mejor el juego. Con Leandro García Morales, que aportó puntos importantes y fue muy efectivo en libres, se llevó el triunfo con un tanteador final de 72 a 67. Malvín fue muy dependiente de Taboada, de notable partido, con 26 puntos, pero muy poco acompañado. A eso se sumó el 44% de libres que tuvo el playero. Al finalizar el partido, un gesto innecesario de García Morales a la hinchada local perturbó a algunos pero no pasó a mayores.
Las luces de la noche
El Apertura habrá de continuar mañana, con todos los partidos que se juegan en Montevideo de esta quinta etapa. La razón de que no haya encuentro sabatino en la capital aparentemente es la realización de la Noche de las Luces en la zona costera. La explicación pierde lógica si advertimos que uno de los encuentros, Atenas-Bohemios, se habrá de jugar en uno de los escenarios más norteños de la capital, en la cancha de Sayago. Seguramente la seguidora parcialidad ateniense llegará en buen número a Ariel y la vía, pero es presumible que no responda de la misma forma la hincha de Bohemios, que viene de una fea derrota ante Olimpia y está último y sin victorias en esta segunda parte del torneo.
Olimpia, el único que ganó todo en el Apertura, volverá a jugar por tercera jornada consecutiva en el playero horario de las siete de la tarde en el Palacio Peñarol. Esta vez el rival será Biguá, y un partido que seguramente en cualquier otro escenario y horario se jugaría con mucha gente, es muy probable que tenga un primer tiempo con poco más de una centena de espectadores. A segunda hora, en el Palacio y para la televisión, quienes se enfrentarán serán Hebraica y Malvín, en un partido que tiene muy buena pinta.
El juego que seguramente más gente arrime a las boleterías será el que disputen, en la calle Chucarro, Trouville y Tabaré, que vienen de estupendas victorias en la última fecha.
El sábado, en el 8 de Junio de Paysandú, el local, que viene de una fea derrota ante Atenas, con una flojísima noche de sus extranjeros, el estadounidense Montgomery y el bahameño Eneas, enfrentará a uno de los líderes, Sporting, que en un buen encuentro ante Macabi perdió en alargue.
Leo Bernini
Posiciones LUB
CLUB PJ PG PP Arrastre PTS
Biguá 6 5 1 22 33
Sporting 4 3 1 22 29
Olimpia 4 4 0 20,5 28,5
Malvín 5 2 3 21,5 28,5
Tabaré 4 2 2 21 27
Atenas 4 2 2 21 27
Hebraica * 3 2 1 20 25
Trouville * 4 1 3 19 24
Paysandú 4 0 4 19 23
Bohemios 4 0 4 18,5 22,5
Tienen suspendido el partido entre ellos. A falta de 2.30 minutos ganaba Hebraica por 85 a 82.
Desde aquellas finales recordadas de la LUB 2006, los duelos Malvín-Biguá se han transformado en una rivalidad especial. La última vez que la gaviota le ganó al pato fue cuando se coronó campeón. Los jugadores se conocen a la perfección y se tienen ganas. Osimani y García Morales contra el Enano Martínez y Emilio Taboada. La hinchada playera en cada encuentro les recuerda a los jugadores rivales esos partidos que le dieron a Malvín el único título que obtuvo en su historia. Sobre todo a Martín Osimani, que con la coronación del pato en la pasada Liga se sacó un gran peso de encima.
El estadio de la calle Legrand lució acorde al evento, lleno y con ambiente de final.
El primer cuarto fue muy parejo y hubo pocos goles. El entrenador del pato, Néstor Che García, rotó a su amplio plantel, pensando en la Liga de las Américas que Biguá disputará la semana próxima en Mar del Plata. Las defensas predominaban sobre las ofensivas, el ingreso del Sapo Rovira le dio condimento al juego cuando se encontró con el Enano Martínez. El local se fue al primer descanso 17 a 15.
El segundo período siguió muy errático. Biguá en los primeros tres minutos consiguió un parcial de 12 a 4, jugando al revés que de costumbre: Kevin Young pesó en la pintura y los externos jugaron para él; fue muy importante el trabajo de Rovira en defensa y hasta agarrando rebotes ofensivos, algo común últimamente en el menudo jugador. En el rival, Pablo López mandó a la cancha a Martín Suárez en lugar de Taboada, que cometió su tercera falta. El alero reclutado en el draft hizo de las suyas, ayudó en defensa y se soltó en ataque rápido, culminando en una ocasión con una hundida soberbia. Convirtió 7 tantos en ese lapso. Otro gran ingreso desde el banco fue el de Tito Borselino, fundamental en ambas tablas. El playero marcó un parcial de 9 a 0 para pasar a estar arriba 32 a 29. El primer tiempo terminó 36 a 33 a favor del local.
En el tercer cuarto apareció el Pica Aguiar, con dos triples consecutivos que permitieron que el pato pasara a ganar 39 a 38. En ese momento el partido estaba muy conversado. Martínez era anulado por Osimani, circunstancia que perturbó a los locales. El pato cerró un parcial de 15 a 5. En el cierre del tercero Malvín se arrimó con el trabajo de Taboada, que regresó a la cancha y desde ese momento se puso el cuadro al hombro. Biguá terminó ganando 51 a 50 y con ese resultado comenzó el último período.
En el epílogo del encuentro, el actual campeón sudamericano, con carpeta más que básquetbol, cerró mejor el juego. Con Leandro García Morales, que aportó puntos importantes y fue muy efectivo en libres, se llevó el triunfo con un tanteador final de 72 a 67. Malvín fue muy dependiente de Taboada, de notable partido, con 26 puntos, pero muy poco acompañado. A eso se sumó el 44% de libres que tuvo el playero. Al finalizar el partido, un gesto innecesario de García Morales a la hinchada local perturbó a algunos pero no pasó a mayores.
Las luces de la noche
El Apertura habrá de continuar mañana, con todos los partidos que se juegan en Montevideo de esta quinta etapa. La razón de que no haya encuentro sabatino en la capital aparentemente es la realización de la Noche de las Luces en la zona costera. La explicación pierde lógica si advertimos que uno de los encuentros, Atenas-Bohemios, se habrá de jugar en uno de los escenarios más norteños de la capital, en la cancha de Sayago. Seguramente la seguidora parcialidad ateniense llegará en buen número a Ariel y la vía, pero es presumible que no responda de la misma forma la hincha de Bohemios, que viene de una fea derrota ante Olimpia y está último y sin victorias en esta segunda parte del torneo.
Olimpia, el único que ganó todo en el Apertura, volverá a jugar por tercera jornada consecutiva en el playero horario de las siete de la tarde en el Palacio Peñarol. Esta vez el rival será Biguá, y un partido que seguramente en cualquier otro escenario y horario se jugaría con mucha gente, es muy probable que tenga un primer tiempo con poco más de una centena de espectadores. A segunda hora, en el Palacio y para la televisión, quienes se enfrentarán serán Hebraica y Malvín, en un partido que tiene muy buena pinta.
El juego que seguramente más gente arrime a las boleterías será el que disputen, en la calle Chucarro, Trouville y Tabaré, que vienen de estupendas victorias en la última fecha.
El sábado, en el 8 de Junio de Paysandú, el local, que viene de una fea derrota ante Atenas, con una flojísima noche de sus extranjeros, el estadounidense Montgomery y el bahameño Eneas, enfrentará a uno de los líderes, Sporting, que en un buen encuentro ante Macabi perdió en alargue.
Leo Bernini
Posiciones LUB
CLUB PJ PG PP Arrastre PTS
Biguá 6 5 1 22 33
Sporting 4 3 1 22 29
Olimpia 4 4 0 20,5 28,5
Malvín 5 2 3 21,5 28,5
Tabaré 4 2 2 21 27
Atenas 4 2 2 21 27
Hebraica * 3 2 1 20 25
Trouville * 4 1 3 19 24
Paysandú 4 0 4 19 23
Bohemios 4 0 4 18,5 22,5
Tienen suspendido el partido entre ellos. A falta de 2.30 minutos ganaba Hebraica por 85 a 82.
martes, 9 de diciembre de 2008
Cinco estrellas
Con su victoria de anoche ante San Telmo por 112 a 92, Capitol consiguió el objetivo con el que dirigentes y deportistas habían comenzado hace unos meses su labor: ascender al Metro, volver a segunda.
Los albos del Prado armaron un interesante plantel con la presencia de José Mackiewicz, Fernando Caral, Ciro Pastrana, Cristian Book, Nicolás Gentini, Ignacio Botti, Andrés Jones, entre otros, y realizaron una campaña formidable en la fase regular, en donde sólo perdieron un par de partidos, los dos que jugaron ante Montevideo BBC, ante quienes llegaron igualados al final del campeonato. Después de tres finales ante los rojos del Mercado, Capitol, perdedor en tal instancia, debió reengancharse en la lucha por el segundo ascenso y vencieron en dos partidos a Stockolmo para llegar a estas finales ante el más novel equipo de la FUBB. Capitol ya había vencido a San Telmo la semana pasada en el Prado.
El equipo de las cinco estrellas ha competido con éxito en las distintas divisionales del baloncesto uruguayo y se le recuerda expresamente su última participación en la primera división de la FUBB con aquel equipo que en los setentas destacó con una formación en la que sobresalían muchos goleadores, como Walter Canziani, el Gallego Daniel Taibo, la Chacha Dietschi, Julio Monterroso y otros.
Ahora Capitol será uno de los participantes del próximo Metropolitano, anunciado para el 17 de abril del 2009, torneo que entregará dos ascensos a la Liga 2010.
