Ganó Nacional y obligó a Liverpool a definir con Defensor
Finalmente triunfó Nacional. Primero atajando un penal, luego ligando bastante y después haciendo tres goles de un tirón. Liverpool, sin un juego pulido fue superior a su rival pero pecó de errar tanto. Sobre el final estuvo cerca de conseguir un impensable empate, pero el destino quiso que se las tenga que ver violeta para llegar a la copa Sudamericana.
El impresentable campo del Nasazzi anticipó que de haber fútbol, sería una mera casualidad. A eso habría que sumarle la urgencia y nerviosismo con que salió Liverpool a jugar y los resultados a la vista. Fricción, lucha y tantos otros “atributos” que engalanan generalmente nuestras canchas. Por ahí, a los 13’, Blanco se fue de libreto cuando puso con gran asistencia al juvenil Machado en carrera de gol, pero achicó muy bien Castro y obligó a una definición defectuosa. Ése fue el único ataque profundo de Nacional en todo el período. Liverpool levantó un poco la mira gracias a que Tejera se involucró mejor. Curiosamente, su primer pase peligroso fue al pifiar buscando a Alfaro, pero habilitando magistralmente a Figueroa, que disparó a las manos de Burián. Michel Acosta aportó subida por derecha y por ahí el negriazul encontró un canal de conexión con el área tricolor. Pero sin ideas claras o juego premeditado, sino intentonas individuales, evidenciando en varios tiros desde lejos el método rápido y sencillo de encontrar el gol.
Complicando todo
Mientras la camilla Oca versión ’87 retiraba al golero Castro, lesionado, en el área de enfrente Alfaro cayó por falta de Caballero. El mismo Emiliano se hizo cargo del penal y Burián atajó con gran respuesta. Momento bisagra, porque además fue la última jugada del primer tiempo.
Al iniciar el complemento, el mediocampo de Nacional se puso un poquito en campaña y con Cazulo como tropero sacudió a De Agustini con un zapatazo fuerte en la primera jugada. Pero fue Liverpool quien nuevamente llamó a las puertas del gol, no una, sino dos veces en una misma jugada, cuando a los 54’ inexplicablemente Figueroa y Alfaro no pudieron embocar el arco. Sólo tres minutos después, Sánchez dejó sólo a Figueroa, que tiró un sombrero a Burián y cuando la pelota se metía apareció Coates para cabecear afuera.
Pasó tu cuarto de hora
Y arrancó el de Nacional, que en quince minutos se puso 3-0 y sentenció el partido. A los 61’ Cazulo empujó un buscapié; a los 74’ García con gran definición (y mejor pase de Blanco) en un mano a mano; y a los 76’, de nuevo el Morro, que cabeceó tras centro de Cazulo. Incluso pudo empatar Lalinde a los 69’, cuando tomó un rebote solo frente al arco, pero la mandó a las nubes.
Pareció tardío el descuento del propio Lalinde a los 81’, porque ya Liverpool era un desconcierto y estaba para seguir tomando goles. Pero el 3-2 de Alfaro a falta de dos minutos revivió algo la esperanza de poder entrar directo a la Sudamericana. Sólo hubo tiempo para un tiro apenas ancho de Patritti y para juntar todas las ganas de cara a la finalísima con Defensor.
Rodrigo Ubilla
lunes, 3 de agosto de 2009
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