domingo, 2 de noviembre de 2008

¡Grande, Pa!

Biguá es el mejor de Sudamérica
El equipo de Villa Biarritz logró, luego de 16 años, un nuevo triunfo para el básquetbol uruguayo. Con la obtención de este título demostró que crecimiento que ha tenido lugar en los últimos años en la competencia local se ve reflejado en los torneos internacionales, ya sea de clubes o de la selección. Además de traer de Guayaquil la copa del Sudamericano de Clubes Campeones, los dirigidos por el argentino Néstor García volvieron invictos.
Hace algunas semanas parecía que Biguá no viajaba. Se dijo que no se consiguió el monto de dinero necesario para viajar, y todo pintaba para que no hubiera representantes uruguayos en el Sudamericano. Pero finalmente la plata apareció y el pato viajó. Como si fuera poco, con el dinero recaudado en la venta de una rifa que organizó el plantel, cuyo premio eran las camisetas de los jugadores más destacados, se logró que viajaran a Ecuador los 12 basquetbolistas que defienden al conjunto de Villa Biarritz.
Entonces vino el desafío. El primer día le ganó a Minas Tênis por 84 a 77. Luego derrotó al conjunto local de Barcelona por 96 a 54. Al día siguiente tuvo lugar uno de los choques más difíciles ante los argentinos de Libertad; también ganó el pato, por 90 a 89, luego de un alargue. En ese encuentro Leandro García Morales fue un infierno y convirtió 44 puntos. Con estos tres triunfos estaba todo dado para que Biguá saliera campeón, pero había que esperar a enfrentar al otro conjunto de Brasil, Univille. Con gran categoría, el pato se llevó el punto por 81 a 79 y de esa manera se aseguró el título de campeón. En el cierre del certamen jugó ante Liceo Mixto de Chile, equipo al que derrotó 71 a 65. De esta manera los orientados por Néstor García triunfaron en los cinco partidos que jugaron y fueron campeones de punta a punta.
Para completar el excelente desempeño de los uruguayos en el campeonato, García Morales se llevó el trofeo de "Jugador más valioso" del torneo. El ayuda base de la selección nacional fue el goleador con 94 puntos, 23,5 por encuentro.
Biguá consiguió su segundo título internacional; el primero lo había logrado en 1992 en Montevideo y éste fue el primero obtenido fuera del país.

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