Los albos del Prado armaron un interesante plantel con la presencia de José Mackiewicz, Fernando Caral, Ciro Pastrana, Cristian Book, Nicolás Gentini, Ignacio Botti, Andrés Jones, entre otros, y realizaron una campaña formidable en la fase regular, en donde sólo perdieron un par de partidos, los dos que jugaron ante Montevideo BBC, ante quienes llegaron igualados al final del campeonato. Después de tres finales ante los rojos del Mercado, Capitol, perdedor en tal instancia, debió reengancharse en la lucha por el segundo ascenso y vencieron en dos partidos a Stockolmo para llegar a estas finales ante el más novel equipo de la FUBB. Capitol ya había vencido a San Telmo la semana pasada en el Prado.
El equipo de las cinco estrellas ha competido con éxito en las distintas divisionales del baloncesto uruguayo y se le recuerda expresamente su última participación en la primera división de la FUBB con aquel equipo que en los setentas destacó con una formación en la que sobresalían muchos goleadores, como Walter Canziani, el Gallego Daniel Taibo, la Chacha Dietschi, Julio Monterroso y otros.
Ahora Capitol será uno de los participantes del próximo Metropolitano, anunciado para el 17 de abril del 2009, torneo que entregará dos ascensos a la Liga 2010.
El otro veto de Tabaré
El equipo del indio abortó la larga carrera de triunfos de Biguá
Hay como un aura, mágica, épica, que se percibe al traspasar el portal histórico de piedra laja en esa extraña rinconada del Parque Batlle. Es como si un timador de ilusiones muertas jugara con el reloj de la historia e hiciera reaparecer aquellos efluvios de gloria que una vez se tamizaron entre aquellos bravos seguidores, concubinos perennes de la gloria, y aquellos robustos héroes que hicieron de Tabaré un nombre apenas menos glorioso que el que imaginó Zorrilla de San Martín. Entrás y algo te avisa que está ante un acontecimiento cargado del sincretismo que ha logrado desarrollar el espíritu deportivo uruguayo, que permite imaginar grandes gestas cuando la lógica impide cualquier desarrollo esperanzador.
De un lado están los magníficos deportistas de Biguá, atléticos, apolíneos, ganadores y con una técnica desarrollada y armonizada colectivamente. Da gusto verlos, leves, casi etéreos y con la soltura que sólo los grandes jugadores pueden mostrar. Ya llevan 19 partidos ganados en fila y van por el vigésimo. Del otro lado, con el paso cansado y el desgaste de tantas noches de gloria y de las otras, están los viejos héroes de tantas otras camisetas que han llegado a Tabaré para reeditar aquellos años mozos. Tienen los sueños siempre nuevos como los de los jóvenes que los acompañan y saben que cada noche siempre hay un sorbo de gloria.
Alguna vez Gonchi Caneiro le habrá pasado la posta al Oso Osimani, alguna vez Diego Losada le habrá dejado su lugar a Leandro García Morales. Los jóvenes de Biguá son el presente, pero los viejos cracks, si no son el hoy, son algo muy parecido.
Diecinueve partidos llevaba sin perder Biguá; hacía dos que no ganaba el indio. En la cancha, con excepcionales prestaciones de Caneiro, Jhonny Rodríguez, Seba Muñoz, el Colo Laborda y el reaparecido Matthews, el equipo de Camila empezó a mandar, mientras el Che García a puro chiflidos y rotaciones trataba de buscarle la vuelta al partido. Se fueron al entretiempo con ventaja de 14 para el indio. En el segundo tiempo Biguá sacó toda la artillería y en el último cuarto llegó a empatar y pasar metiendo un impresionante parcial de 23 a 7, pero la imponente presencia de Gonzalo Caneiro, jugando y haciendo jugar, dio el cierre y la noche soñada para Tabaré, que terminó arriba 81 a 75.
Malvín no siempre impone respeto
Las diferencias se acortan. Trouville hizo méritos para zafar de los dos últimos lugares donde habitarán los que no jugarán los play off de la Liga Uruguaya al derrotar anoche a Malvín en Pocitos. Consiguió sacar la cabeza en el partido siguiente a ser destrozado por Defensor Sporting, que lo aventajó nada menos que por ¡49 puntos! Ganó en arremetida final. Del 74-74 terminaron en 82-77. Para eso fue capital el excelente trabajo de marca que se hizo sobre Fernando Martínez, matando el juego malvinense desde chiquito. Los parciales fueron Malvín 25-22, Trouville 38-36 y Malvín 62-56.
S>Tirate, que hay arenita
P>La 4ª fecha de la Liga se completará hoy con tres partidos.
Desde las 19.00, un horario netamente antipático para los espectadores, Bohemios y Olimpia abrirán la doble jornada que tendrá lugar en el Palacio Cr. Gastón Güelfi, en un encuentro que a priori tiene como favoritos a los de Colón, que ha ganado todos los partidos que jugaron en esta segunda fase del campeonato. Bohemios, que perdió los tres, no lo ha hecho del todo mal y hoy puede ser un buen día para empezar a sumar. Que el partido se juegue en ese horario, en que la gente de la calle Pereyra seguramente está bajando a la playa, y considerando que los de Colón, que tienen una horita de ómnibus urbano de viaje, tienen que arrancar casi después de comer, no tiene demasiada explicación racional.
A continuación de este cruce tendrá lugar el atractivo duelo entre Hebraica y Defensor Sporting, que está bien arriba en las posiciones, sólo superado por Biguá, que tiene un partido jugado más. Lindo partido por los posibles atributos técnicos que presenten los quintetos para seguir, ya sea en el Palacio Peñarol, que seguramente estará muy vacío, o por la televisión por cable.
El restante partido de hoy se disputará en la cancha de Tabaré, en donde Atenas ejercerá de local ante Paysandú. Los atenienses se reencontraron con la victoria después de cinco derrotas en fila, en tanto los sanduceros, que no saben de triunfos en el Apertura, el viernes demostraron en el Palacio Peñarol que pueden plantarle cara a cualquiera.
La actividad liguera proseguirá en la noche de mañana con un encuentro adelantado de la 7ª fecha que jugarán Malvín y Biguá, sin dudas un partidazo, que se celebrará en el escenario de los de la playa.
El juego se adelanta debido a que los días 16, 17 y 18 de diciembre Biguá -actual campeón sudamericano- participará en la primera fase de la Liga de las Américas, que se disputará en la ciudad argentina de Mar del Plata.
En esa instancia los rivales de los de Villa Biarritz serán el Peñarol local, el Regatas de Corrientes y los chilenos de Universidad de Concepción.
lunes, 8 de diciembre de 2008
¿Podrá cazarlo?
Hoy se inicia la cuarta fecha del Torneo Apertura. En el Parque Batlle, a las 21.15, Tabaré recibe a Biguá. El indio viene de caer en las últimas dos presentaciones, ambas en el Palacio Peñarol. En el último encuentro anotó solamente 49 puntos, por lo que el regreso de su goleador extranjero Clarence Matthews al equipo, luego de cumplir los cuatro partidos de suspensión, es una buena noticia para el entrenador Federico Camiña. Por su parte, el pato de Villa Biarritz hace 19 partidos que no pierde; 12 de ellos fueron por Liga Uruguaya, algo que es récord para el campeonato.
En la calle Chucarro, Trouville recibe a Malvín. El rojo de Pocitos viene de perder por paliza y además cayó en los últimos tres partidos que jugó, por lo que debe ganar para comenzar a levantar cabeza. Para el playero es una buena oportunidad de conseguir su tercer triunfo consecutivo y afianzarse en las primeras posiciones.
Mañana hay doble jornada en el Palacio Peñarol. A primera hora, a las 19.00, Bohemios juega con Olimpia. Los dos equipos tienen realidades distintas: los olimpistas ganaron los últimos cuatro partidos que jugaron y están invictos en el Apertura, mientras que los albimarrones perdieron en las últimas cuatro etapas y están últimos en la tabla de posiciones.
A segunda hora se jugará un gran partido entre Hebraica y Defensor Sporting. Los violetas, que si tenemos en cuenta los puntos perdidos están punteros junto a Biguá, vienen de cinco victorias al hilo y de los últimos diez encuentros ganaron nueve. Los macabeos están séptimos, vienen de perder y necesitan sumar para empezar a escalar posiciones.
Por último, en la cancha de Tabaré, Atenas es local ante Paysandú. El conjunto ateniense, luego de una mala racha, logró obtener el punto el sábado pasado y viene más aliviado. Los sanduceros no han ganado en este Apertura y tendrán una parada durísima.
En la calle Chucarro, Trouville recibe a Malvín. El rojo de Pocitos viene de perder por paliza y además cayó en los últimos tres partidos que jugó, por lo que debe ganar para comenzar a levantar cabeza. Para el playero es una buena oportunidad de conseguir su tercer triunfo consecutivo y afianzarse en las primeras posiciones.
Mañana hay doble jornada en el Palacio Peñarol. A primera hora, a las 19.00, Bohemios juega con Olimpia. Los dos equipos tienen realidades distintas: los olimpistas ganaron los últimos cuatro partidos que jugaron y están invictos en el Apertura, mientras que los albimarrones perdieron en las últimas cuatro etapas y están últimos en la tabla de posiciones.
A segunda hora se jugará un gran partido entre Hebraica y Defensor Sporting. Los violetas, que si tenemos en cuenta los puntos perdidos están punteros junto a Biguá, vienen de cinco victorias al hilo y de los últimos diez encuentros ganaron nueve. Los macabeos están séptimos, vienen de perder y necesitan sumar para empezar a escalar posiciones.
Por último, en la cancha de Tabaré, Atenas es local ante Paysandú. El conjunto ateniense, luego de una mala racha, logró obtener el punto el sábado pasado y viene más aliviado. Los sanduceros no han ganado en este Apertura y tendrán una parada durísima.
Sólo entre dos y… algunos más
Danubio y Nacional se perfilan como los más firmes candidatos
El título debió ser "Sólo entre dos", pero a este periodista autocrítico le faltaron agallas para referirse al panorama que se presenta cuando sólo restan tres fechas por definir y Danubio le sacó cuatro puntos al tercero y Nacional tres. Y entonces le extendió un crédito realista a Cerro, Peñarol y Liverpool.
