Central Español dejó a Cerro casi fuera de la lucha por el título.
Así estaba Luis Garisto en la mañana dominguera. Sus jugadores entendieron a la perfección su mensaje, esperar tranquilos sin apuro y contragolpear.
El partido que quedó entre la noche de las luces y el clásico tenía mucho público local, a pesar de que la imagen televisiva mostraba la única tribuna vacía.
En todo momento el que tomó la iniciativa fue Cerro, jugando por bajo intentando pases en profundidad sin éxito.
La visita, con la batuta de Fabián Coelho también quiso jugar de la misma manera, con idéntico resultado. Hasta ese instante los arqueros eran espectadores de lujo. El artiguense cuando se tiró por derecha tuvo apariciones interesantes.
El albiceleste generó dos chances claras en la primera mitad, un remate de Molina de zurda que dio en el palo y un cabezazo de Dadomo en el área chica que sacó el arquero Sosa.
El complemento no dio respiros. En un pelotazo que dejó mal parada a la defensa cerrense, el goleador Crossa se la bajó de cabeza a Coelho que tenía el arco de frente para pegarle y fue derribado. Fedorczuk cobró penal, dudoso por el lugar donde fue la infracción. El 10 palermitano, de gran campeonato, la mandó a guardar y de ahí en más los de Garisto jugaron con la desesperación de los de Repetto.
El local cambió su figura táctica, pasando Cabrera a jugar de enganche, bien cerca de los delanteros y ahí fue mucho más influyente para el equipo.
Con Cerro buscando por todas las vías el empate y tras un contragolpe, Coelho dejó sólo al ariete Crossa -en posición dudosa- que definió notable.
Garisto inteligentemente mandó un cambio para aguantar y Repetto agotó las variantes en ofensiva. Cerro se topó con una defensa muy firme y una mitad del campo muy poblada, donde se sumó el gran trabajo del golero que está a préstamo de Peñarol, Sebastián Sosa, que salvó unas cuantas y le brindó tranquilidad a todo el equipo. El partido terminó muy caldeado con el sol de frente y la hinchada local recriminándole al árbitro el cobro del penal polémico y un gol de Molina a favor bien anulado por offside.
Es para destacar el levante que tuvo Central Español, que cuando parecía que Garisto no seguía, le empató a Peñarol y desde ese entonces el elenco tomó confianza y ayer le arruinó el día a Cerro.
Leo Bernini
domingo, 14 de diciembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario