La Paz esté con nosotros

Oriental fue el campeón de la C y vuelve a la B
Un equipo que nació en 1924 y que, aunque se pudo llamar Libertador o Colombes, terminó siendo el Oriental siempre merece un crédito de simpatía. Un club que se fundó con el ánimo de representar al pueblo más fronterizo con Montevideo tiene algo más que historia. Y si es por historia, el primer equipo no montevideano en inscribirse en torneos de la AUF tiene alguna cosita para contar.

Tener camisa celeste en honor a los jóvenes héroes olímpicos de 1924 transmite algunas trazas del genoma uruguayo, pero ser el equipo del pueblo-ciudad-dormitorio, llamarse Oriental y tener camiseta celeste no alcanza para que se decodifique claramente lo que significa ese colectivo de vecinos que se cruzan de noche cuando el 130 o el 468 los devuelven de sus laburos en Montevideo, cuando el Solfy los trae de Las Piedras o cuando en la chiva o en la Hondita se saludan a los gritos en las pocas esquinas de La Paz.

La clave que te permite definitivamente explicarte ese aroma a malvón y luna en cada tranque, en cada pared, en ese festejo artesanal y con sabor al pago está dada por la voluptuosa propaganda que resalta sobre la pura celeste: Carnicería La Reina.

En el pueblo que recién tomó condición de ciudad a fines de 1957, que tuvo su auge a principios del siglo XX por sus canteras de granito y por los frigoríficos y carnicerías para el abasto de Montevideo después, ya nada de eso funciona, si hasta la ruta ha quedado aislada y en la ex ciudad de los picapedreros y las carnicerías, una suerte de Radiador Springs, el pueblo casi fantasma de la película Cars, el Oriental calentó pantalla de la Ed Wood de las televisoras uruguayas, protagonizando una épica final de los suburbios del fútbol.

Con Carnicería La Reina en vez de Santander, Fly Emirates o Petrobras, metavendiendo chuletas ganadoras y picada especial sin grasa, y chorizos de rueda por sobre las sugerencias de la cartelería Tenfield, Oriental dio vuelta un partido emocionantísimo ante el novel Torque, le ganó 4 a 2 y se quedó con el título de campeón de la segunda división amateur, aunque esta vez, a diferencia de la temporada 2007-2008, cuando ganó la Liga Metropolitana Amateur, con derecho a ascenso a la B.

El Torque, club creado artificialmente para establecer proyectos de desarrollo futbolístico desde abajo sin tener que establecer gerenciamientos, arrancó ganando 1 a 0 con gol del rasta Germán Suárez sobre la media hora del primer tiempo. Al comienzo del segundo, Daniel Antelo empató para los paceños pero Suárez volvió a sacudir sus rastas a los 55’. Mauricio Yanieri lo empató tres minutos después, Daniel Antelo volvió a anotar para hacer pasar a los celestes a falta de nueve minutos para que terminara el partido y Daniel Martínez cerró el marcador poniendo luz con el 4 a 2.

Oriental vuelve a la B que ya lo tuvo como protagonista entre 1980 y 1987, llegando incluso a pelear por posiciones de ascenso a la A en 1980. Su cancha, el Parque Oriental, está ubicada dentro de los límites de Montevideo y fue allí donde ha jugado como local en toda su participación en la AUF. Naturalmente, sería bueno que siguiera siendo local allí.

El equipo paceño llegó a la final de la C por haber sido campeón del Apertura, mientras que Torque lo hizo como campeón del Clausura.