En lo que el periodista no transa es en no darle la más mínima posibilidad a Defensor Sporting y Racing, sextos del Apertura con 21 puntos contra 27 del líder Danubio y chance matemática. Demasiadas redoblonas deberían producirse para que llegaran a ganarle la punta a Danubio y Nacional (26) a la vez.
También es muy difícil el panorama para Peñarol y Liverpool, es cierto. Pero ¡ojo!, cualquier hincha de Peñarol o de Liverpool puede confiar en la buena actuación y la buena fortuna en las últimas tres fechas. Por ejemplo: si ambos equipos ganan en la próxima y, consecuentemente, porque juegan contra ellos, caen Nacional y Danubio, todo se emparejará faltando dos etapas. Y quedarían: Danubio 27, Nacional y Cerro (si le gana a Central) 26, Peñarol y Liverpool 25.
A nadie le queda ningún pan comido y hay muchos enfrentamientos entre los aspirantes. Danubio remata nada menos que con tres que están arriba en la tabla: Liverpool, Central y Peñarol. Nacional lo hace ante Peñarol, River y Central. Cerro, con Central, Peñarol y Bella Vista. Peñarol, con Nacional, Cerro y Danubio. Liverpool, con Danubio, Central y Rampla. ¡Nos queda un campeonatazo de tres etapas!
El equipo de los Del Campo y Lasarte retomó la punta que había perdido entre semana con la victoria de Nacional sobre Villa Española, siendo ayudado para plasmar diferencias importantes por los empates de Nacional, Cerro, Peñarol y Racing.
Dicho esto, veamos cómo quedó la tabla de posiciones: 1) Danubio 27, 2) Nacional 26, 3) Cerro 23, 4) Peñarol y Liverpool 22, 6) Defensor y Racing 21, 8) Central 16, 9) River 14, 10) Rampla y Bella Vista 13, 12) Tacuarembó 11, 13) Villa Española 9, 14) Wanderers y Cerro Largo 8 y 16) Juventud 5.
En el descenso, pocas veces queda tan claramente expuesto cuáles son los tres condenados (aunque falten 18 partidos por jugar). Cerro Largo (duplica) tiene 16 puntos, Villa Española (duplica) 18, Bella Vista 36. Los que se salvan pero no duermen tranquilos son Racing (duplica) 42, Tacuarembó y Juventud 45, Central 48 y Wanderers 52. Hay mucha más tranquilidad desde Rampla y Cerro (ambos con 60) hacia adelante.
JB
El título debió ser "Sólo entre dos", pero a este periodista autocrítico le faltaron agallas para referirse al panorama que se presenta cuando sólo restan tres fechas por definir y Danubio le sacó cuatro puntos al tercero y Nacional tres. Y entonces le extendió un crédito realista a Cerro, Peñarol y Liverpool.
En lo que el periodista no transa es en no darle la más mínima posibilidad a Defensor Sporting y Racing, sextos del Apertura con 21 puntos contra 27 del líder Danubio y chance matemática. Demasiadas redoblonas deberían producirse para que llegaran a ganarle la punta a Danubio y Nacional (26) a la vez.
También es muy difícil el panorama para Peñarol y Liverpool, es cierto. Pero ¡ojo!, cualquier hincha de Peñarol o de Liverpool puede confiar en la buena actuación y la buena fortuna en las últimas tres fechas. Por ejemplo: si ambos equipos ganan en la próxima y, consecuentemente, porque juegan contra ellos, caen Nacional y Danubio, todo se emparejará faltando dos etapas. Y quedarían: Danubio 27, Nacional y Cerro (si le gana a Central) 26, Peñarol y Liverpool 25.
A nadie le queda ningún pan comido y hay muchos enfrentamientos entre los aspirantes. Danubio remata nada menos que con tres que están arriba en la tabla: Liverpool, Central y Peñarol. Nacional lo hace ante Peñarol, River y Central. Cerro, con Central, Peñarol y Bella Vista. Peñarol, con Nacional, Cerro y Danubio. Liverpool, con Danubio, Central y Rampla. ¡Nos queda un campeonatazo de tres etapas!
El equipo de los Del Campo y Lasarte retomó la punta que había perdido entre semana con la victoria de Nacional sobre Villa Española, siendo ayudado para plasmar diferencias importantes por los empates de Nacional, Cerro, Peñarol y Racing.
Dicho esto, veamos cómo quedó la tabla de posiciones: 1) Danubio 27, 2) Nacional 26, 3) Cerro 23, 4) Peñarol y Liverpool 22, 6) Defensor y Racing 21, 8) Central 16, 9) River 14, 10) Rampla y Bella Vista 13, 12) Tacuarembó 11, 13) Villa Española 9, 14) Wanderers y Cerro Largo 8 y 16) Juventud 5.
En el descenso, pocas veces queda tan claramente expuesto cuáles son los tres condenados (aunque falten 18 partidos por jugar). Cerro Largo (duplica) tiene 16 puntos, Villa Española (duplica) 18, Bella Vista 36. Los que se salvan pero no duermen tranquilos son Racing (duplica) 42, Tacuarembó y Juventud 45, Central 48 y Wanderers 52. Hay mucha más tranquilidad desde Rampla y Cerro (ambos con 60) hacia adelante.
JB
domingo, 7 de diciembre de 2008
Renovación y victoria
Defensor hizo ocho cambios y se reencontró con el triunfo
El nombre del grupo político que alguna vez lideró el Oso Aguirre sintetiza el domingo violeta. Da Silva hizo variantes obligadas y voluntarias, y el equipo dejó atrás el antecedente de dos derrotas consecutivas que lo alejaron de la pelea más linda. Por contundente y superior, derrotó a Wanderers 3 a 2. Pudo golear pero terminó pidiendo la hora.
Tras el preliminar que afuera enfrentó las piedras de la barra locataria con las de la visitante, Defensor reaccionó ante tanto cambio con una llamativa inseguridad defensiva. Lo disimuló con la eficacia que volvió mentiroso el 2 a 0 con el que murió el primer tiempo, la que le faltó cuando realmente superó a Wanderers con el juego de Vila, Marchant y Rubbo, promediando la segunda parte.
Los bohemios se desnudaron cuando Charquero descontó y bajaron la guardia tras el discutido tercer tanto violeta, para que Defensor batiera el récord de goles errados cuando más merecía festejarlos. Por eso terminó apretado luego del segundo descuento de Wanderers. Para peor, cerró el partido con nueve jugadores. Pudo ganar por varios cuerpos pero apenas lo hizo por una cabeza, dijera el Oso.
MR
El nombre del grupo político que alguna vez lideró el Oso Aguirre sintetiza el domingo violeta. Da Silva hizo variantes obligadas y voluntarias, y el equipo dejó atrás el antecedente de dos derrotas consecutivas que lo alejaron de la pelea más linda. Por contundente y superior, derrotó a Wanderers 3 a 2. Pudo golear pero terminó pidiendo la hora.
Tras el preliminar que afuera enfrentó las piedras de la barra locataria con las de la visitante, Defensor reaccionó ante tanto cambio con una llamativa inseguridad defensiva. Lo disimuló con la eficacia que volvió mentiroso el 2 a 0 con el que murió el primer tiempo, la que le faltó cuando realmente superó a Wanderers con el juego de Vila, Marchant y Rubbo, promediando la segunda parte.
Los bohemios se desnudaron cuando Charquero descontó y bajaron la guardia tras el discutido tercer tanto violeta, para que Defensor batiera el récord de goles errados cuando más merecía festejarlos. Por eso terminó apretado luego del segundo descuento de Wanderers. Para peor, cerró el partido con nueve jugadores. Pudo ganar por varios cuerpos pero apenas lo hizo por una cabeza, dijera el Oso.
MR
Fiebre colectiva
Con goles de Diego Vitabar y Richard Núñez fue empate 1 a 1 entre River y Peñarol
El Centenario es un horno, una olla en ebullición, una ola de espuma sudorosa.
El sol quema. Cansa. Muchos lentes negros, gorritos con visera y tremendo calor.
Los minutos pasan pegajosos en una temperatura ambiente agobiante -al borde de la asfixia- bajo un techo bien azul. Terminó el domingo y ya todo el mundo está pensando en el domingo que se viene. Ahí, no importa nada. La tabla es secundaria, la magia del clásico hace desaparecer los puntos, la mala racha, las ondas negativas.
Revive siempre el sueño de todos los campeonatos.
Fue empate 1 a 1 entre River y Peñarol, con un ambiente de calor imposible, con cuarenta grados, ahí, en la sopa verde del pasto.
El fútbol aurinegro desnudó incapacidad colectiva para generar volumen ofensivo y poder quebrar al rival.
El Peñarol del artiguense Saralegui terminó jugando rápido pero apurado, metiéndole garra a un fútbol nervioso, presionado por el resultado.
River jugó con mejor y mayor claridad en el fútbol colectivo en la primera mitad, pero le faltó precisión ofensiva a la hora de pegar en la red.
El partido fue abierto y cualquiera de ambos equipos pudo llevarse la victoria. Ambas escuadras se turnaron el dominio y el contragolpe como estrategia de juego.
Cuando corrían apenas tres minutos del segundo período llegó la primera ovación del gol.
El darsenero Diego Vitabar apareció en zona caliente a tocar el esférico y mandó el 1 a 0 parcial a las redes.
Peñarol apretó clavijas, empezó a remar y logró el empate con un zurdazo exquisito de Richard Núñez, que le pegó fuerte y seco, bien abajo, cruzado y contra un caño.
Fue el 1 a 1 definitivo para un partido parejo y con dinámica de ida y vuelta.
Como si se jugara en una cornisa sin red de contención. El que la metía, sin dudas ganaba.
Cuando llegó el cansancio y la adrenalina se desplomó ya sin ganas, no pasó más nada. Las chances se espaciaron y ganaron las defensas sobre los hombres de avanzada.
En el River siempre ofensivo de Carrasco cumplió buena faena el veloz Pelo Ortiz, y jugó buen partido el volante Mario Rizzoto en mitad de la cancha, marcando y pasando la guinda, mientras el Japonés Rodríguez volvió a mostrar el talento de la pierna zurda.
En Peñarol, el Tony Pacheco sigue siendo la figura de esta escuadra mirasol, que no encuentra aún la brújula de un fútbol que explote y entusiasme.
Restan tres partidos para el final del campeonato. Peñarol depende de otros, dejó escapar la chance de arrimarse más arriba en la tabla, pero la fiebre colectiva desaparece o entra otra vez en ebullición el próximo fin de semana. Se viene el clásico. El revienta corazones revive la pasión de la manyamanía.
Marcelo Tasistro
El Centenario es un horno, una olla en ebullición, una ola de espuma sudorosa.
El sol quema. Cansa. Muchos lentes negros, gorritos con visera y tremendo calor.
Los minutos pasan pegajosos en una temperatura ambiente agobiante -al borde de la asfixia- bajo un techo bien azul. Terminó el domingo y ya todo el mundo está pensando en el domingo que se viene. Ahí, no importa nada. La tabla es secundaria, la magia del clásico hace desaparecer los puntos, la mala racha, las ondas negativas.
Revive siempre el sueño de todos los campeonatos.
Fue empate 1 a 1 entre River y Peñarol, con un ambiente de calor imposible, con cuarenta grados, ahí, en la sopa verde del pasto.
El fútbol aurinegro desnudó incapacidad colectiva para generar volumen ofensivo y poder quebrar al rival.
El Peñarol del artiguense Saralegui terminó jugando rápido pero apurado, metiéndole garra a un fútbol nervioso, presionado por el resultado.
River jugó con mejor y mayor claridad en el fútbol colectivo en la primera mitad, pero le faltó precisión ofensiva a la hora de pegar en la red.
El partido fue abierto y cualquiera de ambos equipos pudo llevarse la victoria. Ambas escuadras se turnaron el dominio y el contragolpe como estrategia de juego.
Cuando corrían apenas tres minutos del segundo período llegó la primera ovación del gol.
El darsenero Diego Vitabar apareció en zona caliente a tocar el esférico y mandó el 1 a 0 parcial a las redes.
Peñarol apretó clavijas, empezó a remar y logró el empate con un zurdazo exquisito de Richard Núñez, que le pegó fuerte y seco, bien abajo, cruzado y contra un caño.
Fue el 1 a 1 definitivo para un partido parejo y con dinámica de ida y vuelta.
Como si se jugara en una cornisa sin red de contención. El que la metía, sin dudas ganaba.
Cuando llegó el cansancio y la adrenalina se desplomó ya sin ganas, no pasó más nada. Las chances se espaciaron y ganaron las defensas sobre los hombres de avanzada.
En el River siempre ofensivo de Carrasco cumplió buena faena el veloz Pelo Ortiz, y jugó buen partido el volante Mario Rizzoto en mitad de la cancha, marcando y pasando la guinda, mientras el Japonés Rodríguez volvió a mostrar el talento de la pierna zurda.
En Peñarol, el Tony Pacheco sigue siendo la figura de esta escuadra mirasol, que no encuentra aún la brújula de un fútbol que explote y entusiasme.
Restan tres partidos para el final del campeonato. Peñarol depende de otros, dejó escapar la chance de arrimarse más arriba en la tabla, pero la fiebre colectiva desaparece o entra otra vez en ebullición el próximo fin de semana. Se viene el clásico. El revienta corazones revive la pasión de la manyamanía.
Marcelo Tasistro
Sólo faltó gente
Nacional y Cerro regalaron un partidazo
Será que el espirómetro anduvo clarito y dejó afuera a unos cuantos, pero sorprendió encontrarse con un Centenario tan despoblado. Siendo duelo de primero contra uno de sus perseguidores y una tarde increíble de sol, dio pena ver nada más que cinco mil personas. Pero quienes fueron -o lo vieron por TV- seguro recordarán por buen tiempo este partido, que tuvo fútbol vistoso, vertiginoso, electrizante, goles, polémicas y no sigo porque para adjetivos está el de la tele.
Tomó la iniciativa Nacional, que de arranque volcó el juego sobre el arco de la Ámsterdam que defendió Muñoz en ese PT. Un tiro libre y algún centro sobre el área, más un contragolpe de Cerro al influjo de Molina precedieron al tempranero gol del cacique Medina, apenas pasados los diez minutos. Fue una linda jugada, rápida y precisa, con gran habilitación de Ligüera que dejó al 9 de cara al gol.
Nacional puso modo ataque off y se dedicó a correr la cancha tras los pasos del rival, tapando huecos y masticando a cualquiera que se arrimase a la medialuna. Pero Cerro no se embarulló y con toque corto y pared logró evadir el asedio de piernas hostiles. Así se acercó con peligro una vez, dos veces, un tiro de Molina apenas alto, otra de Suárez que llegó al fondo pero se bloqueó cuando el pase final.
Y Cerro iba, y Nacional en la cucha. 20' tardó el bolso en volver a inquietar el arco de Muñoz…Tanta pereza se pagó con el empate, que nació en los hábiles pies de Suárez, para habilitar a Dadomo, que trepó por izquierda y sirvió un centro de la muerte para un alegre Caballero que devolvió la sonrisa a los villeros. Y Cerro siguió, porque al instante invirtieron papeles Caballero y Suárez, que se comió el segundo cuando Nacional todavía no se hacía cargo del empate.
Tarde de perro
Aunque el calor lo imponía, el descanso perjudicó a Cerro, porque saltó al segundo tiempo tan displicente como quien gana por dos goles. Y lo pagó, cuando en cuatro minutos tomó el segundo gol, obra del chapita Blanco, que empujó de cabeza una peinada de su colega Medina.
Algunos giros de reloj y nos encontramos con el propio Blanco desparramado dentro del área porque un defensa cerrense lo tumbó. El juez Silvera ignoró y con un siga-siga salió del brete. ¡Pero en la que se metió cuando sobre los 63' cobró penal en el área de Nacional! Y para ponerle más color, fue el arquero Muñoz quien cobró la falta e igualó por segunda vez el partido.
Qué decir entonces cuando cinco minutos después Silvera pitó de nuevo falta en el área tricolor. Y para ponerle más picante aún, Muñoz tuvo por bien fallar el tiro pero corregir en el rebote, frustrando ese soplo de esperanza que significó la atajada de Burián.
Se quema todo
Nacional cargó la bronca y salió impetuoso a transformarla en goles. Pelusso quitó marca y puso gente con abstinencia de red. Y consiguió imponerse más con ganas que otra cosa, porque Cerro siguió siendo el equipo de fútbol, pero cierto, languideció un poco cuando fue asediado.
Y así llegó Nacional de nuevo, que forzó muchas faltas y córners para poner bajo los palos a la visita. Aunque en ese rato la más clara fue para Cerro en los pies de Molina, que se comió un gol poco creíble. Y después pagó, claro, cuando Victorino empató con un gol que un poco sintetiza de qué se trata este Nacional: rebeldía, obstinación, algo de suerte y decisión. Aunque ojo, que con ese mismo envión, a punto estuvo de encontrar el cuarto, cuando en la hora y de chilena el Morro García por un metro no fue cerro.
Rodrigo Ubilla
Será que el espirómetro anduvo clarito y dejó afuera a unos cuantos, pero sorprendió encontrarse con un Centenario tan despoblado. Siendo duelo de primero contra uno de sus perseguidores y una tarde increíble de sol, dio pena ver nada más que cinco mil personas. Pero quienes fueron -o lo vieron por TV- seguro recordarán por buen tiempo este partido, que tuvo fútbol vistoso, vertiginoso, electrizante, goles, polémicas y no sigo porque para adjetivos está el de la tele.
Tomó la iniciativa Nacional, que de arranque volcó el juego sobre el arco de la Ámsterdam que defendió Muñoz en ese PT. Un tiro libre y algún centro sobre el área, más un contragolpe de Cerro al influjo de Molina precedieron al tempranero gol del cacique Medina, apenas pasados los diez minutos. Fue una linda jugada, rápida y precisa, con gran habilitación de Ligüera que dejó al 9 de cara al gol.
Nacional puso modo ataque off y se dedicó a correr la cancha tras los pasos del rival, tapando huecos y masticando a cualquiera que se arrimase a la medialuna. Pero Cerro no se embarulló y con toque corto y pared logró evadir el asedio de piernas hostiles. Así se acercó con peligro una vez, dos veces, un tiro de Molina apenas alto, otra de Suárez que llegó al fondo pero se bloqueó cuando el pase final.
Y Cerro iba, y Nacional en la cucha. 20' tardó el bolso en volver a inquietar el arco de Muñoz…Tanta pereza se pagó con el empate, que nació en los hábiles pies de Suárez, para habilitar a Dadomo, que trepó por izquierda y sirvió un centro de la muerte para un alegre Caballero que devolvió la sonrisa a los villeros. Y Cerro siguió, porque al instante invirtieron papeles Caballero y Suárez, que se comió el segundo cuando Nacional todavía no se hacía cargo del empate.
Tarde de perro
Aunque el calor lo imponía, el descanso perjudicó a Cerro, porque saltó al segundo tiempo tan displicente como quien gana por dos goles. Y lo pagó, cuando en cuatro minutos tomó el segundo gol, obra del chapita Blanco, que empujó de cabeza una peinada de su colega Medina.
Algunos giros de reloj y nos encontramos con el propio Blanco desparramado dentro del área porque un defensa cerrense lo tumbó. El juez Silvera ignoró y con un siga-siga salió del brete. ¡Pero en la que se metió cuando sobre los 63' cobró penal en el área de Nacional! Y para ponerle más color, fue el arquero Muñoz quien cobró la falta e igualó por segunda vez el partido.
Qué decir entonces cuando cinco minutos después Silvera pitó de nuevo falta en el área tricolor. Y para ponerle más picante aún, Muñoz tuvo por bien fallar el tiro pero corregir en el rebote, frustrando ese soplo de esperanza que significó la atajada de Burián.
Se quema todo
Nacional cargó la bronca y salió impetuoso a transformarla en goles. Pelusso quitó marca y puso gente con abstinencia de red. Y consiguió imponerse más con ganas que otra cosa, porque Cerro siguió siendo el equipo de fútbol, pero cierto, languideció un poco cuando fue asediado.
Y así llegó Nacional de nuevo, que forzó muchas faltas y córners para poner bajo los palos a la visita. Aunque en ese rato la más clara fue para Cerro en los pies de Molina, que se comió un gol poco creíble. Y después pagó, claro, cuando Victorino empató con un gol que un poco sintetiza de qué se trata este Nacional: rebeldía, obstinación, algo de suerte y decisión. Aunque ojo, que con ese mismo envión, a punto estuvo de encontrar el cuarto, cuando en la hora y de chilena el Morro García por un metro no fue cerro.
Rodrigo Ubilla
Reenganche
Matemáticamente, Liverpool tiene chance: 2 a 1
Con decisión, Alfaro la pidió y la puso en el punto penal. Con fuerza, tiró para gritar un gol y un triunfo tan agónicos como salvadores de las esperanzas más rebeldes. Liverpool quebró a Central Español de penal y en la hora. Está lejos, pero no se bajó de la pelea por el título.
Terminó la racha palermitana, aunque por un momento los de Garisto parecieron dispuestos a estirarla. A los 31’ sacaron de la teoría una jugada perfecta. Llevaron a la práctica pase profundo, desborde, centro pasado y cabezazo: Silva agarró a contrapié al arquero y festejó el parcial 1 a 0.
Antes y después, fue algo más Liverpool. A paso cansino, el negriazul se mostró superior colectivamente. No todo lo esperable según su potencial y las limitaciones de un rival rengo. Anótese que el trámite evidenció los problemas palermitanos. La ausencia del lateral zurdo Martínez llevó a ese extremo al diestro Maulela. Y expuso sobre el otro a Fernández, que generalmente es zaguero. Central careció de su habitual proyección por derecha y sufrió con los timbrazos de Aranda y Alfaro, cuando buscaron al lateral improvisado.
Liverpool comió de la tranquilidad transmitida por el rápido empate de Pezzolano, beneficiario de otra jugada de manual. Favaro sumó variantes ofensivas. Peinado, Varela y Tejera entraron para empujar al rival. No lo habrían conseguido si la suerte de Garisto hubiera sido similar. Pero pasó que dos de sus tres cambios vieron la roja. Darwin Ramírez no jugó ni un minuto antes de irse. Y con La Luz -que inicialmente le dio aire jugando en la espalda de Rodales- ocurrió otro tanto cuando había pasado al lateral izquierdo para reacomodar una defensa atípica.
El grito final de Alfaro se mezcló con la buena nueva del empate de Nacional y Cerro. Liverpool precisa combinar victorias propias con favores ajenos. Y si sus méritos son ante rivales directos, mejor aun: el fin de semana que viene recibe a Danubio.
Martín Rodríguez
Con decisión, Alfaro la pidió y la puso en el punto penal. Con fuerza, tiró para gritar un gol y un triunfo tan agónicos como salvadores de las esperanzas más rebeldes. Liverpool quebró a Central Español de penal y en la hora. Está lejos, pero no se bajó de la pelea por el título.
Terminó la racha palermitana, aunque por un momento los de Garisto parecieron dispuestos a estirarla. A los 31’ sacaron de la teoría una jugada perfecta. Llevaron a la práctica pase profundo, desborde, centro pasado y cabezazo: Silva agarró a contrapié al arquero y festejó el parcial 1 a 0.
Antes y después, fue algo más Liverpool. A paso cansino, el negriazul se mostró superior colectivamente. No todo lo esperable según su potencial y las limitaciones de un rival rengo. Anótese que el trámite evidenció los problemas palermitanos. La ausencia del lateral zurdo Martínez llevó a ese extremo al diestro Maulela. Y expuso sobre el otro a Fernández, que generalmente es zaguero. Central careció de su habitual proyección por derecha y sufrió con los timbrazos de Aranda y Alfaro, cuando buscaron al lateral improvisado.
Liverpool comió de la tranquilidad transmitida por el rápido empate de Pezzolano, beneficiario de otra jugada de manual. Favaro sumó variantes ofensivas. Peinado, Varela y Tejera entraron para empujar al rival. No lo habrían conseguido si la suerte de Garisto hubiera sido similar. Pero pasó que dos de sus tres cambios vieron la roja. Darwin Ramírez no jugó ni un minuto antes de irse. Y con La Luz -que inicialmente le dio aire jugando en la espalda de Rodales- ocurrió otro tanto cuando había pasado al lateral izquierdo para reacomodar una defensa atípica.
El grito final de Alfaro se mezcló con la buena nueva del empate de Nacional y Cerro. Liverpool precisa combinar victorias propias con favores ajenos. Y si sus méritos son ante rivales directos, mejor aun: el fin de semana que viene recibe a Danubio.
Martín Rodríguez
El ave legendaria de Capurro
Fénix se consagró campeón del Apertura de la B
A lo largo de su prolongada historia dentro del fútbol uruguayo Fénix se ha caracterizado por su intermitencia, alternando temporadas en la A con largos y significativos períodos en la B e incluso, en los más de noventa años de vida, períodos en la C.
La actual temporada 2008-2009 está marcando un punto iluminado dentro de esta trayectoria para los capurrenses, que el pasado sábado superaron 3 a 1 al Deportivo Maldonado y se consagraron campeones del Torneo Apertura, primero de los dos que componen el campeonato de la Segunda División Profesional.
Si bien el título no adjudica a los albivioletas uno de los tres ascensos a Primera que están en juego, los pone en una buena ubicación para obtener uno de ellos, asegurándole al menos la posibilidad de jugar una semifinal.
La victoria ante los fernandinos tuvo lugar en la mañana sabatina en el Parque Capurro. Los visitantes se pusieron en ventaja con gol de José Pepe Carini. Los nervios congelaron a los locales, a pesar del intenso sol, pero luego sobrevino la reacción y poco a poco Fénix fue armando su fiesta. Un penal convertido por Fabián Pumar (antes el zaguero había errado otra pena máxima), una buena definición del cordobés Matías Porcari y otra del ex delantero bellavistense Gonzalo Fontana decretaron el resultado final y el título para los dirigidos por Jorge Giordano.
Aunque ya está definido este campeonato, del que todavía queda por disputarse una fecha, la pelea por los ascensos sigue latente debido a que para su decisión es fundamental la tabla anual, lo cual le da un interés particular al torneo. Recordamos que sigue vigente el régimen de play off que se comenzó a utilizar la temporada pasada, por lo que los primeros ocho de la tabla anual (sacando a los que hayan obtenido el primer y segundo ascenso) estarán en pugna por el tercer puesto a la A.
En esa pelea sigue prendido Durazno, a pesar de que el sábado sucumbió como local 2 a 1 ante el Plaza Colonia, también metido en la conversa de los ascensos, que recién se definirá en mayo o junio del año próximo.
Segundo en las posiciones, con igual puntaje que Durazno, se ubica Cerrito, que en la tarde del sábado superó 4 a 3 a La Luz en el Parque Maracaná. El ex jugador de Nacional y Wanderers Maureen Franco marcó tres goles para los auriverdes -el restante lo hizo de penal Juan Carlos Parra-, mientras que Fabrizio Ronchetti en dos ocasiones y Sebastián Grunullú pusieron los goles para los albiverdes de Aires Puros.
Entre los de arriba también está Progreso, que igualó en su cancha 1 a 1 ante el Atenas carolino. El goleador Santiago Bello abrió el marcador para los del este, pero casi enseguida el espigado volante Sergio Silvera puso el gol gaucho y decretó el resultado final en suelo tejano.
En esta etapa volvió a la senda del triunfo Rocha -que anda bastante bajo en la tabla- al superar 2-1 a Huracán Buceo, otro de los rezagados de este Apertura.
También están entre los del fondo de la tabla Rentistas y Boston River, dos equipos que este sábado obtuvieron su tercera victoria consecutiva en el Apertura. Los bichos colorados en su cancha del camino Mendoza superaron 2-1 a Miramar Misiones, que arrancó bien en el certamen pero en las últimas fechas se ha desflecado hasta caer en el séptimo puesto. Boston River, por su parte, superó 2 a 0 a El Tanque en encuentro disputado en el Estadio Della Valle, ubicado en Carrasco Norte. Los dos goles del equipo verdirrojo los anotó Boris Silva Acuña, volante ofensivo formado en la cantera aurinegra.
Resultados (13ª fecha)
Fénix 3-1 Deportivo Maldonado
Cerrito 4-3 La Luz
Durazno 1-2 Plaza Colonia
Progreso 1-1 Atenas (San Carlos)
El Tanque 0-2 Boston River
Rocha 2-1 Huracán Buceo
Rentistas 2-1 Miramar Misiones
Torneo Apertura
Fénix 31, Durazno 24, Cerrito 24, Sud América 22, Progreso 20, Deportivo Maldonado 19, Miramar Misiones 18, Plaza Colonia 18, Atenas 17, La Luz 16, Rentistas 14, Rocha 13, Boston River 13, Huracán Buceo 10, El Tanque 9.
Próxima fecha (14ª)
Fénix-Plaza Colonia
Cerrito-Sud América
Atenas (San Carlos)-Boston River
Durazno-Deportivo Maldonado
Miramar Misiones-La Luz
Huracán Buceo-Rentistas
Rocha-El Tanque
Fecha libre: Progreso.
A lo largo de su prolongada historia dentro del fútbol uruguayo Fénix se ha caracterizado por su intermitencia, alternando temporadas en la A con largos y significativos períodos en la B e incluso, en los más de noventa años de vida, períodos en la C.
La actual temporada 2008-2009 está marcando un punto iluminado dentro de esta trayectoria para los capurrenses, que el pasado sábado superaron 3 a 1 al Deportivo Maldonado y se consagraron campeones del Torneo Apertura, primero de los dos que componen el campeonato de la Segunda División Profesional.
Si bien el título no adjudica a los albivioletas uno de los tres ascensos a Primera que están en juego, los pone en una buena ubicación para obtener uno de ellos, asegurándole al menos la posibilidad de jugar una semifinal.
La victoria ante los fernandinos tuvo lugar en la mañana sabatina en el Parque Capurro. Los visitantes se pusieron en ventaja con gol de José Pepe Carini. Los nervios congelaron a los locales, a pesar del intenso sol, pero luego sobrevino la reacción y poco a poco Fénix fue armando su fiesta. Un penal convertido por Fabián Pumar (antes el zaguero había errado otra pena máxima), una buena definición del cordobés Matías Porcari y otra del ex delantero bellavistense Gonzalo Fontana decretaron el resultado final y el título para los dirigidos por Jorge Giordano.
Aunque ya está definido este campeonato, del que todavía queda por disputarse una fecha, la pelea por los ascensos sigue latente debido a que para su decisión es fundamental la tabla anual, lo cual le da un interés particular al torneo. Recordamos que sigue vigente el régimen de play off que se comenzó a utilizar la temporada pasada, por lo que los primeros ocho de la tabla anual (sacando a los que hayan obtenido el primer y segundo ascenso) estarán en pugna por el tercer puesto a la A.
En esa pelea sigue prendido Durazno, a pesar de que el sábado sucumbió como local 2 a 1 ante el Plaza Colonia, también metido en la conversa de los ascensos, que recién se definirá en mayo o junio del año próximo.
Segundo en las posiciones, con igual puntaje que Durazno, se ubica Cerrito, que en la tarde del sábado superó 4 a 3 a La Luz en el Parque Maracaná. El ex jugador de Nacional y Wanderers Maureen Franco marcó tres goles para los auriverdes -el restante lo hizo de penal Juan Carlos Parra-, mientras que Fabrizio Ronchetti en dos ocasiones y Sebastián Grunullú pusieron los goles para los albiverdes de Aires Puros.
Entre los de arriba también está Progreso, que igualó en su cancha 1 a 1 ante el Atenas carolino. El goleador Santiago Bello abrió el marcador para los del este, pero casi enseguida el espigado volante Sergio Silvera puso el gol gaucho y decretó el resultado final en suelo tejano.
En esta etapa volvió a la senda del triunfo Rocha -que anda bastante bajo en la tabla- al superar 2-1 a Huracán Buceo, otro de los rezagados de este Apertura.
También están entre los del fondo de la tabla Rentistas y Boston River, dos equipos que este sábado obtuvieron su tercera victoria consecutiva en el Apertura. Los bichos colorados en su cancha del camino Mendoza superaron 2-1 a Miramar Misiones, que arrancó bien en el certamen pero en las últimas fechas se ha desflecado hasta caer en el séptimo puesto. Boston River, por su parte, superó 2 a 0 a El Tanque en encuentro disputado en el Estadio Della Valle, ubicado en Carrasco Norte. Los dos goles del equipo verdirrojo los anotó Boris Silva Acuña, volante ofensivo formado en la cantera aurinegra.
Resultados (13ª fecha)
Fénix 3-1 Deportivo Maldonado
Cerrito 4-3 La Luz
Durazno 1-2 Plaza Colonia
Progreso 1-1 Atenas (San Carlos)
El Tanque 0-2 Boston River
Rocha 2-1 Huracán Buceo
Rentistas 2-1 Miramar Misiones
Torneo Apertura
Fénix 31, Durazno 24, Cerrito 24, Sud América 22, Progreso 20, Deportivo Maldonado 19, Miramar Misiones 18, Plaza Colonia 18, Atenas 17, La Luz 16, Rentistas 14, Rocha 13, Boston River 13, Huracán Buceo 10, El Tanque 9.
Próxima fecha (14ª)
Fénix-Plaza Colonia
Cerrito-Sud América
Atenas (San Carlos)-Boston River
Durazno-Deportivo Maldonado
Miramar Misiones-La Luz
Huracán Buceo-Rentistas
Rocha-El Tanque
Fecha libre: Progreso.
Imparables
Entre viernes y sábado se jugó la tercera fecha del Apertura. Lo más importante pasó por las victorias de los equipos que están más arriba en la tabla y que están afirmándose en los play off, más allá de que falta mucho. En la doble jornada en el Palacio Peñarol, Olimpia derrotó a Tabaré 65 a 49. Fue muy pobre el juego del indio, que sintió la ausencia de Clarence Matthews, que significa la falta de 20 puntos en el ataque de los grises y que por la ausencia de un jugador en el equipo se acorte la rotación que puede hacer Federico Camiña. Esta circunstancia fue aprovechada por Olimpia, que hizo pesar el juego de sus extranjeros debajo del tablero.
A segunda hora Biguá obtuvo su duodécimo triunfo al hilo sobre Paysandú, equipo al que venció 82 a 73. El equipo sanducero se fue al descanso largo nueve puntos arriba, pero con un parcial de 32 a 16 el pato lo dio vuelta y se terminó llevando la victoria. Leandro García Morales fue el goleador con 21 tantos.
El sábado Defensor Sporting aplastó a Trouville 106 a 57, en lo que fue la mayor diferencia a favor de un equipo en esta Liga Uruguaya. Entre los estadounidenses Chris Jackson y Brian Woodward convirtieron 54 puntos.
En la cancha de Malvín el playero derrotó a Bohemios 77 a 75. El goleador del conjunto azul fue Fernando Martínez con 19 puntos, seguido por Emilio Taboada con 16. El máximo anotador de los albimarrones fue el yanqui Albert Burditt con 19 unidades.
Por último, en la cancha de Cordón, ante una gran cantidad de público y con mucho calor, Atenas venció a Hebraica 99 a 94. Los dirigidos por Víctor Hugo Berardi llegaron a ganar por 18 puntos en el tercer cuarto en base a un buen juego de varios de sus jugadores, destacándose el Panchi Barrera con sus asistencias al estilo NBA. Con algunos triples cerca del final, los macabeos lograron ponerse a tres puntos cuando faltaban unos segundos para terminar y teniendo la pelota en su poder, pero Adrián Bertolini perdió el balón y se cerró el encuentro.
A segunda hora Biguá obtuvo su duodécimo triunfo al hilo sobre Paysandú, equipo al que venció 82 a 73. El equipo sanducero se fue al descanso largo nueve puntos arriba, pero con un parcial de 32 a 16 el pato lo dio vuelta y se terminó llevando la victoria. Leandro García Morales fue el goleador con 21 tantos.
El sábado Defensor Sporting aplastó a Trouville 106 a 57, en lo que fue la mayor diferencia a favor de un equipo en esta Liga Uruguaya. Entre los estadounidenses Chris Jackson y Brian Woodward convirtieron 54 puntos.
En la cancha de Malvín el playero derrotó a Bohemios 77 a 75. El goleador del conjunto azul fue Fernando Martínez con 19 puntos, seguido por Emilio Taboada con 16. El máximo anotador de los albimarrones fue el yanqui Albert Burditt con 19 unidades.
Por último, en la cancha de Cordón, ante una gran cantidad de público y con mucho calor, Atenas venció a Hebraica 99 a 94. Los dirigidos por Víctor Hugo Berardi llegaron a ganar por 18 puntos en el tercer cuarto en base a un buen juego de varios de sus jugadores, destacándose el Panchi Barrera con sus asistencias al estilo NBA. Con algunos triples cerca del final, los macabeos lograron ponerse a tres puntos cuando faltaban unos segundos para terminar y teniendo la pelota en su poder, pero Adrián Bertolini perdió el balón y se cerró el encuentro.
jueves, 4 de diciembre de 2008
Cuando calienta el sol
Mañana ya se inicia la tercera fecha del Apertura con una extraña doble etapa en el Palacio Peñarol. A primera hora, cuando todavía ningún comercio bajó la cortina y los que curten playa ni han empezado el mate, a las siete de la tarde, jugarán Tabaré y Olimpia. Para los grises del Parque Batlle será su segunda experiencia a la hora de los bizcochos pero también su último juego sin Clarence Matthews, que cumplirá su exagerada sanción de cuatro partidos de suspensión por zancadilla con paso de jirafa. Los olimpistas, que vienen de ganar como visitantes en Paysandú, ya no contarán con Greg Dilligard, que después de que el club amenazó con rescindirle el contrato decidió irse y posiblemente sea sustituido por el dominicano Manuel Guzmán, un pivot de 26 años y 2,03 metros que estaba actuando en el básquetbol mexicano, en Algodoneros de Torreón. Al parecer, la posibilidad de que Nathan Mielke, que ya reforzó a Olimpia en la Liga Sudamericana, fuera a Colón se cayó definitivamente ayer, cuando arregló un nuevo contrato por cinco partidos con Independiente de Neuquén. No me pregunten qué día y en qué horario televisan este partido, porque el de Malvín-Tabaré del otro día, por más zapping que haga, aún no lo he podido ver.
A segunda hora en el Palacio, con su piso duro y sin novedades, Biguá recibirá a Paysandú. La explicación para que este partido caliente la pantalla de VTV es que después de 26 fechas y casi cuatro meses de competición nunca han televisado al quinteto sanducero, por lo que Azucarlito, Macri, Pili y vaya a saber cuántas marcas más estarán exigiendo engalanar la televisión de Tenfield.
El sábado habrá tres encuentros en Bohemios. El líder, Defensor Sporting, después de su gran victoria ante Atenas recibirá a Trouville; Malvín, que volvió al triunfo y está bien arriba en su casa, recibirá a Bohemios, que perdió los dos del Apertura pero da batalla y parece haber ganado con la incorporación de Curtis Marshall. El último sabatino será en Cordón, donde Hebraica y Macabi, que utiliza esa cancha como local y que el otro día tuviera problemas en el partido suspendido ante Trouville, enfrentará a Atenas, revolucionado con la llegada de Terquin Torpedo Mott, que con su corte de pelo a lo Mario Barakus, sus encestes y sus fuertes infracciones causó una movida interesante por Palermo.
A segunda hora en el Palacio, con su piso duro y sin novedades, Biguá recibirá a Paysandú. La explicación para que este partido caliente la pantalla de VTV es que después de 26 fechas y casi cuatro meses de competición nunca han televisado al quinteto sanducero, por lo que Azucarlito, Macri, Pili y vaya a saber cuántas marcas más estarán exigiendo engalanar la televisión de Tenfield.
El sábado habrá tres encuentros en Bohemios. El líder, Defensor Sporting, después de su gran victoria ante Atenas recibirá a Trouville; Malvín, que volvió al triunfo y está bien arriba en su casa, recibirá a Bohemios, que perdió los dos del Apertura pero da batalla y parece haber ganado con la incorporación de Curtis Marshall. El último sabatino será en Cordón, donde Hebraica y Macabi, que utiliza esa cancha como local y que el otro día tuviera problemas en el partido suspendido ante Trouville, enfrentará a Atenas, revolucionado con la llegada de Terquin Torpedo Mott, que con su corte de pelo a lo Mario Barakus, sus encestes y sus fuertes infracciones causó una movida interesante por Palermo.
Por uno igual vale
Biguá sufrió al adelantar su partido ante Trouville pero ganó y está en lo más alto
Sufriendo mucho más de lo esperado, Biguá estrenó con victoria el nuevo piso flotante del Centro Deportivo Municipal Carolino y estiró su récord a once victorias consecutivas en la Liga Uruguaya, un número nunca alcanzado en la corta historia de la LUB. Según cuenta la página digital Basquetcaliente.com, el elenco del pato las pasó feas ya que recién "con cinco triples en los 4’ finales, tres de García Morales y uno de Wolkowisky y Osimani, Biguá lo dio vuelta y venció a Trouville 92-91.
En el bonito complejo polideportivo de la ciudad de San Carlos que fue construido en dictadura y enriquecido en democracia, que funciona bajo la égida del ex futbolista de Central Español profesor Fabián Tejera, se estrenaba piso, tableros y también récord de los del Che García, pero Trouville estuvo por quedarse con la fiesta. La última posesión completa fue de los rojos, pero el tiro del estadounidense Levi Stukes no encontró el aro. Biguá ganó con luz el primer cuarto 30-16 y el primer tiempo 52-41. En el tercer cuarto Trouville pasó 70-68 y el triunfo final correspondió al pato 92 a 91.
Sufriendo mucho más de lo esperado, Biguá estrenó con victoria el nuevo piso flotante del Centro Deportivo Municipal Carolino y estiró su récord a once victorias consecutivas en la Liga Uruguaya, un número nunca alcanzado en la corta historia de la LUB. Según cuenta la página digital Basquetcaliente.com, el elenco del pato las pasó feas ya que recién "con cinco triples en los 4’ finales, tres de García Morales y uno de Wolkowisky y Osimani, Biguá lo dio vuelta y venció a Trouville 92-91.
En el bonito complejo polideportivo de la ciudad de San Carlos que fue construido en dictadura y enriquecido en democracia, que funciona bajo la égida del ex futbolista de Central Español profesor Fabián Tejera, se estrenaba piso, tableros y también récord de los del Che García, pero Trouville estuvo por quedarse con la fiesta. La última posesión completa fue de los rojos, pero el tiro del estadounidense Levi Stukes no encontró el aro. Biguá ganó con luz el primer cuarto 30-16 y el primer tiempo 52-41. En el tercer cuarto Trouville pasó 70-68 y el triunfo final correspondió al pato 92 a 91.
Lo que viene
Como para seguir con el tartamudeo administrativo -¿o es hipo?- que viene sacudiendo a la AUF desde hace tiempo -que se juega, que no se juega, que te suspendo, que no te suspendo, que Prudente, que ¡qué imprudente!-, ayer hubo nuevas idas y vueltas en cuanto a la fijación de la próxima fecha. Nacional-Cerro se iba a jugar el domingo, pero por esto o por otro, o por aquello, que pueden ser los equipos participantes, los integrantes del Ejecutivo, la Mesa, el Ministerio o la jefatura, ahora van a jugar el sábado, por lo que el otro partido del Centenario el de Peñarol-River Plate será el domingo.
Próxima fecha (12ª)
Sábado
17.00 Nacional-Cerro (Estadio Centenario)
17.00 Liverpool-Central Español (Estadio Belvedere)
17.00 Juventud-Cerro Largo (Estadio Martínez Monegal)
Domingo
10.15 Bella Vista-Danubio (Estadio Nasazzi)
17.00 River Plate-Peñarol (Estadio Centenario)
17.00 Defensor Sp.-Wanderers (Estadio Franzini)
17.00 Villa Española-Rampla Jrs. (Estadio Obdulio Varela)
17.00 Tacuarembó-Racing (Estadio Goyenola)
Próxima fecha (12ª)
Sábado
17.00 Nacional-Cerro (Estadio Centenario)
17.00 Liverpool-Central Español (Estadio Belvedere)
17.00 Juventud-Cerro Largo (Estadio Martínez Monegal)
Domingo
10.15 Bella Vista-Danubio (Estadio Nasazzi)
17.00 River Plate-Peñarol (Estadio Centenario)
17.00 Defensor Sp.-Wanderers (Estadio Franzini)
17.00 Villa Española-Rampla Jrs. (Estadio Obdulio Varela)
17.00 Tacuarembó-Racing (Estadio Goyenola)
Prudencia
Nacional le ganó 2-0 a Villa Española y lidera el Apertura
El fútbol de Primera volvió. Con la escenografía de tribunas poco pobladas y de una cancha en malas condiciones a pesar del tiempo en el que estuvo sin recibir fútbol, y con el destaque de un fuerte operativo policial, la bola volvió a rodar. Un acuerdo al que llegaron las autoridades de la AUF y los ministerios de Turismo y Deporte y del Interior se convirtió en un respirador artificial para el Torneo Apertura, uno de los campeonatos más controvertidos de los últimos tiempos.
En el enrarecimiento del certamen tuvo vital gravitación la suspensión del partido que finalmente ayer se disputó, en el que Nacional alcanzó la punta del Apertura al vencer a Villa Española. Cuando se debió jugar originalmente este juego -el 31 de agosto- Líber Prudente cumplió con ceguera burocrática una disposición del Colegio de Árbitros hoy afortunadamente perimida, y así empezaron los problemas. Tampoco nadie le dijo nada para que reformulara su decisión y el partido se jugara aquella tarde de sol a las 15 y 31, y 33 o y 45.
Entre los legajos, los tribunales, las dudas y las filtraciones se coló una buena dosis de violencia, compañera de ruta del fútbol nuestro desde hace tiempo, y muchas voces se alzaron para exclamar que algo había que hacer. Dentro de un tiempo estaremos en condiciones de evaluar si lo que comenzó ayer es para mejor, para peor o, en definitiva, para seguir igual.
S>Hubo un partido
P>Esperar 94 días para ver lo que se vio ayer definitivamente no valió la pena. No es que tampoco se previera que iba a ser el partido del siglo ni mucho menos, pero la pobreza del espectáculo fue grande. Ni siquiera arbitró Prudente, lo que le hubiera puesto un toque picante al partido y seguramente hubiera provocado que hasta el Centenario se acercaran algunos puteadores profesionales para ejercer su tarea durante un rato. El inocuo Martín Vázquez fue designado para dirigir el partido que amenazó con ser bomba y terminó en pedito de vieja.
A pesar de lo dispar de las fuerzas que ayer se cotejaron, el encuentro fue bastante parejo. Los meritorios jugadores de Villa Española dan la cara dignamente defendiendo a una institución que en estos momentos parece no estar en condiciones de ser profesional. Los esfuerzos de los deportistas aurirrojos son destacables, más aun sabiendo las limitaciones con las que se preparan, pero obviamente a la larga terminan sucumbiendo en un ámbito medianamente competitivo. Por algo, si bien meten como caballos, van penúltimos en el Apertura y últimos en la tabla del descenso.
Ante ese rival Nacional tuvo que jugar ayer y lo superó, pero sin dejar un imagen sólida o que al menos refleje el primer puesto que ocupa actualmente en las posiciones. Salvo los dos golazos que le dieron los tres puntos -en definitiva, el objetivo por el que se juega-, el equipo del floridense Gerardo Pelusso no tuvo fluidez en el juego, lo que no despeja dudas con respecto al futuro tricolor en la recta final del Apertura.
Las obras de Chapita Blanco y Morro García fueron lo mejor de la tarde-noche (si pueden, vean los goles en esos flashes de 14 segundos del informativo) y le dieron al menos un colorcito al espectáculo.
Como justificación se puede decir que a Nacional ayer le faltaron varios jugadores que hoy por hoy son titulares (Adrián Romero, Mauricio Victorino, Matute Morales, Alexander Medina), y capaz que por ahí alguno se pueda quedar tranquilo, observando la mitad llena del vaso.
Gonzalo Guiria
El fútbol de Primera volvió. Con la escenografía de tribunas poco pobladas y de una cancha en malas condiciones a pesar del tiempo en el que estuvo sin recibir fútbol, y con el destaque de un fuerte operativo policial, la bola volvió a rodar. Un acuerdo al que llegaron las autoridades de la AUF y los ministerios de Turismo y Deporte y del Interior se convirtió en un respirador artificial para el Torneo Apertura, uno de los campeonatos más controvertidos de los últimos tiempos.
En el enrarecimiento del certamen tuvo vital gravitación la suspensión del partido que finalmente ayer se disputó, en el que Nacional alcanzó la punta del Apertura al vencer a Villa Española. Cuando se debió jugar originalmente este juego -el 31 de agosto- Líber Prudente cumplió con ceguera burocrática una disposición del Colegio de Árbitros hoy afortunadamente perimida, y así empezaron los problemas. Tampoco nadie le dijo nada para que reformulara su decisión y el partido se jugara aquella tarde de sol a las 15 y 31, y 33 o y 45.
Entre los legajos, los tribunales, las dudas y las filtraciones se coló una buena dosis de violencia, compañera de ruta del fútbol nuestro desde hace tiempo, y muchas voces se alzaron para exclamar que algo había que hacer. Dentro de un tiempo estaremos en condiciones de evaluar si lo que comenzó ayer es para mejor, para peor o, en definitiva, para seguir igual.
S>Hubo un partido
P>Esperar 94 días para ver lo que se vio ayer definitivamente no valió la pena. No es que tampoco se previera que iba a ser el partido del siglo ni mucho menos, pero la pobreza del espectáculo fue grande. Ni siquiera arbitró Prudente, lo que le hubiera puesto un toque picante al partido y seguramente hubiera provocado que hasta el Centenario se acercaran algunos puteadores profesionales para ejercer su tarea durante un rato. El inocuo Martín Vázquez fue designado para dirigir el partido que amenazó con ser bomba y terminó en pedito de vieja.
A pesar de lo dispar de las fuerzas que ayer se cotejaron, el encuentro fue bastante parejo. Los meritorios jugadores de Villa Española dan la cara dignamente defendiendo a una institución que en estos momentos parece no estar en condiciones de ser profesional. Los esfuerzos de los deportistas aurirrojos son destacables, más aun sabiendo las limitaciones con las que se preparan, pero obviamente a la larga terminan sucumbiendo en un ámbito medianamente competitivo. Por algo, si bien meten como caballos, van penúltimos en el Apertura y últimos en la tabla del descenso.
Ante ese rival Nacional tuvo que jugar ayer y lo superó, pero sin dejar un imagen sólida o que al menos refleje el primer puesto que ocupa actualmente en las posiciones. Salvo los dos golazos que le dieron los tres puntos -en definitiva, el objetivo por el que se juega-, el equipo del floridense Gerardo Pelusso no tuvo fluidez en el juego, lo que no despeja dudas con respecto al futuro tricolor en la recta final del Apertura.
Las obras de Chapita Blanco y Morro García fueron lo mejor de la tarde-noche (si pueden, vean los goles en esos flashes de 14 segundos del informativo) y le dieron al menos un colorcito al espectáculo.
Como justificación se puede decir que a Nacional ayer le faltaron varios jugadores que hoy por hoy son titulares (Adrián Romero, Mauricio Victorino, Matute Morales, Alexander Medina), y capaz que por ahí alguno se pueda quedar tranquilo, observando la mitad llena del vaso.
Gonzalo Guiria
Prudencia
Nacional le ganó 2-0 a Villa Española y lidera el Apertura
El fútbol de Primera volvió. Con la escenografía de tribunas poco pobladas y de una cancha en malas condiciones a pesar del tiempo en el que estuvo sin recibir fútbol, y con el destaque de un fuerte operativo policial, la bola volvió a rodar. Un acuerdo al que llegaron las autoridades de la AUF y los ministerios de Turismo y Deporte y del Interior se convirtió en un respirador artificial para el Torneo Apertura, uno de los campeonatos más controvertidos de los últimos tiempos.
En el enrarecimiento del certamen tuvo vital gravitación la suspensión del partido que finalmente ayer se disputó, en el que Nacional alcanzó la punta del Apertura al vencer a Villa Española. Cuando se debió jugar originalmente este juego -el 31 de agosto- Líber Prudente cumplió con ceguera burocrática una disposición del Colegio de Árbitros hoy afortunadamente perimida, y así empezaron los problemas. Tampoco nadie le dijo nada para que reformulara su decisión y el partido se jugara aquella tarde de sol a las 15 y 31, y 33 o y 45.
Entre los legajos, los tribunales, las dudas y las filtraciones se coló una buena dosis de violencia, compañera de ruta del fútbol nuestro desde hace tiempo, y muchas voces se alzaron para exclamar que algo había que hacer. Dentro de un tiempo estaremos en condiciones de evaluar si lo que comenzó ayer es para mejor, para peor o, en definitiva, para seguir igual.
S>Hubo un partido
P>Esperar 94 días para ver lo que se vio ayer definitivamente no valió la pena. No es que tampoco se previera que iba a ser el partido del siglo ni mucho menos, pero la pobreza del espectáculo fue grande. Ni siquiera arbitró Prudente, lo que le hubiera puesto un toque picante al partido y seguramente hubiera provocado que hasta el Centenario se acercaran algunos puteadores profesionales para ejercer su tarea durante un rato. El inocuo Martín Vázquez fue designado para dirigir el partido que amenazó con ser bomba y terminó en pedito de vieja.
A pesar de lo dispar de las fuerzas que ayer se cotejaron, el encuentro fue bastante parejo. Los meritorios jugadores de Villa Española dan la cara dignamente defendiendo a una institución que en estos momentos parece no estar en condiciones de ser profesional. Los esfuerzos de los deportistas aurirrojos son destacables, más aun sabiendo las limitaciones con las que se preparan, pero obviamente a la larga terminan sucumbiendo en un ámbito medianamente competitivo. Por algo, si bien meten como caballos, van penúltimos en el Apertura y últimos en la tabla del descenso.
Ante ese rival Nacional tuvo que jugar ayer y lo superó, pero sin dejar un imagen sólida o que al menos refleje el primer puesto que ocupa actualmente en las posiciones. Salvo los dos golazos que le dieron los tres puntos -en definitiva, el objetivo por el que se juega-, el equipo del floridense Gerardo Pelusso no tuvo fluidez en el juego, lo que no despeja dudas con respecto al futuro tricolor en la recta final del Apertura.
Las obras de Chapita Blanco y Morro García fueron lo mejor de la tarde-noche (si pueden, vean los goles en esos flashes de 14 segundos del informativo) y le dieron al menos un colorcito al espectáculo.
Como justificación se puede decir que a Nacional ayer le faltaron varios jugadores que hoy por hoy son titulares (Adrián Romero, Mauricio Victorino, Matute Morales, Alexander Medina), y capaz que por ahí alguno se pueda quedar tranquilo, observando la mitad llena del vaso.
Gonzalo Guiria
El fútbol de Primera volvió. Con la escenografía de tribunas poco pobladas y de una cancha en malas condiciones a pesar del tiempo en el que estuvo sin recibir fútbol, y con el destaque de un fuerte operativo policial, la bola volvió a rodar. Un acuerdo al que llegaron las autoridades de la AUF y los ministerios de Turismo y Deporte y del Interior se convirtió en un respirador artificial para el Torneo Apertura, uno de los campeonatos más controvertidos de los últimos tiempos.
En el enrarecimiento del certamen tuvo vital gravitación la suspensión del partido que finalmente ayer se disputó, en el que Nacional alcanzó la punta del Apertura al vencer a Villa Española. Cuando se debió jugar originalmente este juego -el 31 de agosto- Líber Prudente cumplió con ceguera burocrática una disposición del Colegio de Árbitros hoy afortunadamente perimida, y así empezaron los problemas. Tampoco nadie le dijo nada para que reformulara su decisión y el partido se jugara aquella tarde de sol a las 15 y 31, y 33 o y 45.
Entre los legajos, los tribunales, las dudas y las filtraciones se coló una buena dosis de violencia, compañera de ruta del fútbol nuestro desde hace tiempo, y muchas voces se alzaron para exclamar que algo había que hacer. Dentro de un tiempo estaremos en condiciones de evaluar si lo que comenzó ayer es para mejor, para peor o, en definitiva, para seguir igual.
S>Hubo un partido
P>Esperar 94 días para ver lo que se vio ayer definitivamente no valió la pena. No es que tampoco se previera que iba a ser el partido del siglo ni mucho menos, pero la pobreza del espectáculo fue grande. Ni siquiera arbitró Prudente, lo que le hubiera puesto un toque picante al partido y seguramente hubiera provocado que hasta el Centenario se acercaran algunos puteadores profesionales para ejercer su tarea durante un rato. El inocuo Martín Vázquez fue designado para dirigir el partido que amenazó con ser bomba y terminó en pedito de vieja.
A pesar de lo dispar de las fuerzas que ayer se cotejaron, el encuentro fue bastante parejo. Los meritorios jugadores de Villa Española dan la cara dignamente defendiendo a una institución que en estos momentos parece no estar en condiciones de ser profesional. Los esfuerzos de los deportistas aurirrojos son destacables, más aun sabiendo las limitaciones con las que se preparan, pero obviamente a la larga terminan sucumbiendo en un ámbito medianamente competitivo. Por algo, si bien meten como caballos, van penúltimos en el Apertura y últimos en la tabla del descenso.
Ante ese rival Nacional tuvo que jugar ayer y lo superó, pero sin dejar un imagen sólida o que al menos refleje el primer puesto que ocupa actualmente en las posiciones. Salvo los dos golazos que le dieron los tres puntos -en definitiva, el objetivo por el que se juega-, el equipo del floridense Gerardo Pelusso no tuvo fluidez en el juego, lo que no despeja dudas con respecto al futuro tricolor en la recta final del Apertura.
Las obras de Chapita Blanco y Morro García fueron lo mejor de la tarde-noche (si pueden, vean los goles en esos flashes de 14 segundos del informativo) y le dieron al menos un colorcito al espectáculo.
Como justificación se puede decir que a Nacional ayer le faltaron varios jugadores que hoy por hoy son titulares (Adrián Romero, Mauricio Victorino, Matute Morales, Alexander Medina), y capaz que por ahí alguno se pueda quedar tranquilo, observando la mitad llena del vaso.
Gonzalo Guiria
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